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- "Mierda"- pensaron ambos villanos en sus disfraces de civiles -

- ¿Entonces? ¿Qué excusa tienen para no llamarme? - reclamo a los dos aprendices de héroes - ¿Al menos ya interrogaron a los testigos?

- Estábamos en eso hasta que tú llegaste viejo-

- Trátame con respeto mocoso-

- Endeavor-san por favor usted también trate de ser más amable - pidió el chico peli verde- está asustando a Sako-san y Touya-san -

- ¿Touya?- susurro con un leve presentimiento en su ser, casi como un miedo horrible, llamarlo instinto era lo mejor -

- Si, Touya-san, es el - presento rápido - y el es Sako-san-

- Hola- saludo sin mirar denotando su molestia para algunos por el tono de su voz-

- Un placer conocer al héroe número uno- caballero preparado para actuar, incluso frente a un enemigo. Incluso con la "magia" tenías que crear un buen espectáculo actuando después de todo.

El mencionado rápidamente recobro su postura. No debía mostrarse perturbado por nada, incluso con su instinto gritando, casi exigiendo acercarse al tipo llamado como su hijo fallecido. Miro con duda a los presentes repasando la información sobre personas buscadas y buscan cualquier signo de nerviosismo.

- Vendrán conmigo a la comisaría para asegurarnos de dar su testimonio completo - demandó de inmediato a los dos chicos.

El de cabellos alborotado y chaqueta de piel de inmediato puso una mueca de molestia en su rostro sin poder evitarlo, no estaba seguro que su disfraz o su auto control durará tanto, sin mencionar que estaba inquieto por conseguir el medicamento para sus hormonas. El no era tonto, pues aún con toda la preparación y la buena actuación de su compañero, fácilmente podrían ser identificados con ADN o su olor en un momento.

Para la gran suerte de los dos villanos que buscaban mantener sus nervios en control y buscar una salida, el pequeño ángel salió en su rescate.

- ¡Endeavor-san! - el chico llamo la atención de todos que hasta ase unos segundos se empezaban a movilizar para llevar a los testigos para que dieran su testimonio y buscar más pistas.

Todos los chicos y los dos adultos presentes voltearon en dirección a donde el chico señalaba, alcanzando a ver lo que parecía una silueta en llamas corriendo a lo lejos y escapando de la policía.

- ¡Mierda! - fue lo único que salió de los labios al ver al mayor sospechoso correr y empeorando las cosas, un Nomu volando en su dirección -

- ¡No pierdan el tiempo y sigan lo!- ordeno Eraserhead saliendo de inmediato para evitar cualquier daño en la medida de lo posible, el héroe número uno ya había salido del lugar antes.

El segundo avistamiento de un Nomu causó que los adolescentes salieran en seguida a cumplir con su papel de héroes, dejando olvidado por completo a los testigos y a su amor.

Tamaki, preocupando, tomo posición en la abertura del vagón para proteger a su pareja.

- ¡Quédate atrás Izuku! - ordeno el mayor haciendo que el mencionado hiciera un puchero -

- Yo también soy un héroe - murmuró molesto para suspirar y dirigir su mirada a los otros presentes que no creían su suerte-

- Bien, pueden ir con los demás pasajeros al vagón de seguridad o seguirme de vuelta a mi habitación para esperar a que vuelvan los héroes.

- Creo que lo mejor sería irnos-

- Si pero primero -

Los dos "civiles" se miraron y sonrieron cómplices.

- Si no te molesta pequeño - mencionó el "mago" sacando su celular del bolsillo - nos encantaría tener tú número antes de irnos a resguardar -

La mirada incrédula les hizo dudar un poco, haciendo temblar sus sonrisas coquetas.

- ¿Enserio?- suspiro y negó con la cabeza - estamos en medio de un ataque y ustedes me piden mi número de celular? -

- Bueno ...-

- No sabemos cuándo podremos volver a verte pequeño héroe - sonrió y mostró su celular - así que tenemos que aprovechar nuestra oportunidad -

- Además, estamos con la pareja de uno de los mejores héroes. - se burló un poco - no hay lugar más seguro que a tú lado que también eres un buen héroe-

Eso fue suficiente para causar un sonrojo en el chico.

- Bueno, pero luego tienen que irse al refugio-

Intercambiaron números y aprovechando el rostro sonrojado del peliverde le tomaron una foto para guardar su contacto.
Se despidieron, los chicos se fueron en dirección al vagón reforzado del tren par estos casos y el menor fue a llevar a su pareja que resguardaba la abertura de vuelta a su habitación.

Mientras tanto afuera se libraba una batalla entre dos nomus y un gran grupo de héroes. Normalmente esto causaría miedo al chico o preocupación por sus parejas. Pero extrañamente su Omega y el se sentían muy tranquilos, sin sentir una amenaza real.

En cuanto al sospechoso desapareció por como un fantasma.

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Capitulo extremadamente corto y se nota la falta de inspiración. Pude tratar de narrar la pelea pero me pareció que sería solo relleno.

El secreto de la academia YueiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora