Capítulo 84: Estaba advertido. Parte III.

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"Si el sufrimiento es inevitable, si nuestros problemas en la vida son ineludibles, entonces la pregunta que nos deberíamos plantear no es '¿Cómo dejo de sufrir?' sino '¿Por qué estoy sufriendo, con qué propósito?'.

El sutil arte de que te importe un carajo - Mark Manson

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Silicia - Italia (23 de diciembre del 2020 - 13:45 p.m.):

Parándose ante el espejo, Flavio se terminó de acomodar los gemelos en las mangas de su camisa y concluyó con el nudo de su corbata. Ahí se detuvo algunos segundos, observándose con atención, respiró hondo y se giró para ingresar a su dormitorio. Vestido impecablemente con un traje formal completamente negro, cogió su celular de la mesa de noche viendo el chat abierto que durante gran parte del día, desde que se había separado de Eowyn en la mañana, había estado observando... pero así como antes y ahora no escribió nada... después de todo no sabría que decirle a Masao...

Suspirando, guardó en último lugar el teléfono en su maletín y salió del hotel en el cual se encontraba. Cruzó el patio interior de adoquines negros y siguió adelante hasta la calle inmediatamente después de cruzar la gran entrada del edificio. Ahí ya había un auto negro esperándole en cuya parte posterior se subió, Adriano se acomodó tras el volante y le miró a través del espejo retrovisor.

—A casa di Emiliano —dijo Flavio desabrochándose el botón central del saco para estar más cómodo.

—Sí, consigliere.

El chofer inició la marcha en el acto. Con eso Flavio centró la mirada en el exterior, viendo las fachadas de los edificios y sintiendo el suave viaje sobre los adoquines de las calles. Media hora después, ya habían dejado la ciudad para adentrarse en los extensos viñedos que les anunciaban que estaba en camino. Flavio hasta ese punto seguía revisando los documentos y archivos que Velkan durante todo ese tiempo le había estado suministrando, estudio que solo interrumpió cuando escuchó un sonido de motor desde el exterior, mirando por la ventana, vio una avioneta amarilla comenzar a volar a baja altura para luego iniciar con la liberación de líquido sobre los viñedos, tras eso el nephilim volvió a fijar la mirada en la tableta.

Adriano detuvo el auto finalmente ante un gran portón resguardado por dos hombres robustos armados con metralletas, bajó el vidrio de su lado y dirigió sus ojos verdes hacia el guardia que se acercó.

—Cosa stai facendo qui? —preguntó aquel, pero después de dar un vistazo hacia el interior y reconocer a quién iba sentado en los asientos de los pasajeros, se enderezó y le hizo una seña a su compañero, un segundo después, Adriano ingresaba el vehículo al interior de la villa.

Y solo unos minutos después Flavio estaba subiendo los escalones hacia la terraza de mármol al encuentro de Emiliano Lombardo al cual encontró ante una pequeña mesa circular disfrutando de un plato de espaguetis y una copa de vino tinto.

—Come puoi fare affari il giorno del funerale di tuo nonno? (¿Cómo puedes hacer negocios en el día del funeral de tu abuelo?) —preguntó Emiliano en tono burlón.

Flavio no respondió de inmediato. En el último tiempo todo había sido un torbellino, en el momento en que Velkan le había llamado para esa reunión, Flavio había entendido que por mucho que lo intentara, jamás podría haber dejado atrás su pasado... lo que había sucedido con la tía Umiko y su ruptura con Masao era la consecuencia de su tozudez...

La legión del Caos (Temporada 4) [Eldarya]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora