Royal Academy

Capítulo 6.

ROXY

El beso se sintió desesperado e intenso, nuestros labios se habían extrañado, sus manos me agarraron de la cintura mientras yo le rodeé el cuello con mis brazos.

-De verdad que extrañaba esto -sonrió en medio del beso- Piccolina.

-Enzo -susurré cerca de sus labios.

No me dejó decir ninguna palabra más, nuestros labios eran como dos imanes. No sabía si había pasado cinco minutos o una hora, el tiempo cuando estaba con él no existía. 

MATTHEUS

Recordaba toda mi vida en San Petersburgo, alejarme de todos mis recuerdos fue y era difícil. Añoraba las mañanas en las que me levantaba y olía desde las escaleras el olor del café, desayunar en el comedor mientras veía a mi hermana pequeña tocar el piano, los paseos por el frondoso jardín antes de cenar... Todo eso se había acabado, en un solo pestañeo me encontré en un avión con destino a Islandia. Mi padre no me explicó el por qué de mi traslado y el cambio a otro país, solo me dio un informe del colegio en el que iba a cursar el último curso antes de ir a la universidad. En ese informe ponía toda la información que ofrecía la Royal Academy, pero lo que me dejó estático fue los expedientes que había después.

-Quiero que te mantengas con los ojos bien abiertos -miré a mi padre sin entender lo que me estaba pidiendo- No hace falta que los vigiles, ya tengo a gente que lo está haciendo.

-No entiendo mi papel, padre.

-Matheus -su voz me hizo estremecer- Eres mi alfil.

No me dijo nada más, en el vuelo lo que hice fue revisar los expedientes. El primero era de una chica, la foto que había mostraba como salía de un hospital, el segundo era de otra chica y también había una foto de ella saliendo del hospital de la otra foto. El último expediente era de un chico, no aparecía ninguna foto de él, solo llegué a leer la poca información que ponía.

-Es invisible, su padre sabe jugar bien sus cartas -miré a mi padre que estaba mirando por su ventana- Aaron Silva es la clave.

-No entiendo nada -cerré de mala gana el expediente- Quedan más de cinco meses para que empiece en la Royal Academy.

-Matheus no hagas que me arrepienta de contar contigo -no me miró, nunca me miraba a los ojos.

-No lo harás -le confirmé.

Nada más llegar a Islandia un coche nos llevó a una mansión perdida en mitad del bosque, todo el recinto estaba vigilado por los hombres de mi padre. Desde ese momento tuve que seguir una rutina, levantarme pronto para desayunar y atender a mis clases online, después de la comida me sometía a entrenamientos de resistencia y por la noche después de cenar me daban clases de seguridad y de leyes. Al principio no entendía mi papel hasta que me asignaron una personalidad nueva, todo lo que había estado haciendo era para poder adaptarme a lo que tenían planeado para mí.

MARIO

Llamé a la puerta de la habitación de las chicas, quería hablar con mi hermana antes de que se alargara.

-¿Puedo ayudarte? -Violetta abrió la puerta.

-Quiero hablar con Mica -la miré de arriba a bajo, su pijama negro de encaje era sexy.

-Deberías mirarme a los ojos y no comerme con la mirada -se apoyó en la puerta.

-No se de que me hablas -la ignoré para pasar a la habitación.