Capítulo 36

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—Deberiamos dar una fiesta—mencionó casualmente, sus ojos se dirigieron a la pequeña ventana del carruaje, podía ver que ya estaban entrando al reino, sería cuestión de sólo una hora o dos para llegar a Kärrgläss—, tal vez una baile de gala. 

Sería una buena idea, era lo adecuado. Debían comenzar a afianzar las alianzas de Eviglod con otros territorios, y él debía volverse cercano con todos los nobles y ricos del reino. Sobre todo en momentos como este. 

—¿A qué te refieres?—JungKook lo miró con duda—. Creí que estábamos de acuerdo en mantener el embarazo en secreto al menos hasta el quinto mes. 

Asintió suavemente, ambos habían acordado eso pero no se refería a una fiesta por su embarazo. El trasfondo de todo era más, sádico, por decirlo de alguna forma. 

—No diremos nada del embarazo, aún no—regreso su atención a JungKook, el dorado de sus ojos se fundió en el plata de los cansados orbes de su esposo—. Cuando lleguemos debes dar resolución a los juicios de varias personas, como Monoban y Seo—levantó una de sus manos y con delicadeza pasó la yema de su pulgar sobre la mejilla de JungKook—, ocupare el tiempo que tarden los juicios en organizar el baile y haremos que la fecha conocida con el día de la ejecución. 

JungKook levantó una ceja oscura. —¿Por qué necesitamos hacer eso?. 

Media sonrisa tiro de sus labios rojizos, por supuesto que JungKook preguntaría aquello. 

—Por qué…—recostó su cabeza en el hombro del azabache—, esperaremos hasta que el anuncio de que SeokJin sigue con vida llegue a los reinos—murmuró en voz baja—. Vamos a dejar que los traidores mueran y celebraremos ese día por esa misma razón, todos los nobles, ricos e influyentes van a asistir, los haremos presenciar las ejecuciones en la horca y después celebraremos con manjares deliciosos y vino caro. 

JungKook comenzó a acariciar su cabello provocando que sus párpados cayeran pesados debido al cansancio. 

—Y en medio de la fiesta—continuó murmurando—, lo único que todos podrán pensar es como esos hombres a los que conocían y respetaban, hombres con los que tenían una amistad, acaban de ser asesinados por nuestras órdenes, porque nos traicionaron, a nosotros sus Reyes—bostezo suavemente antes de acurrucarse más cerca del cuerpo contrario—, entonces entenderán que esas vidas que acaban de ser arrebatada nos son tan insignificantes que en lugar de guardar luto, celebramos por el gusto de hacerlo, despilfarrando dinero que muchos sólo sueñan con tener—una sonrisa perezosa apareció en sus labios al recordar como esa había sido otra de las muchas lecciones que había aprendido de SeokJin—. Por que en eso radica el verdadero poder, ellos no van a ser amenazados, no vamos a castigar a los otros traidores que se ocultan en el palacio, todos verán con sus propios ojos que no son nada contra nosotros y desistiran de sus ideas, porque no hay nada más cruel que ver tus planes arruinarse ante la grandeza del enemigo. 

 

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Rey de Coral  *KookV* Donde viven las historias. Descúbrelo ahora