Era tarde y Harry estaba bastante borracho. Hermione acababa de llevarse a Ron a la cama, besando la mejilla de Harry y deseándole buenas noches mientras se iban. La mayoría de los demás parecían haberse ido también, Harry no se había dado cuenta exactamente de cuándo. Era ese tipo de borracho para el cual el tiempo saltaba sin que se diera cuenta. Estaba mirando por la ventana. Afuera, algunos albañiles seguían trabajando en la noche, con luces brillantes que iluminaban las dañadas murallas de la torre central. Se sentía bien ver cómo se recomponía algo.
Harry se volvió hacia la habitación. Goyle roncaba en la alfombra junto al fuego. Draco estaba tirado en el sofá donde Harry lo había dejado hacía horas, sólo que ahora tenía la cabeza en el regazo de Pansy y ella le acariciaba el pelo. Harry se sintió vagamente celoso. Se dirigió a trompicones hacia el sofá, empujó suavemente los pies de Malfoy hacia su cuerpo y se sentó.
— ¿De qué va todo esto, entonces? —preguntó, tratando de sonar jovial, pero temía que hubiera parecido más bien exagerado y amenazante.
—Estás borracho. —comentó Parkinson.
—Lo estoy. —asintió Harry con solemnidad.
—Esto es amistad, Potter —le informó ella, con frialdad—. No eres el único que tiene gente que te cuida.
A Harry no se le ocurrió una buena réplica, así que en su lugar se limitó a asentir con la cabeza.
—Muy bien, cariño —dijo Pansy, cambiando completamente su tono, mientras daba una pequeña palmadita a la mejilla de Draco—. Levántate, ya me voy a la cama.
Malfoy se sentó, mirando vagamente por la habitación, obviamente no estaba precisamente sobrio. Pansy entonces le dio un pequeño empujón, haciéndolo caer en el regazo de Harry, en su lugar.
—Tu turno, Potter —le informó—. Draco es un miserable y patético borracho y ahora es tu problema. Cuida bien de nuestro chico. —y con eso, se alejó hacia el dormitorio de las chicas.
Harry no estaba precisamente decepcionado por tener a Draco en su regazo, a pesar de la advertencia de Pansy.
—Eh, tú. —dijo Harry, pasando los dedos por el precioso pelo de Draco.
Draco recogió las piernas en el sofá y luego se dio la vuelta, enterrando la cara en el vientre de Harry.
— ¿Estás bien? —preguntó Harry.
No hubo respuesta, así que Harry siguió acariciando la cabeza del rubio, buscando su cuero cabelludo para masajearlo lentamente, contentándose con el simple hecho de tocar.
No fue hasta unos minutos después que se dio cuenta de que Malfoy estaba temblando.
—Draco —murmuró Harry, confundido—, ¿estás bien?
Malfoy no sólo estaba temblando, el cerebro empapado de alcohol de Harry tardó un momento en ponerse al día, Malfoy estaba llorando.
— ¡Oh! —comentó Harry, inseguro de cómo proceder— Hey, ¿qué pasa? —le sonsacó, empujando suavemente a Malfoy hacia atrás, tratando de echarle un vistazo a la cara. Draco no cedió.
Con un poco más de fuerza, Harry hizo que el otro chico se sentara, inclinándose frente a él. Malfoy parecía desolado, agarrando los bordes del cojín del sofá, con la cabeza tan baja que Harry no podía establecer contacto visual.
—Oye, ¿qué pasa? —preguntó Harry amablemente, acercándose, tomando la cara de Draco con una mano y apartando las lágrimas errantes. Malfoy se mordió el labio, con los ojos llenos de lágrimas.
Finalmente, balbuceó:
—Sólo llévame a la cama, Potter, ¿de acuerdo? Te lo diré, es que... joder, esto es demasiado... humillante... no quiero que me mires, te... te lo diré en la oscuridad. —sus palabras eran lentas y un poco titubeantes.
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Un Camino A Seguir [ Harco ]
FanfictionDespués de que Malfoy sea atacado por unos miembros del E.D demasiado entusiastas, Harry se ve en la obligación de ayudarle a recuperarse. Malfoy no está especialmente contento con ello. Disclaimer Los personajes, lugares y hechizos, son propiedad...