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"Entiende que la fortuna no es sino infortunio interminable, por el desasosiego de adquirirla y guardarla y por la desolación que acompaña el perderla".
Śāntideva
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Ella abrió las puertas de la bodega e ingresó a paso pausado y ágil, envolviéndose en su toga de seda traslúcida, Aroha Roullie cruzó un largo pasillo flanqueado de altos estantes hasta llegar en donde habían dos mujeres ante una gran vasija de arcilla negra, una de ellas era una mujer de piel blanca, cabello negro y estilo de vestir roquero, la otra una de aspecto oriental, esbelta y que lucía un traje formal de dos piezas de color blanco.
—¿Qué sucede, has cambiado tu estilo? —preguntó Aroha acercándose a aquella vasija arrumbada en medio de una pila de pergaminos.
—Ya hay alguien que está usando el rojo —respondió Sanshim—. Me enferma... —la diosa se giró hacia la chamán—. ¿No deberías hacer un orden a este lugar? —ella alzó entonces una peculiar caja hexagonal—. ¿Qué hace esto aquí?
—¡Así que ahí estaba! —exclamó la chamán cogiendo aquel objeto, pasándole una mano por la tapa repleta de símbolos tebanos y runas de sellado y contención, añadió—. Llegará el día en que alguien lo necesite para el Contaminatio Ritualis, por ahora debe seguir aquí —concluyó dejando la caja en un espacio en el anaquel cercano.
—¿Por qué tienes cosas tan peligrosas y escalofriantes en medio de objetos sagrados?
—Es mejor aquí que en manos humanas —añadió Átropos.
Ahí las tres dirigieron la mirada hacia aquella vasija, en el agua del interior se veía reflejado lo que sucedía esa noche... Ahí Fleur Dumont se llevaba a Vincent Dankwood al interior de su auto después de quitárselo a Lilian Hotchner.
—La rueda de su destino ya comenzó a moverse —comentó entonces la mayor de las Moiras.
—No se podía esperar otra cosa, era lo inevitable, después de todo es lo que sucede con los Casos Especiales como él, ¿no? —dijo Aroha mirando de soslayo a Sanshim—. ¿Qué otra salida hay?
—Que se salde la deuda, es la única opción —repuso aquella otra diosa dando la media vuelta y dirigiéndose hacia la salida de la bodega.
—Entiende que la fortuna no es sino infortunio interminable, por el desasosiego de adquirirla y guardarla y por la desolación que acompaña el perderla —recitó Aroha, al ver que Átropos le miraba alzando la ceja, la chamán agregó—. Lo leí en alguna parte.
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Cafetería Dolcezza (sábado 14 de marzo – 10:30 a.m.):
Avanzando hasta el mesón de pedidos, Ludovico Murphy se giró hacia Daniel Williams y le preguntó qué es lo que deseaba pedir, el muchacho escogió un americano mientras que él optaba por un té helado rojo, para cuando aquel experimentado abogado pasaba su tarjeta, volvió a mirar al asistente colocando una mano en la cadera con expresión interrogante.
—¿Dónde están los abogados Dankwood y Hotchner?
—Ambos fueron a ver a los gemelos —respondió Daniel.
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La legión del Caos (Temporada 4) [Eldarya]
Fanfiction“Si el tiempo se va en otra dirección ¿qué sucederá en el futuro…? Con todo lo que he hecho… personas que no debían morir lo hicieron y otras que no se han salvado. ¿Crees que… esto pueda terminar en un desastre?” El pasado y el presente se fusionan...