Capitulo 7

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—¡Voy a vomitar! —, se quejo Zoé cubriendo sus labios con ambas manos.

Los nervios la estaban comiendo, todos en bambalinas estaban nerviosos y emocionados excepto Zoé que parecía estar muriendo, su rostro estaba ligeramente verde, no creía poder ser capas de seguir vomitando, lo había hecho antes de salir del colegio y dos veces de camino hasta el teatro.

Por petición de los inversionistas y los productores, querían ver a los actores en la tarima para evaluar cómo se vería el espectáculo, lo que la tenía aún más nerviosa es que el escritor de la obra Thomas Astruc también estaba ahí.  Por lo que Sofíe le dijo: el era francés y había hecho una adaptación para el teatro de su película en agradecimiento a Ladybug por salvarlo de algo llamado akuma, Sofíe le explicó que era un akuma pero no le prestó atención, su estómago la había traicionando y pidió que pararán el auto para vomitar por la ventanilla; lo que fue muy vergonzoso pues el padre de Sofíe las estaba acompañando y era la primera vez que lo veía. ¡Que vergüenza!.

—Tranquila rubia, solo respira y cálmate —le dijo Sofíe pasándole una botella con agua a su amiga con cara de brócoli.

—Estoy tratando jamás en mi vida había estado tan nerviosa... —bebió dos tragos gruesos cuando se percató de algo— ¡y tú qué haces aquí! —. Sofíe se rió cómo era posible que su amiga hasta apenas la notará.

—Mi papá uso sus influencias para que pudiéramos entrar, como diplomático... quería estrechar la mano a nuestros amigos franceses —dijo tratando de sonar "ceremonial"—Además te lo dije, no te dejaré sóla. Pero no va hacer por mucho tiempo —Sofíe señaló a una chica cargada de papeles, por la seriedad y amargura en su cara supuso que ella trabajaba ahí y que pronto iban a empezar...¡Lo que fuera!, en realidad no entendía nada de lo que estaba sucediendo ahí pero estaba desidia a apoyar a su amiga aún que fuera para calmar sus nervios—. ¡Suerte...! —le dijo rápidamente con un abrazo cuando justamente la mujer empezó a llamar personas al azar—¡ y rompete una pierna! —. Zoé sintió escalofríos, temía tener tan mala suerte que en realidad saliera del teatro con una pierna enyesada.

Vió a Sofie salir corriendo.

—"Todo estará bien, todo estará bien..."—, se mentalizaba controlando su respiración. —"Confía en ti, confía en ti..."—se animaba—. "Mamá estará orgullosa...— se dijo sonriendo para si misma, cuando...

—¡Tabitha Williams! —. Llamaron, creyó haber escuchado mal que de seguro fueron sus nervios intentando saborearla, pero no.

Tabi se abrió paso entre los chicos y chicas que esperaban ser llamados, solo sacudió las manos, un ligero movimiento de sus palmas y todos a su al rededor se movieron instantáneamente lejos de ella, Zoé sintió un hueco en su estómago y por supuesto que se pregunto que hacia Tabitha ahí, si ella le había garantizado que no quería trabajar en esa obra en particular por las más ridículas razones, como que no le gustaba el vestuario. No la había visto en los llamados anteriores ¡Qué hacia ahí!, no tenía oportunidad contra ella de obtener el papel de Honey.

Llamaron a otras dos chicas rubias juntó a Tabi, entonces deseo que no la llamarán a subir con ella, así tendría una oportunidad pero como debió suponerlo desde que vió a Tabi... nada podía salirle bien. Pues después de que una chica llama Alexa se unió al grupo, la directora tuvo que decir su nombre.

—¡ZOÉ LEE! —grito fuerte y claro. La chica se levantó de golpe casi impulsada por un resorte invisible de la silla dónde estaba, sus piernas eran gelatina así que para evitar chocar contra todos y todo se quedó ahí hasta ese momento.

Camino entonces despacito queriendo evitar la mirada de Tabi que no le prestaba atención, era profesional, ella estaba concentrada en lo suyo, además que sabía que desde que pronunciará su nombre las barreras de Zoé caerían y cuando está tropezó con sus propios pies supo que Zoé se quedaría sin el papel.

ZoéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora