Capítulo 44

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ADRIEN

Conduzco lo más rápido que puedo. Necesito llegar cuanto antes al hospital. Mi mujer, mi Leticia me necesita. No puedo creer que haya sufrido un accidente.

Jamás había sentido tanto miedo como hasta ahora. Tengo miedo de perderla, tengo miedo que me dejé. Sin ella no podría vivir es todo para mí. Ella es mi mundo y sin ella...ya no quiero vivir.

Lagrimas salen de mis ojos. Pienso lo peor. No quiero perderla.

No quiero.

<<Resiste mi amor>>digo en mi mente.

Llego al hospital y salgo rápido del auto. Entro corriendo al hospital. Pregunto por mi mujer, me dicen que está en urgencias.

Voy a la sala y ahí está mi familia y la de ella.

—Adrien—me dice mi hermano.
—¿Cómo está?—pregunto con un nudo en la garganta. Temo que me diga lo peor.
—Aún no nos dicen nada—contesta su padre.
—¿Mis hijos?—pregunto por ellos.
—Ellos están bien, están con Anne-Marie, cariño—me contesta mi madre.
—Si la pierdo no...
—No se te ocurra decir eso Adrien—me dice molesto su padre—mi hija estará bien.
—Diego cálmate por favor—le dice su esposa.
—Necesito verla, necesito estar con ella—digo con impotencia, intento entrar a verla.
—Hijo no, no puedes verla—me detiene mi padre.
—¡Me importa una mierda, yo necesito verla!—grito con desesperación. Lo único que me importa en estos momentos es verla. Necesito estar con ella.
—Señor, será mejor que se calme o tendremos que sacarlo—me dice una de las enfermeras.
—La enfermera tiene razón hermano, así no ayudas a Leticia—me dice mi hermano para calmarme.
— Debemos orar por ella, para que todo salga bien—dice mi tío.

Yo asiento y me calmo. Aunque por dentro este desesperando por estar con ella, la mujer que amo me necesita y no me dejan entrar a verla.

No me imagino una vida sin ella. Ella es todo para mí, ella es mi mundo, mi todo. Sin ella mi vida ya no tendría sentido.

[***]

Pasan las horas y se me hacen eternas. Nadie sale a decirnos nada. Estoy desesperando. Necesito que alguien me diga que ella está bien.

—Familiares de la señorita Leticia Ramírez—dice un doctor.
—Nosotros—contesto de inmediato—¿Cómo está ella?—pregunto preocupado.
—La operación salió bien, pero...
—¿Pero que doctor?, Díganos que pasó—lo miro con preocupación.
—Ella cayó en coma—dice lamentándose.
—No—niego con la cabeza—no, no puede ser—lloro. Sus padres también se ponen a llorar y se abrazan.
—Lo lamento, no sabemos cuánto despertará, pueden ser días, semanas o incluso años.
—¿Podemos verla?—le pregunto aún con lágrimas en mis ojos. Aún no puedo cree que esté pasando esto.
—Si.

Voy a verla.

Entro a la habitación y ahí está, dormida y golpeada.

—Mi amor—tomo su mano y lágrimas salen de mis ojos. Me duele verla así, si yo pudiera cambiaría su lugar.

Acaricio su frente y le doy un beso.

—Te amo—susurro en su oído—tienes que ser fuerte, tenemos tres hijos que te necesitan, yo te necesito, sin ti mi vida ya no tendría sentido, te amo, te amo más de lo que te imaginas, eres mi vida, mi todo, sin ti ya no quiero seguir.

La amo más de lo que podría imaginarse. Ella es todo para mí. Si la pierdo ya nada tendría sentido. La necesito aquí, aquí conmigo, criando a nuestros hijos, envejecer juntos como lo prometimos.

Vienen a mi mente la primera vez que la vi. Se veía tan hermosa, pude notar su nerviosismo al verme. Eso me encantó más de ella, su inocencia, su forma de sonreír.

No puedo perderla ahora que el destino nos volvió a unir. Sé muy bien que no la merezco. No merezco tenerla a mi lado, que ella me ame. Pero yo la amo, la amo más de lo que se imagina, por ella estoy dispuesto a dar mi vida sin pensarlo dos veces.

Ella me enseñó a volver amar. Me hizo creer de nuevo en el amor. Incluso ella me hizo perdonar a mi madre y volver a convivir con ella. Ella le devolvió la luz a mi vida. Ella me hace el hombre más feliz del mundo. Solo con ella soy feliz.

Es la mujer con la que me quiero y me voy a casar, en cuanto despierte lo primero que haré será volver a conquistarla y pedirle que se case conmigo de nuevo. Convertirla en mi esposa por fin. La amo y deseo una vida juntos con nuestros hijos.

Ahora me preocupan los niños, como les voy una decir que su madre está en coma y no sabemos cuándo va a despertar. Son pequeños aún para entender esto, pero seré fuerte por ellos y por ella. Son lo que más amo y no quiero perder.

[***]

Han pasado dos semanas en las que no me he apartado de ella. No pienso dejarla sola, estaré aquí hasta que ella despierte. La echo de menos, los niños igual. Lo único que queremos es que despierte y vuelva a casa con nosotros. Su familia.

—Necesitas descansar—me dice Alejandro.
—No gracias—le contesto serio. No olvido que está interesado en mi mujer.
—Adrien, necesitas tener fuerzas, mírate, te ves mal, necesitas ir a descansar—me vuelve a decir. Que ni lo sueñe. No lo pienso dejar solo con MI mujer.
—Estoy bien—le contesto mirando a Leticia. Tomo su mano.

Empieza a despertar.

Alejandro sale a llamar a una enfermera.

—Amor—la miro.

Empieza abrir los ojos lentamente. Esta confundida.

Alejandro entra con una enfermera y un doctor y atrás toda nuestra familia.

Ella nos mira confundida.

—Cariño—dice su madre.
—¿Quiénes son ustedes?—nos pregunta aún confundida.

No lo puedo creer... ella... ella no nos reconoce.

Tenía la esperanza que nos reconociera.

—Hola soy doctor y estás en el hospital, ¿No recuerdas que pasó?—le pregunta el doctor.

Niega con la cabeza.

—¿Reconoces a estas personas?—le pregunta señalando a cada uno de nosotros.
—No doctor, no conozco a estar personas y no sé que hago aquí—le contesta mirándonos asustada.
—Tranquila, ellos se presentarán a ver si así los recuerdas—le dice el doctor a lo que ella asiente.

Se presentan cada uno y ella nos mira.

<<Por favor mi amor, recuérdame>>digo en mi mente.

Llega mi turno de presentarme.

—¿Tú quién eres?—me pregunta curiosa.

Sonrío por la forma en que me mira. Se ve tan tierna que me dan ganas de besarla y hacerla mía en este mismo instante.

<<Por Dios Adrien controlate>>digo en mi mente.

—Yo soy Adrien Fournier, tú novio y padre de tus hijos—le contesto.

Ella abre los ojos de la impresión. No lo puede creer.

Dulce Tentación De Vuelta a Mi ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora