PANDORA © (Sombras #1)

CAPÍTULO 39

I WANNA GET NAUGTHY.

Pandora

Mañana es mi cumpleaños y necesito ropa adecuada para la ocasión, lo que significa día de compras con las chicas y Valeria, a quien por cierto tengo que recoger de la oficina porque tenía una sesión de fotos. También me dejé allí unas carpetas de la central por error que tengo que recoger.

Mientras me acercaba al edificio empresarial, noto mayor presencia de paparazis de la habitual. Frunzo el ceño por ello sin saber la razón de por qué hay más. Me acorralan cuando aparco el coche y me persiguen mientras camino la corta distancia entre el exterior y el interior del bloque empresarial. Me pongo las gafas de sol como signo de que no me apetece responder a lo que sea que preguntan.

Una vez dentro del edificio, algunos trabajadores me miraban más raro de lo habitual mientras cuchichean. Me meto en el ascensor sola y marco la última planta. Al salir de este y conforme me acerco al despacho, veo deambular a Luka y Valeria como locos, inquietos, como si quisieran deshacerse de algo antes de que yo entre.

—¿Qué hacéis y por qué hay tanto fotógrafo y periodista abajo? —me planto en medio del despacho, sorprendiéndolos, porque dan un brinco donde están.

—Pandora. No te esperábamos tan temprano —Luka esconde papeles a su espalda conforme me voy acercando.

—Me dejé aquí cosas de la central por error —me muevo para ver que esconden y ellos se mueven para que no lo vea—. Cortad el juego ya. ¿Qué escondéis?

—Nada, mamá —traga grueso pero le arrebato una de las revistas que intentaba ocultar—. ¡No!

Es una revista de cotilleos típica de la prensa rosa en la que yo aparezco en portada con un titular bastante creativo.

"¿Le va el poliamor a la polifacética empresaria Pandora Fiore?

La italiana ha sido captada por las cámaras de nuestros reporteros asistiendo a eventos, reuniones y citas con tres hombres diferentes y poderosos en la esfera social florentina. Nada más y nada menos que el editor de Vogue Italia Luka Bianco, el banquero y militar Dante Amatos y el empresario Marco Leone.

Reía, posaba y caminaba de ellos cogida de la mano, desatando la envidia de miles de personas deseando ser ella. ¿Estará experimentando nuevos horizontes nuestra empresaria favorita de la ciudad o simplemente le gusta tener la atención de los hombres más cotizados de toda Florencia?"

¿Qué narices acabo de leer?

—Convoca una rueda de prensa urgente abajo inmediatamente —pido a Luka.

—Enseguida —Luka sale disparado del despacho.

—Avisa a las chicas de que nos vamos a retrasar para la cita del desayuno. Diles que nos vemos directamente en la primera tienda —le hablo a Valeria mientras yo saco mi móvil para llamar a dos números a la vez.

—¿Es por ese artículo que han publicado? —dicen a la vez cuando responden a mi llamada.

—Sí —miro la hora en mi reloj con un movimiento de muñeca—. ¿Podéis venir a mi oficina en diez minutos? Voy a hacer una rueda de prensa desmintiendo este asunto.

—Nos vemos allí.

—Entrad por la puerta de atrás para que no os ataquen los periodistas y fotógrafos.

Cuelgo tirando el móvil al sofá al mismo tiempo que me dejo caer en él. Majaseo el puente de la nariz con los ojos cerrados recitando mentalmente un discurso de insultos con los que descargar las pocas ganas que tengo de pelearme con la prensa en un rato.