CAPITULO 54.
- ¿Qué quieres hacer hoy? - me habla una voz muy lejana haciendo que me despierte de mi lindo sueño.
- ¿ah?
- ¿¡QUÉ QUE QUIERES HACER HOY!?- me grita en el oído.
- Tengo que estar en el aeropuerto a las cinco de la tarde- le recuerdo.
- Por eso te levanté a las ocho de la mañana- me avisa y yo abro los ojos como platos.
- No me jodas Melania, quiero llevarme un buen recuerdo de tu parte.
- Pues qué mal.
Me empiezan tirar del brazo hacia la orilla de la cama.
- ¡quiero organizar la casa! - Alzó la voz y ella se detiene.
- Bueno... Pensándolo bien, podría dejarte dormir otro rato.
- Qué buen pensamiento- me reacomodo.
Me vuelvo a quedar dormida, pero ya perdí mi maravilloso sueño.
Intento volver a cerrar mis ojos, pero oigo sonidos de metales cayéndose al suelo, ya que carajos.
- ¿tu porque te levantaste tan temprano? - le pregunto a Melania que cuando abrí la puerta, ella ya estaba ahí.
- Por esto- se pone de lado dándome paso para ver a Draco tumbado en las escaleras boca abajo babeando el tapete.
- ¿otra vez? - le susurró a Melania y ella sube los hombros.
- Lo saqué por la puerta de la entrada, se metió por la puerta del patio y por ahí lo saqué- explica en susurros-. Después entro por la de la cochera y cuando ya no tenía más supuestas opciones entro por la ventana del baño.
Abro los ojos.
- ¿el cupo ahí? - le pregunto sorprendida, el tamaño de la ventana del baño del primer piso es demasiado pequeño.
- Sí, insistió con subir a despertarte y darte las rosas de los días que no se vieron, le dije que no y empezamos a correr por alguna extraña razón, lo perseguí hasta la cocina y me empezó a arrojar cuánta cosa tuviera a la mano- se peina-. Por cierto, te rompió la licuadora.
¡que!
- ¡oye tú! - le pongo mi pie en su cara para levantarlo.
- Qué asco- refuta Melania encima de mi hombro.
- Cállate tú- la alejo-. ¿si le doy un pequeño empujoncito hacia abajo, pasaría algo? Digo, como prisión o algo así.
- Si Alana- voltea los ojos.
Genio de puercos el que tenemos hoy, aunque los puercos deberán tener mejor genio.
- ¡ay yo lo voy a empujar! - me desespero al ver que no se levanta.
- ¿tiene pulso? - se asusta Melania.
- No se, mírale haber- le doy espacio para que se acerque.
Se agacha junto a él.
- ¿Dónde se siente eso? - se corre el pelo de su cara.
- De aquí - la guio y ella lo hace.
- UF, si tiene, no está tieso- se levanta.
Se vuelve a parar junto a mi, ambas mirándolo.
- ¿y que hacemos? - me pregunta.
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Lo Que El Destino Quiera. [TERMINADA]
Diversos- ¿hiciste la ley de atracción? - si. - ¿Lo lograste? - También. - ¿Te funcionó? - Se fue todo al carajo. [Terminada] ©All Rigths Reserved