Capítulo 10: Secretos

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Alex Danvers.

Mientras Alex veía a su hermana irse con Lena, no pudo evitar sonreír ya que tenía conocimiento del gusto que Kara sentía por la ojiverde, por eso no intervino cuando Lena se ofreció a llevarla al baño. Salió de la taberna dejando a Mon-El y a James seguir disfrutando del espectáculo y les echó un vistazo a los caballos.

—¿Crees que estará bien? —Preguntó Sam detrás de ella y Alex giró a verla con rapidez. Frunció el ceño evitando no ponerse celosa ante el interés de Samantha por su hermana.

—No lo creo, necesitan más de un golpe para hacerle daño a Kara. —Contestó tajante y Sam asintió.

—¿Estás bien, Alex? —Sam se cruzó de brazos. —¿Por qué me hablas así?

—E-Estoy un poco ebria. —Alex sintió como se sonrojaba. Al parecer Sam si había notado sus celos.

—Nunca tomas hasta embriagarte, eres muy responsable con eso. —Sam tembló ligeramente pero aún así se mantuvo firme.

—¿Tienes frío?

—No me cambies el tema, Alexandra.

Alex no le hizo caso y se quitó la chaqueta que traía, colocándola sobre los hombros de Sam.

—Estás hermosa esta noche, Sam. —Susurró Alex tomando la trenza que la castaña había hecho en su cabello. —Quería hacer lo mismo que mi hermana y golpear a todos los que se atrevían a mirarte.

—No tienes que golpear a nadie, Alex... —Sam se acercó más a la pelirroja. —La única persona que me interesa que me mire, eres tú. —Sam le dio un pequeño beso en los labios.

—Sam... Yo no te convengo. —Volvió a susurrar Alex sobre los labios de la castaña.

—¿Por qué sigues repitiendo eso? —Samantha ya estaba cansada de aquel discurso que Alex le daba siempre que volvía.

—No tengo un rango tan alto, no puedo darte hijos. —Alex presionó la cintura de Sam contra ella.

—Eres la mejor doctora que Krypton tiene, te condecoraron por servir en la guerra y... ¡Maldita sea, Alexandra! Yo te amo, me importa poco o nada los títulos, los hijos, mis padres... —Sam volvió a besarla. —Yo te quiero a ti. ¿Por qué sigues evitándolo?

—¡Tengo miedo! —Exclamó apretando un poco su agarre. —Sammy... Eres tanto y yo soy tan poco, mereces a alguien que esté a tu altura, que te merezca. —Sam soltó un bufido y volvió a darle un beso a la pelirroja, se encargó de profundizarlo lo más que pudo, enredó sus lenguas y desordenó con sus manos el cabello corto de la doctora.

—Te amo, Sam. —Murmuró entre besos haciendo sonreír a la chica en sus brazos.

Lena Luthor.

Besar a Kara era la gloria.

Sus labios eran suaves; su lengua parecía tener bastante experiencia, sus manos eran firmes pero delicadas sobre la cintura y caderas de la pelinegra, su cabello era suave aún después de que sus manos lo enredaran...

Besar a Kara Zor-El era un sueño.

Lena sacudió su cabeza intentando concentrarse en aquel pizarrón lleno de información aún con una pequeña sonrisa en sus labios.

—¿Entonces planeas utilizar nanotecnología para tratar el cáncer? —Winn alejó la vista de algunos documentos y miró a la ojiverde.

Ujum. —Contestó Lena borrando algunas fórmulas del tablero. —Con algo de suerte podremos combatirlo por completo.

La Heredera del Sol (AU SUPERCORP) ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora