¿Qué tal?
Mi nombre es Ayla López, tengo 22 y estoy completamente jodida
¿Por qué?
La respuesta está compuesta de tres puntos. Déjame iluminarte en esta historia que quizás es real, o quizás también es parte de mi imaginación.
1)-Es simple, cada...
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Eric...
Iba por el centro de la ciudad buscando que demonios regalarle a mi prometida y madre de mi hijo/ hija, a mi lado se encontraba Noah y Loan, los tres idiotas no sabíamos que regalarle.
-¿Y un viaje?- Noah volvió a preguntar por tercera vez.
-Que no tonto- su gemelo lo golpeo en la nuca -esta embarazada y no puede viajar-
-Oye, deja de golpearme feo-
-Feo tú-
-Tú más-
Demonios, ambos se iban a pelear -¿si se dan cuenta que ambos son iguales?-
-No- respondieron al unísono.
Rei negando. -Concentrémonos en la pelinegra embarazada que tenemos en casa mejor-
-Esta bien, ¿Una fiesta sorpresa?-
Me detuve en seco, era una maravillosa idea y tal vez podríamos conocer a sus padres por fin.-Seria genial, voy a preparar todo ya mismo- comencé a caminar rápido.
-Oye- escuche a ambos gritar -oye no nos dejes, que vinimos en el mismo coche-
Saque mi móvil y marque el numero.
-Delincuente escúchame- tome aire -seria genial armar una fiesta sorpresa para nuestra prometida, ¿Qué opinas?¿crees que le guste?
-Eric mas despacio- gruño Aless al otro lado -opino que seria genial, si le va a gustar y por ultimo ¿Dónde están los gemelos peligro?-
-Venían detrás de mi- me voltee sobre mis pies -okay, los perdí, ya voy a buscarlos. Mientras puedes ir viendo hablando con los trillizos sobre hacerlo en el bar y hay que llamar a sus padres-
-Si puedo hacerlo, pero en este momento estoy con ella dormida sobre mi, no cuentes conmigo-
-Aless-
-Dije que no, sabes lo hermosa que se ve toda dormida y con el cabello revoltoso, me quedo aquí hasta que despierte y luego preparo todo-
Bufe volviendo por donde había venido, esos dos no podían estar muy lejos -¿Y Jano?-
-Comprando el regalo de su morocha y algo para el bebé-
-¿Y Bruno?- sentí como se quito el teléfono de la oreja.
-¿Qué quieres?- la voz del rubio con heterocromia se escucho algo molesto.
Entre a una tienda donde vendían carriolas y juguetes -¿Puedes hablar con el tío de Ayla?-
-¿Para qué?-
-Su cumpleaños es hoy-
-Lo sé, fiesta sorpresa a las 21 en el club de los tres pendejos- lo dijo con una simpleza -La planee hace dos semanas Eric, sus padres están en un hotel, llegaron ayer y van a ir directo al lugar-
