Mi Mate, Una Beta

Cap 15

Beth

Lo que me dijo Adam me dolió en todo el alma, aunque en parte tenía razón soy fácil de reemplazar y lose muy bien...

- Beth no eres fácil de reemplazar - me intenta animar mi loba.

- Ya claro por eso Tyler ya me cambio, mi madre me abandono y no quiso saber más de mi cuando se enteró que quería ser beta y para colmo no me sorprenderia que Adam también me cambiara, Melody... No quiero enamorarme de el por qué si me enamoro se que tarde o temprano me hara daño.

Mi loba suelta un sollozo...

- Beth no todos son iguales y le cuesta muchísimo tratarte como te mereces, pero cuando te traje de vuelta junto a Adam el sintió que su vida acabaría si no estuvieras junto a él.

- Ya... Pero Tyler y yo nos conocemos desde pequeños y me cambio....

- Beth...- corto el link por qué no quiero seguir escuchando los lamentos de mi loba.

Me hago bolita en el colchón y me quedo mirando la ventana en silencio, el silencio se rompe por qué Adam abre la puerta bruscamente.

- Te juro que no quería...pero te metiste y la conversación y yo me pase no sabía controlarme y...

- Da igual- le aseguro.

- Mi luna porfavor no me hagas esto se que me pase- dice de rodillas algo nunca visto en un Alpha.

- Adam no te arrodilles soy una simple be- el me beso dejando la palabra en el aire.

- No eres una Simple beta además a ti es a la única que me arrodilló y con razones, Beth porfavor no quise decir eso...

- Adam...

- me gusta más que me llames lobito o chucho.

-¡Pero si nunca te he llamado chucho!- exclamó nerviosa.

- Melody no me dijo eso...

- ¿Lobito?- el sonríe y se acerca a mí...

- Que quiere mi luna.

- Estar sola.

El niega.

- ¿Tienes algo que hacer?

- ufff si un montón de cosas, 1. Regar los animales 2. Darle de comer a los dinosaurios 3. Darles de comer a nuestros hijos, no veas todo el día completo.- le digo con ironía pero a él no le importa incluso parece contento.

- ¿Que sucede?

- me encanto la numero 3.

- Adam...no tenemos hijos.- el se acerca a mí peligrosamente haciendo que mi espalda choque con la cabecera de la cama.

- Pero... podemos...tenerlos...

Abro los ojos asombrada y niego.

- Adam no.

- Sin duda prefiero lobito.

Yo niego con la cabeza y río.

- Lobito...¿Que quieres?

- Necesito que tengas una cita conmigo.

Abro los ojos asombrada y me sonrojo levemente, por la diosa que directo es este hombre.

- ¿Por qué?

- Quiero conocerte mejor y quién sabe igual alguna cosa más...

Me sonrojo levemente y asiento.

- Vale.

-¿Enserio?

-ajam.

El se levanta de la cama y da dos saltitos como un niño pequeño,