EL Diario de Analía

CAPITULO 17

Gabriela

Mire el lugar con asombro, realmente la ubicación  en donde se encontraba el apartamento de Analía era hermoso, moderno y muy bien ubicado. Se podía ver que  la gente de los alrededores eran gente con buen estatus y no solo lo notaba por los carros de alta gama estacionados si no por las miradas por encima del hombro que nos daban algunos inquilinos, por un momento me fue gracioso la idea de haber venido en el escandaloso auto de Eduardo, aunque si lo hubiéramos traído probablemente no nos hubieran dejado pasar.   

Caminamos solo Chan y yo dentro del edificio, mientras tanto Eduardo se quedó fuera. Un portero con aires de mayordomo nos abrió la puerta y sin más nos dirigimos a la recesión. Después de una corta charla con una chica que parecía ser una recesionista, un hombre mayor vino a nuestro encuentro. Mientras le explicaba la situación y me presentaba como hermana de su inquilina me enteraba que tenía que retirar las cosas de mi hermana del lugar el mismo día ya que al ser expulsada de la universidad no podía seguir ocupando el departamento.    

Chan noto rápidamente mi furia y tomo la palabra antes de que yo estrangulara al hombre que se expresaba con tan poco tacto por la situación. Aprete los dientes para no insultar a todos estos "copetudos" como le decíamos en mi país a la gente soberbia que por tener más dinero que otros se creían más . Estaba enojada ¿y como no estarlo? si parecía que nadie se preocupaba que una joven estudiante estuviera desaparecida y lo único que veían eran el supuesto mal comportamiento que se supone tenía.

Mi amigo le aseguro que sacaríamos todas sus cosas en ese instante y aprovecho para averiguar sobre posibles visitas que ella podría haber tenido en este último tiempo. Un novio, un visitante nocturno y una chica más o menos de su edad fue su repuesta.  

¿Un novio? Según él así fue como ella dejo en aviso en la recesión ¿Pero por qué no me dijo nada?   

¿Un visitante nocturno? Mis dientes rechinaron con molestia ¿Qué esta insinuando este maldito viejo, un amante? La mano de Chan sujeto mi muñeca cuando vio mi intención de avanzar hasta el hombre y romperle la cara, tuve que conformarme con respirar hondo e intentar calmarme.  

Y por último una chica, nada útil. No tenía ni un nombre y su descripción era banal.

Luego de esa tan pobre conversación nos escoltaron a la puerta del departamento, un muchacho muy joven deslizo una tarjeta por un lector magnético al costado de ella y la puerta se abrió. Lo primero que note fue la oscuridad que sumía el lugar ya que las cortinas estaban completamente cerradas. Chan fue el primero en racionar y camino al gran ventanal para dispersar las cortinas dejando entrar una agradable luz a toda la sala.    

No esperaba menos después de haber visto lo lujoso de su rección, el lugar tenía aires de dinero en cada mueble, cuadro y decoración. Chan camino a la cocina e inspecciono la heladera y los estantes.   

- No hay restos de comida reciente, la cocina no parece haber sido usada en varios días- Me moví rumbo a un pasillo que intuía por lógica que me llevaría a una habitación . Abrí la primera puerta y si era un cuarto simple con una cama un ropero y algunos pequeños muebles. Chan fue directo al ropero y lo abrió encontrándolo vacío.    

-Este cuarto debe ser para invitados - Dije lo más lógico- Sigamos- 

La siguiente puerta era un pequeño baño que seguramente era también para invitados ya que era pequeño. Solo nos quedaba una puerta  más para revisar y me encamine hacia ella, pero fue detenida por mi amigo de una manera brusca, lo mire con el ceño fruncido por el acto. Pero él no me miraba su atención estaba puesta en la cerradura de la puerta. Y lo note la puerta estaba rota, me solté de él y quise correr pero su agarre me volvió a detener, sus brazos me sujetaron de la cintura y hablo con voz baja.    

-Detrás de mi Gabi- No era una sugerencia, su mirada estaba ensombrecida, solo asentí y me coloco detrás de el  - Yo entro primero, espérame aquí- El aire parecía no querer llegar a mis pulmones -

El entro con suma cautela como si esperara encontrar un asesino enserie en el interior, mientras el entro mis piernas no pudieron quedarse en su lugar y avance a paso decidido. Antes de que entrara la habitación se ilumino, Chan había abierto las cortinas  de aquí también.   

Me paralice, la habitación era un caos , libros , papeles , frascos de perfumes desparramados por todo el suelo .   

-Sangre - Susurre apenas mi mirada caía sobre la cama, no era mucha pero tampoco era poca. La cama estaba desecha, las sábanas rajadas y unas tiras de ellas atadas a la cabecera eran alarmantes- 

Mi cabeza viajaba a mil por hora, preguntas y más preguntas pero la principal era ¿Dónde estaba mi hermana? 

-Hay que llamar a la policía Chan no podemos tocar nada. !!Maldición ¡¡ Esto está mal -

-Lo se lo aremos, ve si encuentras algo en el placar que nos ayude, yo reviso el baño -  Abrió la puerta del mismo y maldijo en voz fuerte- 

-!!Gabi ve y dile al muchacho que llamen una ambulancia¡¡ - Pero no lo hice camine hacia donde estaba y me quede congelada con la escena -

Dentro de la bañera en posición fetal se encontraba Analía, parecía estar dormida si no fuera por un corte en su rostro que cruzaba su mejilla en forma horizontal, en su cuerpo también se podía visualizar muchos golpes y algunos cortes más , mi corazon se oprimía y no podía mover un musculo.

Chan se movía con agilidad por el baño- !!Gabriela maldición raciona ¡¡- Lo mire y asentí sin moverme aun - !!Llama una ambulancia ya¡¡

Sali del baño corriendo y  cuando llegue a la entrada sin ninguna delicadeza tome al chico que aun esperaba en la puerta de la camisa y le exigí que llamara una ambulancia, para mi suerte el muchacho raciono rápido y llamo rápidamente mientras yo volvía a ese maldito baño.