Cuarenta y dos.

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Pov Yoongi

Si tengo que empezar a contar mi historia, la recapitularia en los acontecimientos que me han ocurrido en este último par de meses, no suelo ser una persona que tenga una vida que valga la pena contar, no es que tenga una vida mala o aburrida, al contrario, pero simplemente, mi vida, es una vida común y corriente.

Pero últimamente, tengo mucho de lo cual contar... Mucho que quiero sacar de mi pecho.

Todo empezó aquel día en que él entró a mi vida, ese día en que sin esperarlo o anhelarlo, lo conocí por primera vez.

No puedo decir que lo que ocurrió ese día me lo esperaba, tampoco puedo decir que fue algo que alguna vez en mis años de vida haya sentido, mucho menos puedo mentir de tal manera al decir que aquello pasó desaparecibido por mí, porque no solo estaría mintiendo para quien escuché mi historia... Me estaría mintiendo a mi mismo.

Si tengo que empezar a contar, ese día lo recuerdo bien, incluso, cuando han pasado algunos meses, lo recuerdo a la perfección, recuerdo... Con total claridad lo que en ese día y en ese momento sentí. Acompañado de Taehyung, saliendo inesperadamente con él desde la granja, iba con la tarea de repartir los pedidos de su abuelo, el Sr. Kim. No era la primera vez que hacía esto, habían sido un par de veces, que por motivos de fuerza mayor, el abuelo de Taehyung me había dado el trabajo de ayudarle con algunos pedidos cuando él no podía hacerlo, eran trabajos pequeños que salían derepente, ayudarle con las entregas a veces con el papeleo o cosas por el estilo, era un trabajo fácil que solo requería ciertas habilidades del habla y de la personalidad, nada que no yo no tuviera sin emabrgo.

Así que, por obvias razones, no esperaba nada fuera de lo normal ese día. Ciertamente, no sabía que las cosas no saldrían tan normales como yo esperaba.

Porque fue la primera vez en mi vida, que alguien me deja sin palabras y flotando en el aire.

Aún recuerdo a la perfección el aroma tan dulce y sabroso que llegó a mi nariz cuando llegué a esa cafetería, aún recuerdo esa pequeña chispa que se encendió sin remedio dentro de mí y que fue capaz de avivar un fuego voraz que nunca antes había sentido, aún recuerdo con tanta claridad su voz, su sola presencia, mi corazón latiendo con un frenesí total que dolía... Nunca había sentido esto... Nunca me había ocurrido... Nunca.

Caminar con él para que me firmara unos papeles, conversar, mediar palabra, tratar de mantenerme cuerdo... Fue absolutamente una tortura.

Me pregunté... ¿Que era ese instinto tan poderoso que me decía que tenía que acercarme? ¿Que era este poderoso instinto que me hacía ansiar olfatearlo, marcarlo... Hacerlo mío?

Mis defensas cayeron una a una con solo ver su rostro.

Y la verdad sea dicha con mis propias palabras, siempre he sido un alfa que va de aquí por allá sin muchas preocupaciones, me gusta y estoy acostumbrado a la vida que llevo, me gusta la libertad más que nada en este mundo, me gusta poder tener lo que quiero con mi esfuerzo y dedicación, haciendo las cosas de manera justa. A la vez, no me es difícil ir conociendo gente, tal vez divertirme un poco de manera consensuada y de mutuo acuerdo para después seguir con mi vida en completa tranquilidad... Aquello no me cuesta.

Pero en este último tiempo, había pasado por ese momento de mi vida en donde estuve pensando que había tenido años actuando de esta manera, deliberadamente en el libertinaje y que ya era momento de buscar a alguien que me acompañe en el resto de mías días. Habrá sido un golpe de suerte o un gran milagro que con el tiempo he conocido a alguien que encaja perfectamente conmigo, he cruzado caminos con una chica buena, gentil, llena de fuerza, poderosa... Alguien que encaja a a la perfección conmigo.

Past Lives: Eternity || HopeVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora