Eduardo
Sali del bar con aspecto sombrío, realmente espera más de ese cabrón, me sentía diseccionado de cierta manera. Suspire y lleve mi cabeza en dirección al cielo para ver las estrellas que comenzaban a desaparecer de apoco, sabía que a pocos metros delante de mí se encontraba Chan y Carlos esperando saber los resultados.
- ¿Nos vamos? - Dije mientras llegaba a ellos-
-Pensé que te tomaría más tiempo- Gruñí insatisfecho- Acaso no ansiabas hacerlo sufrir, ni siquiera oí sus gritos- Chan hablaba con burla notable-
-¿Acaso el cuervo está perdiendo el toque de sadismo?- Carlos se atrevió a seguirle el juego a mi amigo -
- ¿Acaso te gustaría comprobarlo Carlos? Ese ruso me dejo muy insatisfecho no me importaría terminar contigo pendejo- El moreno palideció y reculo detrás de Chan en busca de protección- Parece que has olvidado que no somos amigos ni mucho menos, así que yo que tu mantengo la boca cerrada-
Sin esperar más me metí al auto y me senté en el asiento del copiloto. Carlos se sentó atrás y podía sentir su nerviosismo, en el fondo me divertía. Nunca tuve un lazo de amistad con ningún de los miembros de la organización excepto con Chan. Solían temerme y con razon justa, siempre fui despiadado y un poco sanguinario.
Cuando Chan encendió el vehículo lo escuche suspirar de alivio y le heche un vistazo por pura diversión, casi carcajeo cuando se encogió en su asiento de temor.
-Ya cuervo deja de asustar al muchacho- Chan me sonrió con picardía-
En poco tiempo llegamos a un aeropuerto con un estado lamentable, lo único que destacaba del lugar era el porta aviones que tenía la apariencia de ser nuevo.
Entramos en un gran galpón en donde se encontraban muchas personas la mayoría eran ex miembros de la organización de Sosa y otro resto que nunca había visto, busque con la mirada a mi compañero pidiendo una explicación. El pareció intuir mi duda y simplemente se inclinó de hombros y dio una pocas palabras como siempre.
- A veces es bueno hacer favores - Y listo eso me dio a entender que cada una de estas personas le debían algo a Chan-
Deje el asunto de lado y busque con la mirada a Gabriela, quería verla por una extraña razon necesitaba abrazarla. Pasaron unos minutos y las manos me comenzaban a sudar al no encontrarla por ninguna parte. Apenas divise a la amiga loca me encamine hacia ella sin esperar a Chan que estaba haciendo planes con un grupo de hombres. Ella parecía saber lo que buscaba porque antes que pudiera preguntarle ella ya estaba hablando.
-Está en un cuarto al final - Señaló un pasillo- Busca la última puerta y la hallaras- Solo asentí con un movimiento de cabeza y me encamine hacia el lugar-
La puerta estaba abierta, me quede detallándola como un idiota. Hacía unos minutos ansiaba abrazarla, tocarla, besarla y en este momento no sabía si entrar o no. La duda llegaban a mi tan rápido que podían enloquecerme si no me calmaba ¿Que podía ofrecerle yo? No era una buena persona, no era un hombre rico y decenté, no todo lo contrario era un delincuente, era bueno en mi trabajo pero un maleante al fin de cuentas. Solo sabía que estaba perdidamente enamorado de esta mujer ¿Pero eso bastaría?
Ella se encontraba con los brazos cruzados de bajo de la nuca, estaba acostada sobre un catre y miraba el techo como si fuera lo más interesante del mundo. Pero era hermosa de eso no había duda, mi corazon latía con ferocidad cuando recordaba sus besos y caricias. Cerré los ojos para sacarme los recuerdos de mi cabeza, tenía que ser cauto y pensar muy bien que aria con este sentimiento que me atravesaba el pecho cuando la tenía cerca y dolía cuando estaba lejos.
-¿Piensas quedarte ahí mucho mas o vas a entrar? - Ella no se movió ni una pulgada y yo sospeche que me había notado desde que me pose en la puerta-
-No quería interrumpirte, parecías muy concentrada en tus pensamientos - Dije mientras entraba al deteriorado cuarto -
- ¿Como te fue?- Sus ojos verdes se clavaron en los míos - ¿Están bien todos?-
-Todos bien, menos los rusos, que en este momento deben estar tratando de coimear a San Pedro para que los dejen entrar al paraíso y no los mande derechito al infierno - Ella sonrió y se corío un poco para darme lugar a sentarme a su lado-
- Eso es bueno aunque estoy segura que ni siquiera pasaron por el paraíso, los cabrones fueron derechito a saludar a Lucifer -
- ¿Y tú estás bien?-
-Ahora si ¿Por qué estamos a salvo, verdad?- Como le decía que aun teníamos que eliminar algunas amenazas, aun deberíamos acabar con el resto de la familia Volkon -
- Nadie te volverá alejar de nosotros - Ella achino los ojos con sospechas-
-¿Que me ocultas?- Se sentó en el catre para quedar a mi altura-
- No te oculta nada- Salvado por la campana - El idiota está cansado y no habla claro - Chan se acercó a su hermana y por la espalda la encerró en un abrazo cariñoso, mientras yo lo miraba mal por el nombre que se refirió a mi-
-¿Como les fue ?¿Alguien herido?- Interrogo ansiosa-
-Todo salió muy bien, la gente ya empezó a salir- Me miro calculadoramente - Nosotros deberíamos partir también. ¿Y por cierto porque estás sola aquí? - Ella se colgó de mi hombro apenas su hermano la soltó-
- Preferí tomar distancia - Suspiro- Soledad me conto que la mayoría de esas personas son o eran parte de la organización de Sosa - Se mordió el labio y recostó su cabeza en mi hombro, pase mi brazo por su cintura y la pegue más a mi - Tú sabes que siendo su hija tal vez no quieran verme-
-No digas tontería, el hecho de ser mi hermana borra todo la malo de tu apellido ¿No te parece? Al fin de cuentas tu hermano es encantador -
-Ja, encantador y arrogante - Dije con burla, me lanzó una mirada amenazadora-
-Tú quieres perder las bolas ¿Verdad?- Parecía serio pero lo conocía tan bien que podía percibir la falsedad en sus palabras-
-Eso no haría muy feliz a Gabi, parece que a ella si les agrada esa parte especifica de su cuerpo - La loca de Soledad entraba por la puerta. - Además ya no hay tiempo nos vamos en diez -Tomo el brazo de Chan y lo arrastra fuera del cuarto, no sin antes darle una giñada a la cachorra -
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EL Diario de Analía
Roman d'amour¿ Que serias capaz de hacer por tu hermana ? Pues Gabriela seria capas de todo por ella, nadie lastima a su hermana y sale de rosas, pero cuidado si levantas una venganza contra los príncipes de las mafias más peligrosas en el mundo.