La Hija De Neji Hyuga |Boruto: Next Generation|

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KEIKO Y KIRA trataban de aue las personas no pasaran más de la entrada junto a unos guardias.

-¡Por favor retrocedan!- exclamó Kira.

-¿Me recuerdas por qué decidimos ayudarlos?- pregunto Keiko apartando a un sujeto que trataba de trepar la puerta.

-Por que somos amables, además de que es nuestro deber ayudar a los demás, ¡Oiga!

Keiko vio como un hombre mayor de edad habia tratado de trocar a Kira, ella apretó sus dientes y aparto a los guardias junto a Keiko.

-¡Hakkesho Kaiten!

Cuando alejo a la gente y los reporteros soltó un suspiro, puso una mano en su cintura y vio como todos se ayudaban entre ellos para pararse.

-Estoy hasta aqui- levantó su mano hasta más arriba de su cabeza -de Noche Blanca.

Un reportero y su camarógrafo se acercaron a ella para grabarla sin que ella se diera cuenta.

-No me interesa lo que esa gente haga para ganarse la vida pero es suficiente- frunció el ceño y se cruzó de brazos -roban a los ricos para los pobres, eso es ridículo. Robar es robar y punto. Cuando los ricos se vuelvan pobres y los pobres ricos ¿entonces que? Le robaran a los que era pobres para dárselos a los que eran ricos, es un círculo vicioso.

-¿Usted que pienso de Noche Blanca?- pregunto un reportero acercando el micrófono a Keiko, ella se lo quito y miro directo a la cámara.

-Noche Blanca es un grupo de ladrones, lo que yo hago con los ladrones es atraparlos. No me importa cuanto tiempo me tomé pero los encontraré uno por uno, haré lo que él Hokage no pudo hacer desde el principio. Detener a Noche Blanca para siempre...

(...)

Keiko había activado su Byakugan cuando escucho gritos a solo varios metros de su lugar, soltó un suspiro cuando supo que solo se había caído cosas de una tienda.

-Si mí Byakugan pudiera ver mas haya de la aldea desde donde estoy podría encontrar a noche blanca más rápido- susurro ella retomando sus pasos.

El tiempo había pasado lento cuando un chico de cabello rojizo había pasado por su lado, ambos cruzaron miradas pero habían seguido su camino, pero algo en la cabeza de Keiko decía que debía parar.

Pero no le hizo caso.

Solo siguió su camino por la Aldea hasta llegar a las escaleras de un parque, se sentó en uno de los escalones y cruzo sus piernas.

-Tontos de Noche Blanca- murmuró viendo el atardecer.

«-Mamá...

-¿Que sucede tesoro?- le pregunto Tenten cuando se despedía de un cliente.

-¿Papá hace cosas buenas fuera de la aldea...?

-¿Por qué esa pregunta?- exclamó sorprendida, se agachó hasta Keiko y la agarro de sus hombros.

-Leí en la.. biblioteca que además de los ninjas buenos, hay ninjas malos...- respondió ella jugando con la punta de sus dedos -¿Papá es un ninja malo?»

Keiko volvió a la realidad cuando escucho pasos venir hacia ella, abrió sus ojos y vio como un chico de cabello rojizo pasaba por su lado con un paquete en sus manos.

Volvieron a cruzar miradas, cuando paso por su lado ella lo siguió con la mirada hasta ver qué se detenía hasta una banca dónde Shikadai jugaba Shogi.

-Vaya, ni siquiera lo había visto- dijo para ella misma, alzo sus hombros y siguió viendo el atardecer.

(...)

Un viento frío la hizo despertar, levantó la palma de su mano cuando un pequeño copo cayó en la misma.

-¿Desde cuando neva aquí?- ella cerro su mano dejando que el copo se derritiera en agua y se escurrierá en su mano -Noche Blanca.

Corrió escaleras arriba cuando escucho un grito, detuvo sus pasos cuando vio picos de hielo separar a Shikadai y el chico peli-rojo.

-Sabia que no eras de por aquí...- dijo ella llamando la atención de ambos -Nadie me sigue todo el día luego de decirle a la prensa mí opinión sobre Noche Blanca. Shikadai, vete.

-Keiko.. yo.

-¡Ahora! Es una orden- activo su Byakugan y saco un Kunai. -Para ser miembro de Noche Blanca eres muy joven, ¿No quieres huir? Eres solo un niño...

-Voy a luchar como miembro de Noche Blanca que soy- respondió él -Tu debería huir- dirigió su mirada a Shikadai -Eres un ninja y no intentas detenerme- Ryogi puso dos dedos frente su rostro, Keiko lo miro sorprendido y corrió hacía Shikadai. -Sabia que eran solo palabras.

-¡Ryogi!/¡Shikadai!

-¡Hyouton: Mangehyou!- Keiko salto sobre Shikadai y alejarlo del lugar cuando picos de hielo estaban por atacarlo -No puedes hacer nada...

Ryogi se alejo del parque y Keiko se puso de pie revisando que Shikadai no tuviera heridas, soltó un suspiro pero de pronto se puso de pie para buscar el Chackra de Ryogi.

-¡Shikadai avisa a la policía Militar ahora!- ella no que él respondiera cuando salió corriendo fuera del parque.

Con su Byakugan buscaba el Chackra de Ryogi, guardo el Kunai y trepó a un techo para seguir corriendo.

Al lograr verlo correr por unas calles desoladas de Konoha ella apresuró su paso y logro llegar frente a el y golpear su mejilla.

-¡Debes parar con todo esto! ¡Créeme, esto no hará ningún cambio a tu vida! ¡Solo serán ladrones siendo perseguido toda su vida!- grito Keiko viendo cómo Ryogi se volvía a poner de pie.

-Tu no lo entiendes...

-Claro que si, crees que por qué alguien te dijo que robar para dárselos a alguien más es bueno. Pero no lo es... Solo estás siguiendo órdenes para robar, no es nada caritativo- desactivo su Byakugan y extendió sus brazos -Sabes que esto está mal, solo debes detenerte, entregarte a la policía y todo se-

Keiko no pudo terminar su frase cuando recibió un golpe en su nuca dejándola inconsciente, cayó al suelo golpeando su rostro.

-Te estabas tardando mucho- le dijo. -Casi empezamos sin ti.

-Lo siento. No volverá a pasar- respondió Ryogi.

-Se que no- en su mano apareció un pico de hielo, Ryogi mantuvo su postura al ver qué el clavaba el pico de hielo en el estómago de Keiko -Ella solo causaba problemas, ya vámonos.

-Si.

Ambos empezaban a alejarse del lugar dejando a una Keiko inconciente y malherida en medio de esa calle desolada.

Solo podía ver su sangre esparcirse por el suelo, él desvió la mirada cuando ya solo podía ver calles oscuras.

-Lo siento- pensó Ryogi.

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Ta Ra!!

Espero les haya guardo mucho.

Muy pronto estará el siguiente capítulo!

Sigan leyendo!

Dattebayo!