Capítulo 41

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El tiempo seguía pasando y el silencio en aquella habitación comenzaba a sentirse asfixiante, la sensación abrumadora consumía su cuerpo. Ya no podía seguir fingiendo que podía sobrellevar aquellos sentimientos. 

La sensación fría que inundaba su cuerpo, la pesada opresión en su pecho, sumado a la constante sensación de temor e inseguridad. Algo estaba mal, pero no podía entender del todo que era lo que pasaba con él. Quería entenderlo y suponía que estaba relacionado a la maldición de su familia, pero hacia tiempo que Kürr había dejado de responder. 

No era como si ella le hablará con constancia, pero la diosa solía responder cuando él tenía dudas. Pero el perpetuo silencio que se le mostraba ahora era desconcertante, antes odiaba escuchar a los dioses pero ahora que eso le había sido quitado, lo extrañaba. 

—Escuche rumores, más nunca pensé que fuera tan serio. 

Aquella voz familiar logró asustarlo. Una muestra más de que sus nervios estaban llegando al límite. Mirando sobre su hombro se encontró con los ojos dorados de su primo. 

SeokJin estaba recargado en la puerta cerrada de la habitación, su postura podia ser relajada pero sus ojos no mentían, estaba preocupado. Preocupado por él.  

La vista trajo viejos recuerdos, memorias pasadas que volvían con fuerza a su mente. Parecía que las cosas no cambiaban, sin importar el tiempo que pasará. 

SeokJin siempre estaría preocupado por él, y eso no era bueno.

—¿De qué hablas? —TaeHyung trato de relajar su postura,  quería evitar que SeokJin viera lo mal que estaba. 

—Beom—Gyu me escribió. 

Los ojos del rubio no se apartaron de la figura del mayor, SeokJin comenzó a acercarse lentamente a él, tomando asiento en un pequeño sillón a su lado. 

—Claro que lo hizo —murmuró con cierta molestia—, y, ¿que fue lo que te dijo?.

SeokJin no respondió inmediatamente, sólo se quedó sentado, mirándolo fijamente. 

—No mucho —se encogió de hombros con pereza, tratando de no dar tanta importancia al tema—. Sólo mencionó que te ha notado raro. 

—Es algo sin importancia.

—Que esa sea tu respuesta me deja en claro que debo preocuparme —una ligera sonrisa tiró de los labios de SeokJin, pero la broma que se suponía debía tener su voz se vio ahogada por la preocupación. 

"Lo estas haciendo otra vez" 

El murmullo bajo en su mente lo hizo apretar los labios. No era la primera vez que pasaba, para este punto TaeHyung se preguntaba si realmente se había vuelto loco. Con cada día que pasaba y su mente se volvía mas confusa, aquello parecía  convertirse en realidad. 

—Estoy bien —aseguró con un poco más de fuerza de lo que que hubiera querido. 

SeokJin abrió los ojos un poco más debido a la sorpresa, esa fue la señal que TaeHyung necesitaba para tratar de calmarse. Debía respirar, retomar la calma y compostura, tenía que volver a tener el control de sus emociones. 

"¿No estas cansado de esconderte?

TaeHyung levantó su mano derecha para cubrir parte de su rostro, apretó los dientes con fuerza, se estaba volviendo loco, y no quería que SeokJin lo viera.  

"Deja de mentir, de mentirte. Tu nunca has sido el bueno TaeHyung." 

¡Basta!. Eso es lo que quería gritar, pero no podía hacerlo, la extraña mirada que SeokJin le dedicaba ya era lo suficientemente mala, como para empeorar la situación hablando de sus delirios. 

Rey de Coral  *KookV* Donde viven las historias. Descúbrelo ahora