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Dos ángeles muy diablos

Jen Jones

Llevaba algunos días sin ver a Tony, pregunté por él varias veces y todos me decían lo mismo, que no era raro que desapareciera porqué era un hombre ocupado y lleno de asuntos importantes que dependían de su elevado IQ.

Había tratado de llamarlo, pero siempre obtenía el mismo resultado, buzón de voz. Los mensajes eran simplemente ignorados y la preocupación se adueñaba de mis pensamientos al pensar que algo le había pasado.

Y para empeorar la situación el día del juicio llegó. Fp enfrentaría sus cargos. Para ser honesta estaba muy nerviosa, a pesar de que se suponía que todo estaba resuelto mi cabeza no dejaba de imaginar posibles situaciones en las que todo salía mal, y ver a Jughead caminar de un lado a otro por todo el remolque no ayudaba mucho.

-Faltan 29 minutos -me informó por quizás décima vez-. No, 28 minutos.

-¡Bien! -me levanté y me dirigí a la puerta.

-¿A dónde vas? -preguntó sorprendido.

-Quiero hablar con FP antes del juicio.

-Keller no te dejará -respondió rápidamente.

-Quizás lo convenza.

-Está bien, pero por favor, vuelve por mi antes del juicio... No quiero llegar solo -pidió y asentí.

•••

FP Jones

Era sacado de mi celda por un par de oficiales, lo que era raro ya que aún faltaban unos minutos para el juzgado, supuse que teníamos que llegar antes por alguna cosa relacionada al juicio, así que no pregunté y dejé tranquilamente que me colocarán las esposas por la espalda y me sacarán de ahí.

-FP, tienes visita -me anunció Tom antes de que me sacarán de la comisaría al auto.

-¿Qué? -me parecía extraño que alguien me visitara antes del juicio.

-¡FP! -gritó Jen corriendo a abrazarme-. Te hemos extrañado mucho -susurró aferrándose fuertemente a mi torso.

-Gracias, Tom -incliné mi cabeza en un intento de devolver el abrazo.

Se sentía incómodo y extrañamente confortante. Siempre supe quien era yo, nunca me engañé pensando que mis actos eran lo mejor para mí o mi hijo, sabía porqué Jughead me odiaba y nunca hice nada al respecto, no tenía interés, la única razón por la que quise cambiar eso fue para evitar que fuera él quien descubriera mi participación en el homicidio de Jason Blossom.

Jughead sabía quién era yo mejor que nadie y estaba haciendo todo lo posible por sacarme de ahí. Jen había descubierto quien era yo y ahí estaba, abrazándome como si la vida se le fuera en ello. Me mataba.

-No te preocupes -susurró como si hubiera escuchado mis pensamientos-. Este juicio es nuestro -deshizo el abrazo para mirarme a los ojos-. Te prometo que todo esto saldrá bien.

-Jen, ya tienes que irte -la llamó Tom.

-Sí -asintió mirando a Keller y dió unos pasos hacia él antes de voltear por última ves-. Te ves bien, papá... arrasa con ellos.

Storm Blue || RiverdaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora