Ayla...
Abrí mis ojos cuando sentí gritos fuera de la habitación, parecía que alguien estaba manteniendo una discusión acalorada. Puse una almohada sobre mi rostro y he intente volver a dormir.
-Están enojados- quite lo que cubría mi cara, encontrando a Noah con el cabello mojado y con solo una toalla amarrada a su cintura.
-¿Ahora qué hice?-
-El psiquiátrico, lista....- remarco la última palabra
Me senté en forma de indiecito mientras él se vestía -No voy a tener esa conversación. Es lo que yo elegí y estoy bien ahí-
-Oye, te apoyo. No me gusta la idea, pero... Se que eres una gran profesional y amas tu trabajo princesa - me sonrió mientras metía su cabeza en una camiseta color azul.
-Gracias amor-
-A ti por quererme, así de roto-
El momento romántico duró un instante, la puerta se abrió de golpe y vi 6 personas con todas las intenciones de enterrarme viva.
-¿Tienes algo que decirnos?- Jano levantó una ceja mientras recogía mi cabello en una pequeña coleta.
-No, ¿ustedes a mi?- hora de juegos mentales. Tres años de psicología, debería servirme para algo. Y sino, bueno... siempre era buen momento para aprender a rezar.
-No nos tomes por idiotas- Aless me miraba enfadado. -Habla-
-Buenos días- les sonreí - creo que eso tenía que decirles-
Hola dios... si soy yo de nuevo, creo que nos vamos a conocer antes de tiempo.
Noah río, mientras negaba con la cabeza. Me dedico una mirada de "estas cavando tu propia tumba princesa"
Me levanté y fui al baño, ignorando el hecho de que Roma estaba ardiendo en el cuarto. Al salir, regresé a la cama y me acomodé en el espaldar.
-No vas a volver a ese lugar- Bruno me señaló. -No es aviso, es una puta orden-
-Si voy a ir- mire tranquila mis uñas.
-No estás entendiendo, no te estamos preguntando. Es una orden Nena- Ezek se sentó en la cama, dándome una mirada desafiante.
-Lo anotare en la lista de, "me importa mierda lo que ustedes quieran ordenarme"-
ERES UNA GUERRERA MAMONA, no dejes que te manden.
-NO VAS A IR- el rubio de ojos bicolor me había gritado.
Mi paciencia tiene un límite, y este niño la acaba de sobrepasar.
-Creo que deberíamos hablar las cosas más calmados- Eric se acercó a Bruno.
-SUÉLTAME- lo alejó -NO TE VOY A PERDER A TI TAMBIÉN. NO POR UN PUTO CAPRICHO DE NIÑA MIMADA. NO IRÁS Y LISTO.- respiro -Y SI TENGO QUE ATARTE A ESTA PUTA CAMA PARA QUE NO SALGAS, LO HARÉ-
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Los chicos de mis libros 💎
Teen Fiction¿Qué tal? Mi nombre es Ayla López, tengo 22 y estoy completamente jodida ¿Por qué? La respuesta está compuesta de tres puntos. Déjame iluminarte en esta historia que quizás es real, o quizás también es parte de mi imaginación. 1)-Es simple, cada...