Capítulo 4

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Las vacaciones han llegado ya y hoy nos vamos a Francia. Hoy los niños se van a conocer a su padre. Están tan emocionados que yo.

La verdad estoy nerviosa voy a volver a ver a mi ex después de tres años y por si eso fuera poco, le daré la noticia de que es padre de dos hermosos angelitos. Solo le pido a Dios que los acepte.

Que no los vaya a rechazar. Eso sería doloroso para mis bebés, ellos tienen la ilusión de conocer a su padre y convivir con él. Si él los rechaza sería fatal para ellos y yo por supuesto no se lo perdonaría a Adrien.

Pero por otra parte sé que no sería capaz de hacer eso. Él quedará encantado con ellos cuando los conozca. Nadie podría resistirse al encanto de mis angelitos. Ellos son unos amores, aunque no voy a negar que aveces si dan dolores de cabeza. Ya que soy muy imperativos.

Pero bueno...

No me voy adelantar a las cosas y pensaré positivo. Ahora lo importante es que nos vayamos a Francia y los niños conozcan a su padre. También le pediré disculpas por ocultarselo, sé que debí decírselo en cuanto supe que estaba embarazada.

Pero para mí no era fácil. En ese momento no quería saber nada de él, no después de haber dudado de mí y mandado al hospital a su propio hermano. Y todo por unos celos sin sentido, todo por dudar de mi amor y creerle a Salomé.

Esa maldita mujer que logró su objetivo, alejarme del hombre que amaba. Pero bueno, eso ya quedó en el pasado, lo hecho hecho está. Tal vez logró separarme de él, pero al menos tengo dos pedacitos del amor que nos tuvimos y eso...es algo que ella no podrá evitar.

—¡Niños, ya vámonos!—los llamo.
—¡Ya vamos mami!—me contestan mis angelitos.

Suena mi teléfono y contesto.

—Bueno.
—Leticia, mi amor, soy Lucas—me dice Lucas. No puede ser, ¿Cómo descubrió mi número?

Lo cambie para que me dejara en paz y tal parece que no será así.

—¿Que quieres?—le pregunto seca—creo que te dejé MUY claro que NO quería saber de ti.
—Amor, déjame explicarte—me dice desesperado. Oh no. YO no voy a caer en su maldigo juego. Conmigo se jodió, no pienso volver con él.

Ahora me voy a ir a Francia y lo único que quiero es que me moleste. Estás vacaciones son para relajarme y pasarla bien con mis hijos. Sin necesidad de preocuparme por él. Lo único que quiero es olvidarlo y seguir con mi vida.

—No hay nada que explicar Lucas, lo que me hiciste no te lo pienso perdonar, me mentiste—le contesto molesta—no sé cómo aún tienes el descaro de llamarme, pero es la última vez que lo haces, te prohíbo volver hablarme—le advierto y espero que le haya quedado claro.

Por nada del mundo le pienso dar una oportunidad. Lo nuestro se acabó y para siempre. Gracias a Dios empecé los trámites de la anulación del matrimonio.

—Amor, por favor, perdóname, mi esposa me dejó...
—Y estoy feliz por ella—lo interrumpo—te lo mereces después de lo que nos hiciste, ella y yo somos tus víctimas, víctimas de tus engaños, nos mentiste a las dos, cometiste bigamia y deberías estar en la cárcel, por cierto ya empecé con los trámites de la anulación de nuestro matrimonio, no pienso seguir casada contigo—le confieso.
—¡Eso JAMÁS!—me dice alterado—tú eres mía y no te pienso dejar ir tan fácil—me advierte. Parece un desquiciado. Realmente lo desconozco.
—Estás enfermo, no vuelvas a llamarme—le cuelgo.

Definitivamente Lucas está loco. No pienso seguir casada con él. Ese matrimonio se anula. Lo que me hizo no merece perdón. Me mintió y me hizo creer algo que no era. Ahora entiendo todo, el por qué de sus salidas a sus "reuniones".

Dulce Tentación De Vuelta a Mi ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora