Me dijeron: «Piensa en algo que te haga feliz» Y te imaginé a ti, muerto.Blyana
Me sumergí tanto en el mundo que era Cless, que no sabía que el plan que había comenzado con el objetivo de proteger a mi hermana y amigos, ahora se había convertido en todo un movimiento. O bueno, no estaba al tanto de la cantidad de personas que ahora estaban involucradas porque sí tenía una idea de lo que sucedía.
Domingo había sido ascendido a Capitán, era el encargado de la guarida y eso era bueno, muy bueno, aunque no podía alegrarme como debería. Ese había sido uno de nuestros objetivos desde el principio: colocar a los nuestros en los puestos importantes.
Íbamos de camino a la guarida, pero mis deseos por ir allá no eran los mismos que cuando sabía que Cless me esperaba. Ahora ir allá era recordar, era tenerlo y no tenerlo en absoluto; era sentir con más fuerza el vacío que se había instalado en mi ser.
Nos movíamos en un bus junto a la tropa de Domingo, Lasly iba a mi lado y me sostenía la mano. Todos los demás no se acercaban a mí ni de juego y siempre me miraban con horror, eso me desconcertaba y me hacía sentir incómoda.
Por otro lado, dormir se había vuelto una pesadilla de nuevo. Noche tras noche se repetía ese día en el frente y nunca podía hacer más que ver. Era el único sueño que no le contaba a Lasly quién había insistido en plasmar en papel cada uno de ellos, aunque debo decir que contarlos me hacía sentir de algún modo mejor. Tal vez al contarlos me hacía entender que no eran más que sueños.
—Deberías tratar de dormir un poco —me susurró Lasly, envolviendo un brazo a mi alrededor. Suspiré acomodándome contra ella.
—No puedo —admití. Ya no gritaba como antes, pero el mundo dentro de mi cabeza era tan catastrófico y doloroso como el mismo infierno, sino era que ya estaba en él.
—Lo sé. Sé que sufres para dormir porque dormir requiere paz —me dijo abrazándome más fuerte y besando mi cabeza—. Y él era ese lugar tranquilo, pero si no duermes, te enfermarás. —Como si eso me importara, yo solo estaba... existiendo.
Estábamos en carretera y era increíble ver como el clima era un reflejo de cómo me sentía: estaba gris, una densa capa de nubes de tormenta tapizaba el cielo. Dejé caer mi cabeza en el hombro de Lasly y cerré los ojos unos segundos. Me quedé dormida hasta que una pesadilla y un gran estrépito me despertó.
—¿Qué sucede? —pregunté un poco aturdida. Lasly a mi lado se ponía en pie con desesperación y me llevaba con ella. Su cara contraída en una mueca de miedo.
—Emboscada —dijo y noté que todo a nuestro alrededor estaba más oscuro.
Los soldados se movían a gran velocidad, saliendo por las dos puertas del bus y apresurándonos para que bajáramos también. Salimos por la puerta trasera y cuando miré al cielo mientras me empujaban para ir a la orilla de la carretera, vi la nave. Dentro de mí explotó algo. Me solté de Lasly con la rabia acuchillando mi cuerpo.
El único camino es la venganza.
—Blyana, ¿qué haces? —preguntó ella asustada, las lágrimas ya corrían por sus mejillas. El viento nos traía el ruido de la batalla y el olor metálico de la sangre.
Me zafé también del soldado y fui al bus. Tomé un arma y le di una última mirada a Lasly quien me seguía llamando. El soldado siguió arrastrándola, pero yo fui al frente del bus donde los soldados peleaban. No bien salí, levanté mi arma y le di a uno en la cabeza. Otro quiso tomarme en sus brazos, pero forcejeé, le quité la daga que tenía en su cinturón y la enterré en su garganta. Terminé aterrizando en el suelo sobre mis rodillas y manos en medio de un gruñido. Volví a tomar mi arma y seguí adentrándome hasta que llegué a la altura de Domingo.
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Intersección [De mundos] #PGP2024
Ficțiune științifico-fantastică¿Qué estás dispuesto a hacer para proteger a los tuyos? ¿Estarías dispuesto a llenar tus manos de sangre? ¿Dejarías la moral de lo que está «bien»? ¿Te convertirías en lo que la humanidad llama «monstruo» por los que amas? Cuando el mundo es invadid...