CAPÍTULO 44.

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CAPÍTULO 44.

Han pasado un par de semanas desde que empezamos la desintoxicación con Daniel, le ha costado, he tenido que pasar noches en su casa vigilándolo, acompañándolo y apoyándolo.

Todo ha valido la pena para verlo ya mucho mejor, tengo fe de que no vuelva a pasar, aunque mi parte sincera sabe que hay muchas más probabilidades de que vuelva a consumir en mi mayor descuido y en su caso en su mayor debilidad o tentación.

Con Gates todo ha surgido con más normalidad, Lucas no da detalles de lo que habla con su tía o sea la madre de Gates, pero la ha tenido calmada.

Hemos estado saliendo mucho más seguido todos juntos y a Melania le veo esa típica sonrisa cuando trae entre manos algo o mejor dicho "alguien"

Jayden como siempre feliz, aunque desilusionado porque también ha notado la felicidad repentina de Melania y piensa que sus oportunidades ya se fueron al carajo.

No es que yo quiera, pero sería curioso verlos a ellos como algo más que amigos.

Hace un par, bueno… muchos días llamo el mismo doctor de mi progenitor a decirme que todo había salido bien, que hubo una pequeña dificultad, pero que ya Ricardo estaba fuera de peligro.

- Lo pueden desconectar- hablo apenas pongo mi teléfono en mi oreja.

- Habla con el doctor de su padre.

- Aja, lo puede desconectar- estoy apunto de colgar.

- Señorita, es para avisarle que su padre está muy bien.

- Qué mal doctor es usted al no írsele la mano- ahora sí cuelgo mientras la rabia se me sube a la cabeza.

Estoy saliendo del baño de la casa de Daniel para ir a desayunar y hacer unos pendientes con Gates.

- Chao bizcocho, nos vemos luego- me despido dándole un beso en la mejilla mientras está acostado en su cama viendo una nueva serie que salió.

- Te cuidas- me sonríe apartando su vista del computador.

- Siempre me cuido- me hago la modesta apartándome el pelo de mis hombros.

Le mando un beso y voy saliendo.

- Alana- me volteó hacia él.

Me acomodo mi corto cabello.

- Te quiero mucho bizcocho- me sonríe de medio lado-. Gracias por todo lo que has hecho por mí.

- ¿hecho? Es lo que vamos a hacer idiota, recuerda que aún falta que me lleves a comer ajiaco, buñuelos, empanada- Me río.

Ahora sí salgo de la casa y me voy viendo a mi misma mientras bajo las escaleras del edificio.

- Hola cosita linda- le estrujó el rostro a Gates y le doy un gran beso.

- No me molestaría venir a recogerte todos los días si me vas a seguir saludando de esa manera- se peina su cabello con su mano.

- ¿Qué vamos hacer hoy? – pregunto entusiasmada.

Que mis amigos y los seres que quiero de mi alrededor estén bien y felices, para mí es más que suficiente para yo sentirme igual.

- Vamos a desayunar primero – me sonríe como lo hace un padre para calmar y balancear a su hija imperactiva.

- ¿puedo elegir el lugar? – vuelvo a girarme hacia él.

- No- responde seco y sonríe mirándome de reojo.

Aún con la vista hacia el frente suelta una mano del volante y la pone en mi mano sobre mi pierna.

Lo Que El Destino Quiera. [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora