No soy solo una cara bonita

Capítulo 57

Por fin podría decirlo: "Es mi novio"
Una sonrisa enorme aparece en mi rostro al recordarlo. Es mi novio. Es mi novio. Un pequeño chillido de emoción sale de mi boca sin poder evitarlo. ¿Quién diría que algo como esto podría hacerte tan feliz? Bueno, quizás sea una pregunta tonta para algunos pero tenía mis razones para creer que una pedida de pareja era algo que no podría emocionarme tanto como lo describían en películas y libros.

Pero de alguna manera también sabía que con Jack sería diferente (y así fue), con el todo es diferente. Mejor.

Cierro la llave y de inmediato dejan de caer gotas de agua por mi cuerpo y cabello. Estrujo mi cabello entre mis manos para quitar algo del exceso de agua y tomo las toallas para envolverme en ellas.

Mis huellas mojadas quedan en el camino hasta mi cama. Seco mi cuerpo y procedo a vestirme con una falda azul con un cinturón negro,un suéter de lana un poco holgado y blanco con una gruesa y gran franja azul en el medio (horizontal) y unas rojas más delgadas.

Observo un momento mis zapatos sin poder decidirme entre mis tenis azules o los tacones no muy altos que también son de color azul. Eligiendo al final los tacones y por si acaso, guardo los tenis en una bolsa. Cerca de la bolsa de los zapatos dejo mi teléfono, mi billetera y las llaves de mi casa,luego voy al baño para arreglar mi cabello en una cola alta y colocarme un poco de maquillaje.

Al terminar reviso la hora en mi teléfono mientras meto el suéter dentro de la falda al decidir que así se vería mejor.

Reviso un mensaje de Jack diciéndome que viene en camino. Ruedo los ojos al ver que no me hizo caso a esperar que yo fuera a por él.

15 minutos después tocan el timbre de mi casa. Me llega otro mensaje de mi novio - que lindo era poder llamarlo así- avisándome que ya estaba afuera. Le mando un mensaje diciéndole que bajo en un momento.

Salgo de mi habitación y bajo las escaleras. Voy al comedor dónde encuentro a mi madre y a la abuela cenando.

—Ya me voy—aviso¿regreso a las...?—la Abuela ni siquiera me ve pero a eso estoy acostumbrada. En cambio, mamá se levanta y me hace una seña para poder seguirla. Lo hago y llegamos a la sala de estar donde la veo rebuscar algo en su bolsa.

—Regresa a más tardar a las 12:30. No me gustaría que estuvieras afuera tan tarde. Dile a tu novio—no le había contado que Jack y yo ya éramos pareja oficialmente, pero de igual manera ella ya se refería a él como mi novio desde antes—que te quiero sana y salva, de lo contrario le corto los—

—¡Mamá!—chillo entre sorprendida y con ganas de reír.

—Pues eso—ella cambia su expresión seria por una que no logro descifrar—ahora, cambiando de tema. La "charla" ya te la dí años atrás—frunzo el ceño, sintiéndome un poco incómoda al ver de lo que quería hablar—y no sé cómo vayas en ese tema pero por cualquier cosa—abre su mano extendiendome un pequeño sobre plateado. Siento mi cara completa calentarse—ten. Puedo comprarte más cajas después—Ay mierda —o darte el dinero para que las compres tú. Como más te guste. Pero, repito, no sé cómo vayas en ese tema, pero por cualquier cosa creo que esto alcanzará por hoy ¿no?—no respondo de lo avergonzada que me siento—vamos, tómalo.

¿Qué tenían las personas con regalarme condones así de repente?

—Ahm...—carraspeo y obligo a mi cuerpo a reaccionar—gra-gracias—tomo el sobre.

—Que no te de vergüenza, son jóvenes y estarán sin supervisión adulta de noche y en una fiesta. Es algo normal. Pero cuídate. No sólo de embarazos, también de enfermedades.

—Sí sí, yo...sí, claro. Adiós mamá—agito mi mano libre en su dirección antes de dirigirme a la salida.

—¡Adiós Elsa! —se despide ella.