egotistical ;; jjk

sixty-ninth ;; sinvergüenza.

—Kim SungMin...

Salí del lugar, tomando todo el aire que mis pulmones me permitieron de una sola vez, totalmente estresada por la “conversación” que Jeon y yo habíamos tenido segundos atrás dentro del establecimiento, del cual iban a echarnos dentro de muy poco si seguíamos causando tanto alboroto. Sinceramente no creía que las cosas fueran a terminar de esta manera, en mi mente, sucedía de todo menos esto, pero todo parece indicar que ese chico está creado solamente con intenciones de sacarme de mis casillas cada vez que abre la boca.

Pensaba llegar al bar, pedir algo de tomar y sumirnos en una conversación civilizada sobre lo que había sucedido. Pedirle perdón como él se lo merecía por todo y ya de paso tener una noche agradable juntos en la que pudiéramos compartir como dos personas normales. Como es más que obvio, las cosas se descontrolaron de manera impensable y con el paso de los segundos dejó de merecer algún tipo de disculpa de mi parte, lo único que creía que merecía era un gran golpe en medio del rostro que le enseñara que las cosas no siempre salían como él quería y que era algo que tenia que aceptar así fuera por las malas.

Repito, ¿Quién cree que es?

—¿A dónde demonios crees que vas? No hemos terminado de hablar, no te atrevas a dejarme con la palabra en la boca. —Antes de lo que me esperaba lo volvía a tener detrás de mí, continuando el drama como si no fuera suficiente para él lo que había sucedido dentro del lugar.

Me tomó del brazo, para luego comenzar a arrastrarme por las calles hasta llevarme al lugar en el que se encontraba su auto. Ni siquiera tenía intenciones de reprenderlo por lastimarme, de cualquier forma sabía que no le interesaría, a juzgar por la mirada de enojo tan obvia que tenía. Pegó mi espalda a su coche, bastante más despacio de lo que creía que lo haría y luego se puso frente a mí, como intentando asegurarse de que no me iría a ningún lado a no ser que termináramos lo que habíamos comenzado.

—¿Qué es lo que quieres que te diga? No pareces estar muy abierto a tener ningún tipo de conversación conmigo. —Respondí, cruzando los brazos y volteando la mirada hacia otro lugar.

—¡Claro que no lo estoy! ¿Por qué no puedes sencillamente disculparte como deberías hacerlo en lugar de querer fingir que nada ha sucedido?

Sabía que lo que había hecho cuando me dio la oportunidad de hablar en su casillero había sido una completa estupidez carente de sentido alguno, estaba muy consciente de ello. Para eso iba a ser esta salida, para hablar sobre ello y al final del día me había resultado imposible, ya que estaba tan reacio a cualquier tipo de palabra que saliera por mi boca que seguramente si decía algo, aunque fuera bueno, me mandaría al demonio.

Que sepas que aunque te veas tan atractivo vestido de esa forma, no pretendo soportar tu actitud, Jeon.

—¡Te pedí disculpas!

—¿¡A tí eso te pareció como que me estabas pidiendo disculpas!? “Perdón por todas las cosas malas que te han sucedido por mi culpa” ¿¡En que realidad paralela eso es algún tipo de disculpa decente!? —No, realmente no es una disculpa, pero si él me pedía que lo dijera definitivamente no iba a hacerlo. Volteé a verlo otra vez.

—¡En la mía! ¡Para tu información pensaba volver a pedirte disculpas esta noche pero tu comportamiento me quitó todas las ganas de hacerlo! —Le hice saber las intenciones que tenía con esta salida y también el motivo por el que no había podido conseguirlas, que era nada más y nada menos que por culpa suya.— ¿¡Sabes qué!? ¡Puedes irte directo a la mierda, Jeon JungKook!

Hacia mucho tiempo que no decía esas palabras y, honestamente, no tenía la menor idea de como había pasado casi un mes sin ni siquiera pensar en mandar a la mierda a tan grandísimo estúpido. A un estúpidamente atractivo hombre.