egotistical ;; jjk

fifty-fifth ;; dos opiniones opuestas.

—Kim SungMin...

Analicé mi habitación durante varios segundos desde la puerta del baño. Había terminado de bañarme, la única cosa para la que me quedaban ánimos después del día que había tenido. Suspiré fuertemente, saliendo completamente del baño para cerrar la puerta detrás de mí, lo cual resonó en mi habitación que estaba completamente en silencio.

Cuando llegué a la habitación ya EunJi se había acostado, no estaba dormida pero dijo que no tenía fuerzas ni ánimos para levantarse de la cama. La realidad era que en parte comprendía sus motivos, ya que yo estaba exactamente igual. Luego de esa pequeña conversación con ella, me dirigí hacia el baño y me di una ducha, la cual me ayudó a relajarme un poco.

Me acosté, dejando la toalla que tenía en mis manos en una esquina de la cama, aunque no debería dejarla ahí, en lo último que iba a pensar era donde colocaba la toalla. Observé al techo de mi habitación, con mis manos y pies extendidos totalmente en la cama. La habitación estaba en un silencio sepulcral, pero realmente en mi cabeza todavía seguía resonando la conversación que JungKook y yo habíamos tenido, para ser sincera no podía dejar de pensar en eso.

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—¡No era nada de eso, SungMin! —Alzó un poco la voz, sorprendiéndome levemente.— ¡Y me molesta porque realmente estaba emocionado por salir contigo!

Esas palabras me dejaron realmente sorprendida, porque aunque en toda la visita se estuviera comportando de una manera que no me esperaba, sinceramente esta confesión era la más sorprendente de todas. Confesaba estar emocionado por tener una salida conmigo y también confesaba que no pensaba terminar intentando convencerme para follar en cualquier motel que estuviera lo suficientemente cerca de la zona. Una punzada atacó mi pecho inmediatamente y un sentimiento de culpa me invadió.

—¿Qué? —No pude formular nada más, lo único que salía de mis labios era ese monosilabo, la realidad era que me había dejado totalmente sin palabras saber esto.

—Estuve esperando toda la semana nada más para esa maldita salida. —Confirmó asintiendo levemente con la cabeza.— Me jodió mucho que la cancelaras a último momento, aunque me jodió todavía más darme cuenta que desde el principio nunca quisiste salir conmigo.

En parte tenia razón. Aquel día cuando me lo pidió por mi mente solo pasaba la idea de quitármelo de encima, estaba tan cansada que no tenía las fuerzas suficientes para lidiar con él, la verdad. No podía afirmar nada, pero tal vez si me lo hubiera pedido en otro momento en el que pudiera pensar mejor las cosas le habría dicho que no las veces que hiciera falta, no porque no quisiera salir con él, sino por la apuesta que habíamos hecho hace poco. Si había una cualidad que resaltaba de mí, era el orgullo y después de lo que había sucedido en mi habitación no podía dejarme llevar tan fácilmente.

Después pasó toda una semana en la que no volvimos a tocar el tema y poco a poco fui olvidando que él me había invitado a salir, tanto que hasta que no lo vi parado frente a mi puerta, arreglado para la salida, no recordé que estaba pensando en cancelarla. Pero aunque intente excusarme y explicar esto, claramente yo había tenido la culpa esta vez.

—Pero bueno, ¿Sabes que? Te lo agradezco, SungMin. —Volvió a hablar repentinamente, soltando una pequeña risita irónica mientras peinaba su cabello hacia atrás y recuperaba su postura.— Me ayudaste a darme cuenta de lo realmente estúpido que me estaba comportando hasta ahora, yendo detrás de tí aunque cada vez que me acercaba siempre me negabas hasta un saludo.

No me gustaba hacia donde se estaba dirigiendo esta conversación, sus últimas palabras me dieron un indicio de ello, por no decir que lo dejaban claro totalmente. Fruncí levemente el ceño, observando como se cruzaba de brazos con una sonrisa en sus labios, una sonrisa que yo conocía perfectamente.