egotistical ;; jjk

thirty-second ;; tengo novio.

—Kim SungMin...

Quiero pensar que aparentemente todo terminará poniéndose bien. En el caso hipotético de que el novio de HoSeok acepte mi rara proposición, que esperemos que sí, me gustaría que mis objetivos se cumplieran. Espero que con eso JungKook se de, al fin, por vencido gracias a mi actuación y que me deje en paz durante todos los años restantes de mis estudios universitarios.

Me tiene muy harta, realmente. Desde que comenzó a molestarme de esa manera obscena y asquerosa, sigo pensando en cómo hubiera podido yo evitar que esto sucediera. Tal vez si ese día del trabajo de matemáticas financieras hubiera llegado antes de NaYeon a pedir el libro que necesitaba, no hubiera sucedido lo que pasó en el club. Tal vez si no hubiera olvidado hacer ese trabajo, no hubiera sucedido todo esto. Antes de ese acontecimiento en el club, que no fue nuestro primer cruce pero si la primera vez que hablamos directamente, él no tenía idea siquiera de mi nombre. No se había detenido a grabar mi rostro y ahora cada que me ve y estoy sola se acerca a molestarme con sus idioteces.

Es muy odioso, demasiado. Aunque hay cosas que no entiendo muy bien, ¿Cómo fue que consiguió mi número de teléfono? Yo no se lo había dado a nadie a mis alrededores, solamente a mis amigas y ellas no harían eso. En ese entonces no lo sabían, mas no darían mi número a un desconocido sin motivo alguno, ni siquiera el de ellas. TaeHyung, ni hablar y bueno, pedírselo a JiMin sería arriesgarse a que lo supiera TaeHyung ya sea de forma directa o indirecta.

También está HoSeok, sin embargo lo conocí después y es imposible que le haya dicho mi número a JungKook.

Lo cual, me deja sin opciones, ya que no recuerdo haberle dado mi número de teléfono a nadie más y mi círculo social se resume a ellos cinco. ¿Quién más pudo haber sido?

Bueno, realmente no importa, al final del dia por la vía telefónica vio que es en vano, así que desde entonces no ha molestado más por ahí. Aparentemente le gusta más hacerlo en persona, lo cual, me asfixia de una manera horrible. O también es posible que crea que bloqueé su número, cosa que no hice, pero no porque no quisiera, sino porque lo olvidé y hasta ahora no lo he necesitado desesperadamente.

Después de la incómoda charla con HoSeok, tomamos camino al salón de clases, donde dimos inicio a nuestro ciclo escolar de la mañana, después de que hubiera tomado mis libros en mi casillero.

Las clases transcurrieron con una total tranquilidad y naturalidad. Al menos las que ese día dimos, fueron divertidas y amenas, me gustaron a decir verdad. A parte de que la compañía de mis amigos me relaja bastante. Por esta misma razón, obviando la primera parte, mi día estaba yendo de maravilla, demasiado para ser verdad, no obstante, así era.

Salimos todos juntos al recreo al sonar el timbre de las diez de la mañana. Teníamos varios minutos para ir a la cafetería y tomar una merienda leve, la cual era obligatoria tomarla en la cafetería. La merienda de la mañana no era como el almuerzo, que te daban permiso para ir a tu habitación y preparar tu almuerzo con las cosas que compraste. Claro, debes regresar al horario de tarde.

Ya en la cafetería, compramos nuestra merienda para luego dirigirnos a una mesa. Nos sentamos y estuvimos conversando un rato. Mi mañana no podía ir mejor, y eso lo descubrí cuando empeoró un poco. TaeHyung se acercaba a nosotras, con pasos decididos.

Recordé que JungKook le había dicho algo sobre mi mentira, no sé exactamente qué, pero algo le dijo sobre ello. En estos momentos, no tengo un fundamento fijo para respaldar lo que dije aún, ya que, se me presentó un problema inclusive mayor que los anteriores, excluyendo todo lo que JungKook representa. Ahora no puedo afirmar que es cualquier otro, porque a parte de que no he hablado con esa persona, ya presenté a HoSeok como mi novio y no sé que voy a hacer si su participación se viene abajo.

Respiré profundo. Debía decir exactamente lo que le dije a JungKook. En caso de que no se pueda, bueno, ya tendré otro problema más encima. Por ahora, no me complicaré más y solo seguiré el guión hasta ahora escrito, inclusive si es erróneo.

—Hola a las tres. —Saludó y sonrió a todas las presentes. Estaba muy ocupada pensando como para notar las miradas entre EunJi y él, pero se que algo hicieron porque conozco a mi hermano y conozco a mi amiga.— ¿Cómo se encuentran el día de hoy?

—Bien, como es normal. —HyoSung respondió. Estaba segura de que quería preguntarle el motivo de haber invitado a EunJi a salir, aunque sería idiota preguntarlo delante de ella. También yo estaba intrigada por ese tema, mas, no era su prioridad en ese momento, ya que ni siquiera dejó que mi amiga preguntara su estado de ánimo de vuelta.

—Que bueno. Enana, necesito hablar contigo. —Él comentó. Dirigí mi mirada hacia su persona y suspiré. Luego le hice un ademán para que continuara.— Me enteré por fuentes de confianza que tienes un novio del que no estaba enterado.

JungKook no es una fuente de confianza.

Por otro lado, es exactamente lo que creía que vendría a hablar conmigo. Hasta ahora no me buscaría por nada más. No para hablar sobre la apuesta de que no lo necesitaría en el primer mes de clases, que ya pasó, por cierto y gané. No para hablarme sobre lo que quiere de EunJi o algo relacionado a ella. Nada de lo anterior. Venía a eso, por ser lo más relevante. Lo conozco como la palma de mi mano.

Mis amigas me miraron extrañadas. Había olvidado contarles lo que le dije al molestoso de JungKook debido a que ese día de lo que menos tenía ganas, era de eso, por lo que lo esquivé totalmente. Ellas no tenían noción del tema y es muy probable que algo sucediera mal sobre eso, pero realmente no me molestaba. Si mi hermano no lo sabía, ellas tampoco tenían por qué saberlo. Con eso me puedo excusar y es creíble inclusive.

—Sí, tus fuentes, tenían razón. —Confirmé. Me miró con una expresión incrédula. Algo me dice que prefería que dijera que no. Yo también prefiero decir que no, sin embargo no puedo.— Tengo novio. No te dije porque es algo reciente y no quería confirmar nada aún.

—Sabes perfectamente que no puedo permitir que mi hermana salga con cualquier chico que no haya conocido primero. —Habló, como si de mi padre se tratara. Rodé los ojos. En este caso, me estaba siendo bastante inoportuna su preocupación y protección.— Quiero que me lo presentes.

Se sintió como una orden. Una de esas órdenes que no debes, puedes o quieres negar. Es claro que decir que no, ya sea de manera sigilosa o directa, levantaría sospechas. No obstante prometer algo sin tener confirmado que tendré novio para entonces seria una mala idea de igual forma. Tal vez si le doy tiempo...

—Bien. Te lo presentaré. Dame una semana. —Él asintió conforme, no podía negarse. Me extendió su brazo y nos dimos la mano para cerrar el trato. Después tocaría explicar todo esto.

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16/marzo/2022. Re-escrito.

—Nana.