Cambiar el mundo una muerte a la vez (reescribiendo, mismo nombre en mi perfil)

Capítulo 27

Me teleporté a casa, y comencé a lanzar mi magia a mares a la varita en un intento por domarla. Hizo que mi magia destrozara muchas cosas mientras los elfos las arreglaban, pero después de 4 horas, mi habitación casi destrozada, y mi magia por los suelos, la varita dejó salir una especie de ola cálida dentro de mi cuerpo que dejé de sentir cuando perdí mis varitas en aquella pelea contra el padre de Daphne en la que casi muero... Me di cuenta que no tengo lo suficiente para pelear contra alguien por muchos hechizos que sepa, debo gastar mi magia de golpe para aumentar su cantidad, y mejorar mis hechizos. Puede que sepa muchos, pero no están perfeccionados, así que debo entrenar hasta lograrlo, y aumentar mi velocidad de ataque, de qué sirve ser el mejor en potencia si mis ataques no son lo suficientemente rápidos para lanzarlos sin morir antes de hacerlo. En cuanto caí al suelo cansado pero con la varita aceptandome, la lechuza de Greengrass abrió mi ventana y entró, con una carta en las patas. Aparentemente las lechuzas no pueden entrar a Godric's Hollow, debo arreglar eso. Al no poder avisarnos, Daphne recibió mi carta, y posiblemente esa chica Hermione recibió la carta de Harry y Harry ya la haya recibido. Tomé mi maletín, y pregunté a Harry si ya tenía su carta, dijo que sí y ya había comprado sus cosas, así que fui yo solo, y me encontré con Daphne que estaba sola, con su hermana.

James: ¿Necesita esta damicela a un caballero oscuro?

Daphne: Oh, esta princesa en apuros necesita a su caballero de armadura color onix.

James: Entonces sígueme si quieres vivir en este desolado páramo repleto de ogros.

Daphne: Vamos, mi héroe de la serpiente.

Astoria: No entiendo.

James: No importa. Tu hermana necesita comprar las cosas de segundo año. ¿Verdad? Vamos a comprarlos, yo invito.

Pasamos el resto del día comprando el uniforme de nuevo por cuestiones de tallas, los libros, y algunas otras cosas para las clases de Alquimia, Astronomía, y Herbología. Cuando estábamos por terminar y solo faltaban unas cosas, Dora llegó corriendo con el periódico en las manos.

Nimphadora: James, ha salido.

James: ¿Quién?

Nimphadora: Tu tío ha escapado, mira.

Dora me dio el periódico del profeta, y en él leí. Sirius Black, posiblemente el más malvado hombre que ha pisado Azkaban ha escapado. Esto me hizo marcar un seño fruncido, así que comencé a moverme.

James: Daphne, toma 200 galeones, regrésame el cambio en Howards. Debo hacer algo.

Antes que responda comencé a moverme, llamé a Tobi mientras tomaba mi monedero.

Tobi: Tobi está listo para cualquier llamado, joven amo James.

James: Llama a cualquier elfo que no esté ocupado, cada uno de ellos. Los quiero a todos en casa en 30 minutos, si es posible un poco antes.

Tobi: Entendido, joven maestro.

Tan pronto Tobi se fue, Daphne parecía bastante seria, y Astoria parecía no entender.

Daphne: ¿Qué mierda puede estar pasando que estás tan exaltado? Dime ahora.

Le di el periódico ahora arrugado por mis manos, y en cuanto lo leyó su seño apareció.

Daphne: ¿Crees que ese bastardo venga por ustedes?

James: Te pido que no vuelvas a llamarlo así, y espero que venga por nosotros.

Daphne: ¿Hay algo que me pierdo?

James: Te lo explicaré luego, ve a casa de Dora y te buscaré. Yo mismo lo explicaré cuando te busque, por el momento compra lo que falta, y te pido que compres lo mío también y lo guardes para mí hasta el primer día. En cuanto termines porfavor envía a Astoria a casa y ve a casa de mi tía Andrómeda.