Capitulo 30

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—¡Chloé cuidado! —. Había gritado Chat Noir apresurándose para quitar a la chica de la mira del enorme akuma que la perseguía.

—¡Otra vez tú! —grito Ladybug—¡Por qué cada vez que hay un akumatizado siempre tiene que ser tú culpa! ¡ERES UN PELIGRO! —escupió con enojó cuando Chat Noir llegó a lado suyo con la chica colgando de su espalda—. ¡No deberíamos perder el tiempo en salvarla!.

—Se supone que no importa quién fuese, nuestro deber es salvaguardar a los necesitados —, defendió Chat a Chloé que no iba a permitir que nadie dañará a su amiga por lo que no iba a dejar que se le separara en ningún momento, Ladybug era obvio que no iba a intentar defenderla, lo que era un poco decepcionante la conducta rencorosa de su compañera, viniendo de la heroína por el amor y la justicia.

Sole Crusher media lo de un edificio y la destrucción que había dejado a su paso era demoledora, como su nombre lo decía, había aplastado todo bajo la suela de sus zapatos.

Cuando el amuleto encantado de Ladybug les mostró que para detenerlo tenían que usar una carnada, Chat Noir inmediatamente se opuso, pues su compañera de batallas miraba a Chloé fijamente.

—¡No, es muy peligroso usar a Chloé!. Las intenciones del monstruo son muy claras, quiere dañarla, si se lo permitimos puede hacerlo gravemente antes de que podamos desactivar su akuma.

—Es un riesgo gatito, que debemos correr si queremos detenerlo —dijo con firmeza la heroína haciendo gruñir a Chat por sugerir poner en un gran riesgo a Chloé, la cual temblaba con intensidad a sus espaldas.

—Lo haré...—murmuró la chica rubia al oído del gato— !Pero más les vale no fallar y me tendrán que dar el crédito por mi gran hazaña! —pidio la chica saltando de la espalda de Chat Noir.

—¡CRÉDITO!... —Que osadía—¡Pero si todo fué tu culpa...otra vez! —reclamó la heroína.

—Basta ya —le retó Chat—, lo hará como se supone que quieres —. Realmente no estaba agusto con el plan el cual era simple: distraer al akuma mientras destruían sus zapatos, era tan obvio dónde estaba oculta la mariposa infectada.

Entonces, Chloé se quedó a la vista tratando de llamar su atención, gritando y brincando en lo alto del hotel de su padre. Realmente no fue difícil distraer al akuma de la destrucción pues ella era el principal blanco. Chloé solo se quedó ahí tratando de ser lo más valiente posible mientras el monstruo la tomaba entré sus enormes manos, usando toda su fuerza para aplastarla.

André se quedó helado viendo la siniestra sonrisa de satisfacción del "Akuma-Zoé" mientras los desgarradores gritos de su hija rompían sus oídos, la estaban partiendo en pedazos. El amuleto encantado de Ladybug podía sanar sus heridas o incluso traerla de vuelta de la muerte, pero jamás podría borrar los recuerdos y sensaciones que estaba experimentando. Chat Noir se movió tan rápido como podía usando su cataclismo para destruir los zapatos y exponer a la mariposa infectada, corriendo para ser él quién socorrer a Chloé, la que cayó en sus brazos con las extremidades hechas tirones, la palidez calaverica de su rostro lo asustó.

—!Date prisa Ladybug! —gritó con desesperó en el gusto momento en que una mariposa blanca revoloteaba disfrutando de su libertad, la magia se activo y Chloé despertó para correr de inmediato a brazos de su padre, habían ganado.

Adrien abrió los ojos un poco molesto por el recuento de los sucesos de ese día, había ido a ver a Chloé la que ahora dormía en junto a él, se movió con cuidado de la cama procurando no despertarla.

Dormir juntos era lo que hacían en ocasiones cuando a alguno de los dos había pasado por un mal día, habían dejado de hacerlo cuando entraron a la pubertad y tanto Gabriel como André no creyeron que los dos jovencitos se expusieran a situaciones comprometedoras que pudieran salir a la luz y afectarlos socialmente.

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