No soy solo una cara bonita

Capítulo 16

Camino con mi bandeja de comida hacia la mesa habitual, comenzando a comer solo cuando no veo a Hiccup, Anna o Elsa por ninguna parte.

Sin embargo, mi soledad no dura mucho cuando alguien se sienta frente a mí,levanto la mirada de mi plato y me sorprendo al ver a Corona.

—Bien... Necesito preguntarte algo. Algo rápido.

—Si, supongo que el que te vean cerca mío sería pésimo para tu reputación.

—La verdad sí —se encoge de hombros pero luego hace una mueca —lo siento —baja la mirada.

La veo con una ceja arqueada, confundido porque se haya disculpado.

—El punto, es que necesito que me digas si le contaste o no a Elsa — dice.

Frunzo el ceño.

—¿A qué te refieres?

—De lo de... —muerde su labio inferior y agita su mano de adelante hacia atrás — ya sabes.

—Ve al punto Corona —digo,dejo mi comida en el plato y me limpio las manos con la servilleta.

Ella rueda los ojos —De lo que pasó, entre...entre nosotros —alza una ceja.

La veo confundió ¿y a qué viene eso?

Me limito a negar, pero ella parece no estar satisfecha con mi respuesta.

—Le dijiste o no.

—No, ya te he dicho que no.

Suspira, en señal de alivio y se levanta, la imito.

—No vayas a contarle nada—me señala con su dedo índice —nada ¿me oíste?

—¿Y por qué no? Si en algún momento lo hago ¿a ti qué mas te da?

—No te incumbe.

—¿Disculpa? ¿Qué no me incumbe? Estoy 100% seguro que soy la persona más indicada para contar lo que pasó.

—Pues te prohibo que lo hagas —se cruza de brazos.

—Y yo te prohibo que me prohíbas cosas.

—Bueno pues yo te prohibo prohibirme que te prohiba.

—Deja esta tontería Corona... Dime ¿a ti qué más te da lo que haga o no con mi vida? —digo ya fastidiado.

—No eres tú el que me importa en este momento.

—Cómo si alguna vez yo te hubiese importado—ruedo los ojos.

Corona se descruza de brazos, parece que quiere decir algo, pero finalmente niega y toma la imagen de la chica superior a todos que cree que es.

—Haz lo que quieres Jackson—pasa por mi lado y se va.

Suspiro y vuelvo  a sentarme,para retomar mi comida.

Pocos minutos después aparece Hiccup.

—Hey—dice.

—¿Qué tal?

—Todo bien Jack ¿y tú?

Asiento con una sonrisa.

Son pocos los segundos que pasan cuando escucho a Elsa venir hacia nosotros. Identificandola antes, por la risa que soltó.

—Te veo luego — volteo encontrándome a la platinada a pocos pasos de nosotros, mientras le da un beso en la mejilla a una chica con alborotado cabello rojo. La pelirroja agita su mano y se va.