EL CRIMEN PERFECTO

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Lauren-Mila yo... yo quería decirte que no es necesario que nos divorciemos... digo, si tú quieres pues ni modo pero lo que yo quiero decir es que... es que...—se interrumpió con su propia saliva, no tenía idea de lo que estaba hablando, ella simplemente sintió la necesidad en ese momento de hablar con Camila, la chica ya estaba consiente y estaba esperando a que algún médico la atendiera. Camila que tenía su cabeza apoyada sobre su hombro la miraba con ternura y adoración, amaba cuando la apática Lauren se preocupaba por ella de esa manera, le encantaba ver el nerviosismo que ser tierna le causaba—lo primero es que no quiero que pienses que siento lástima por lo qué pasó ni nada, lo digo en serio, yo creo... yo creo que no... que no deberíamos separarnos oficialmente, podríamos tomarnos un tiempo hasta estar seguras de que quizá nuestro destino es no estar juntas, olvidar todo lo qué pasó y comenzar de cero, ya sabes... tu... tu—Camila le besó la mejilla y Lauren por fin pudo respirar, se sentía tonta hablando de esa manera, por un momento llegó a pensar que estaba sonando desesperada.

Camila-yo tampoco quiero divorciarme de ti Lauren—la periodista suspiró aliviada y unió su frente a la de ella—pero tienes razón cuando piensas que yo puedo creer que todo esto que me estás diciendo es a causa de lo que pasó hoy—Lauren iba a rebatirle pero ella no la dejó—este no es el mejor momento para tener esta conversación, démosle tiempo al tiempo si?—Lauren asintió con los ojos cerrados mientras apoyaba la parte trasera de su cabeza en la pared.

  Un minuto más tarde un doctor de guardia les hizo saber que era el turno de Camila. Las dos estuvieron de acuerdo con Valentina al no querer poner ninguna denuncia, pero Camila necesitaba ser atendida, sus golpes eran feos y el sangrado de su entrepierna cada vez era más abundante.

Camila se subió en la camilla y colocó sus piernas en cada extremo de esta, dejándolas totalmente abiertas frente al doctor que la iba a examinar. Este al ver que Lauren no pensaba salir del pequeño salón se dirigió a ella
Doctor-se va a quedar señorita?—le alzó una ceja y Lauren que estaba entretenida observando a Camila, elevó su vista frunciendo el ceño—que no es necesario que se quede ya que esto es una...
Lauren-me quedó, soy su esposa—el hombre las miró extrañadas y con su mirada buscó a Camila—tiene algún problema con eso?—Camila le apretó la mano a modo de regaño para que se callara la boca y tomó ella la palabra
Camila-ella puede quedarse doctor, es mi esposa—a Lauren el pecho se le agrandó al escucharla decir eso. Ambas se buscaron con la mirada disimuladamente para luego reglarse una tierna sonrisa de complicidad.

Mientras el doctor hacía sus estudios a Camila, Lauren sufría cada gesto de dolor que su esposa hacía cada vez que el doctor tocaba algún punto sensible en ella. La periodista sostenía su mano con fuerza, de esa manera también podía contener sus lágrimas para no alterar de más a la bailarina que bastante preocupada estaba ya por las caras de desagrado que el doctor hacía de cuando en cuando.

El hombre se quitó los guantes y los echó a la basura de mala manera, mirando acusatoria mente a Lauren que no entendía nada. Camila bajó las piernas de la camilla y se comenzó a vestir con ayuda de Lauren. El doctor fue hacía su escritorio y se sentó a la espera de que las mujeres también tomaran asiento.

Doctor-estás segura que ella puede quedarse a escuchar lo que te tengo que decir?—Camila y Lauren fruncieron el ceño a la vez
Lauren-me estás comenzando a caer muy mal, lo digo en serio, acaso ya no le dijimos que estamos casadas?—el doctor la ignoró por completo y se dirigió a Camila
Doctor-afuera hay oficiales de policia capacitados para tratar estos casos, solo tienes que decírmelo—le agarró la mano con cariño y Lauren lo odió
Camila-no, muchas gracias, prefiero dejar las cosas como están—ella y Lauren se miraron y asintieron en complicidad
Doctor-esto es un caso de abuso grave, tienes las paredes del utero desgarradas, y si no fuera por tu condición estaríamos hablando de una operación inmediata—Lauren apretó los puños tratando de contener la ira y el deseo intenso de ir tras el hijo de puta de Gonzalo. Tomó una gran bocanada de aire y con mucho trabajo preguntó
Lauren-de que condición habla?, que más tiene?, porqué dice que no la puede operar?—el doctor la miró con odio y habló
Doctor-encima de abusadora idiota—dijo con asco y desprecio y Lauren se insultó
Lauren-¡Vamos fuera! ¡Vamos que te voy a romper la cara!—exclamó poniéndose de pie y Camila la agarró del brazo para que se sentara
Doctor-¡Abusadora!—Lauren se puso de pie nuevamente y una vez más fue detenida por Camila
Camila-¡O te calmas o me esperas afuera!—exclamó de la misma manera—la que te va a romper la cara voy a ser yo como sigas de mal educada
Lauren-¡O sea, que yo si tengo que aguantar que el imbécil este me falte el respeto en mi cara?!—
Camila-doctor... no fue ella quien... quien abusó de mi—dijo con la cabeza bajo y luego miró a Lauren—espérame afuera Lauren—Lauren con su mirada le suplicó que la dejara adentro pero esta ya estaba lo suficiente enfadada como para retractarse—¡Ahora!—Lauren suspiró y antes de que esta se pusiera de pie el doctor dijo algo.

HABANA (Juliantina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora