Mi Nuevo Profesor. (YoonMin)

Capitulo final.

Min YoonGi:

Jimin cayó tendido en el suelo, el doctor salió corriendo por ayuda mientras yo me quedé con él.
Entre en pánico, sentí mucho miedo al verlo así, pero sabía que esto era aún más duro para él, solo podría mantenerme sereno para que tuviera alguien en quien apoyarse.

Algunas enfermeras regresaron junto con el doctor, lo subieron a una camilla y lo llevaron para revisarlo.

—Estará bien, solo es una pequeña conmoción debido a la noticia que acaba de recibir, puedes ir con él en cuanto lo estabilicen—me dijo el doctor ya que me había quedado mirando hacia donde se lo habían llevado.

No dije nada, solo suspiré.

—Nadie nunca está preparado para recibir malas noticias, pero te aseguro que son más fáciles de sobrellevar cuando tienes apoyo a tu lado—dijo y ambos salimos de la sala.

—Gracias—fue lo único que dije para después despedirme y salir a la recepción para esperar s entrar con Jimin.

Demoraron unos 30 minutos, después la recepcionista me indico que ya podría entrar a verlo.

Entre rápidamente, pero al verlo que estaba dormido me moví sigilosamente por la habitación.

Me senté junto a él y tome su mano. Me sentía un poco impotente, de alguna manera no habría nada que yo pudiera hacer para evitar todo esto, solo me podía quedar sentado esperando las malas noticias y dándole todo mi apoyo.

—¿Y—YoonGi?—lo escuché decir débilmente mientras intentaba incorporarse.

—No te esfuerces mucho cariño, ten paciencia—le dije mientras le ayudaba a sentarse.

—Lo siento, me esforcé demasiado, intente soportar mucho pero al final no lo logre—tomo mi mano y sus ojos dejaron salir unas cuantas lágrimas.

—Esta bien, esta bien, no tienes que disculparte, haz sido demasiado fuerte—lo acerque hacía mis brazos para que pudiera ahogar su llanto en mi, para que sintiera que no estaba sólo.

Continuó llorando un buen rato, hasta que se volvió a quedarse dormido. Lo acomodé y salí para comprar algo de comer para cuándo despertará, tal vez también era eso, aunque el decía que si, sabía que no estaba comiendo bien últimamente.

Cerca de ahí había una cafetería, le compré un Café Moka y un pastel de queso, yo solo me compré un americano frío y regrese al hospital.

Al entrar a la habitación ya está despierto otra vez, estaba sentado en la cama y al verme entrar me sonrió débilmente y sus pequeños ojitos están hinchados y rojos de tanto llorar.

—Hola cielo, te traje un pequeño postre—me acerque, le entre la bolsa donde venían sus alimentos y le deposite un pequeño beso en la frente.

—Gracias—dijo y comenzó a beber su café en silencio.

—Eres todo para mí, sabes que te amo y que siempre voy a estar ahí para ti, me duele verte así pero se que no puedo hacer mucho para que te sientas mejor.

—El hecho de que estés conmigo me basta—me sonrió y tomo mi mano. —Te amo—se acerco y nos besamos.

Comimos en silencio, ya que Jimin no había sufrido de algo tan grave, le dieron el alta y salimos a la recepción para esperar noticias de su padre.