La Hija De Neji Hyuga |Boruto: Next Generation|

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ELLA QUEDÓ parada frente a la torre Hokage, levantó su mirada viendo las cintas de diferentes colores anunciando que los demás Kages estaban allí.

–¿Justo ahora quieren reunirse?

Murmuró ella, giro sobre su eje y camino lejos de la torre Hokage, guardo sus manos en sus bolsillos y miro al frente.
Pero sintió como alguien la seguía desde hace tiempo, al voltear lanzó un Kunai. Pero al ver solo un niño entro en pánico blando otro desviando el primero.

–¡¿Estás bien?!– corrió hacía él y reviso su rostro –¿Por qué rayos me sigues?

–¡N-No te seguía! Yo estaba.. viendo.. ¡Viendo un gato! Si, eso.

–Bien, y ya deja de seguirme...

Se puso de pie otra es y siguió su camino viendo de reojo al niño, giro en una esquiva y se escondió atrás de una pared, asomó su cabeza y vio al mismo chico.

–¡Eh! Se escapó...

–¿Que haces?

Él se asustó al ver a Keiko atrás de suyo, cayó de espalda y retrocedió unos pasos, se volvió a poner de pie y se cruzó de brazos.

–¿Ya me dirás por qué me sigues? No tengo todo el día...

–Teadmiro...

–¿Que dijiste?– Keiko acercó su oído para escucharlo mejor.

–Yo... teadmiro...

–Habla más alto-

–¡Te admiro!– grito furioso.

–Ah... ¿Por eso me acosas?

–Tal vez... ¡Pero lo hago para aprender a ser como tu!

–Un.. admirador– Keiko se cruzó de brazos y se puso a su altura. –No tengo tiempo para un acosador. Me voy.

Ella empezó a alejarse dejando lo solo, apretó sus dientes al sentir como la volvía a seguir, soltó un suspiro y volvió a girar.

–¿Que quieres?

–¡Enseñame a ser como tu Nee-chan!

–No soy tu hermana– murmuró ella –Ah... Bien– él sonrió mostrando sus dientes y se puso a su lado. –¿Cómo te llamas acosador?

–¡Me llamo Ren!

–¿Tus padres, Ren?– él bajo su mirada de pronto y jugo con sus dedos –¿Que tienes?

–Bueno.. ellos.. etto...

–¿Al menos tienes a alguien quien te cuide?– volvió a preguntar al saber la respuesta de se anterior pregunta.

–Se cuidarme solo...

–Eso es un no. Vamos, iremos por algo de comer, seguro no comes hace días...

–¡Hāi!

(...)

Keiko veía como Ren comía sin vergüenza la hamburguesa de forma rápida, sonrió de lado al verlo y siguió bebiendo su soda.

–¿Cómo supiste de mí?

–Todos saben de ti, rescataste al Hokage junto a los demás y acabaste con ese tekeshi. O eso escuche– respondió él bebiendo su jugo.

–¿Tu vas a la biblioteca?

–Cuando está cerrado, me gusta mucho el silencio y soy bueno para escabullirme. Soy silencioso.