𝗚𝗥𝗘𝗘𝗡 𝗟𝗢𝗩𝗘 ━━━━ Steve Rogers

[13] I just want to dance

Por el viento soplando los arboles, el ambiente cálido y las aves cantando podría parecer un día de campo pero no, ellos se estaban ocultando en el hogar de Clint hasta que los ciudadanos se calmaran por lo sucedido con Hulk, era un lindo gesto pero también se llevaron la sorpresa de que Barton tenía familia.

Ahora Steve entendía mejor el porqué los héroes que conformaban la liga preferían mantener su identidad secreta, así también llevaba una vida normal, sin nada que les preocupara.

Un hogar.

—Los héroes más poderosos...— suspiró mientras tomaba otro tronco para acomodarlo y partirlo —Nos manipuló igual que unos niños.

—Parece que a ti me te afectó— comentó Tony ayudándole con la leña.

—¿Algún problema?— cuestionó volteando a verlo, claro que si le afectó pero prefería guardarselo para él mismo.

—No confío en alguien sin un lado oscuro— respondió levantando el hacha y partiendo el tronco —Llamame anticuado.

—O que tal si todavía no te lo enseño.

Y nuevamente ambos discutiendo sobre lo que el millonario había creado, ¿Por qué confiar cuando estaban ocultando cosas valiosas al resto? Parecía que todos escondían algo ¿Charlotte también lo hacía? Bueno además de el hecho de que era Linterna Verde.

En un arrebato de furia rompió la madera con sólo sus manos.

Antes de que pudieran continuar con su discusión Laura llegó pidiendo su ayuda con un tractor que mantenían en la granja dejando sólo al rubio con sus pensamientos.

Iba a continuar cortando cuando notó una sombra en el suelo, Superman estaba arriba volando con su capa roja ondeando en el aire, quería llamar su atención para que lo siguiera.

Soltó un suspiro y desde tierra siguió al kriptoniano hacía el bosque, una vez allí se encontró con Charlotte sin su traje, llevaba ropa casual con su manos dentro de sus bolsillos.

—Clark quería hablar con Natasha— se justificó cuando vio que Steve iba a preguntar la razón de su aparición.

—¿Sólo él quiere hablar?¿Sólo él tiene algo que decir?— preguntó acercándose firmemente a ella haciendo que Charlotte retrocediera.

La chica comenzó a balbucear hasta que chocó con un árbol, la mirada intimidante del capitán la había dejado sin palabras.
Steve iba a llegar a estar bastante cerca de ella cuando sintió una mano en su pecho deteniendo su andar.

Clark estaba entre ambos ya sin su traje y con sus lentes pero dispuesto a frenar en andar del rubio.

—¿Algún problema amigo?— su semblante era calmado pero su voz sonada como advertencia y severidad, en pocas palabras decía "das un paso más hacía mi amiga y te noqueo"

Steve y Clark se mantuvieron la mirada firme sin decir nada, si las miradas mataran ya se encontrarían tres metros bajos tierra con la lápida destrozada.

Charlotte agradeció a todos los dioses que Natasha llegó repentinamente para calmar a ambos hombres.

—¿Caminamos?— invitó la pelirroja al periodista rompiendo la tensión en el ambiente.

El de anteojos no respondió nada, levantó su brazo en una señal de caballerosidad para que Romanoff lo tomara y se alejaran caminando de allí para poder hablar con más privacidad.

Una vez que Steve y Charlotte se quedaron solos ella fue la primera en hablar.

—De hecho sí, yo también quiero hablar— admitió con una pequeña sonrisa nerviosa.

—Te escucho— Steve se recargó en el árbol junto a ella con su mirada posada en su total atención.

—Soy Linterna Verde— mostró su anillo en el dedo medio —Sí vivo en Metrópolis pero durante mi adolescencia estuve en Oa.

—¿Oa?— cuestionó con la ceja alzada.

—El planeta de Green Lantern, en el centro del universo— explicó —Allí hay más Linternas como yo, cada una cuida su planeta de origen, en mi caso la tierra.

—¿Tú poder viene del anillo?— volvió a preguntar acercándose para tomar su mano en donde llevaba el artefacto.

—Sí...— suspiró al sentir el suave tacto de Rogers contra su mano —Nos permite proyectar construcciones de energía verde con el pensamiento y luz sólida— continuó explicando con la mirada puesta en los ojos azules del capitán —Es una de las armas más poderosas del universo y entre más valiente sea su portador más fuerza tendrá.

La escena que se presentaba era preciosa para una fotografía del día de San Valentín, el viento soplando su cabello negro mientras que tenia la mirada levantada para ver el perfecto rostro del ojiazul, el cuál con una sonrisa sostenía su mano.

—Es perfecto— exclamó en susurro acariciando la mejilla de Charlotte con su mano libre.

Ella parpadeó repetidamente hasta que pudo formular las siguientes palabras
—Ni tanto, tengo que cargarlo con un linterna vieja y verde que tengo en mi casa porqué se le acaba la batería— respondió torpemente refiriendose a su poder.

—No me refería al anillo...— Steve se inclinó un poco a ella hasta sus respiraciones pudieron mezclarse.

Y !Bom! El tiempo se detuvo a su alrededor logrando hacer que sólo ellos dos existieran, Charlotte cerró los ojos para acercarse un poco más hasta que sus labios dieron el primer rose.

Su corazón comenzó a latir como loco por la sensación de mariposas revolotear en su estómago y antes de que pudiera pensar en algo más Steve tomó la iniciativa y soltó su mano para acunar su rostro entre sus manos y unir sus labios en un cariñoso y suave beso.

Sus cavidades bucales parecían estar exactamente hechas para su unión porqué se unían como una pieza de rompecabezas que hace mucho esperaba ser armado.

Charlotte llevó sus manos a la nuca de Steve para profundizar un poco más el beso sacándo suspiros de ambos amantes.

Desde ese momento los dos supieron que no podrían volver a besar a alguien más con ese amor y afecto, porqué dejaron de existir las demás opciones sólo para que sólo existieran ellos dos en todo el mundo.

Cuando sus pulmones empezaron a gritar por aire rompieron el beso para darse un suspiro mientras unían sus frentes aún con los ojos cerrados.

Unas sonrisas se dibujaron en su labios.

Por otro lado Clark y Natasha estaban en levitando en el aire, el kriptoniano quiso mostrarle el hermoso cielo azul a la rusa y eso fue lo que hizo.

Al mismo tiempo en que Charlotte y Steve se declaraban su amor sin necesidad de palabras ellos de igual forma lo hacían sólo que Natasha fue la que lo hizo ya que según ella Kent era algo tímido y bastante introvertido.

Pero a la vez entendía porqué era así, a pesar de haber salvado varias veces a la humanidad Superman aún no tenia del todo contento a los humanos, sí, él tenía la fuerza suficiente como para volar a la casa blanca, arrancar el techo y matar a todos los hombres importantes pero no lo haría porqué él al igual que el resto tenía corazón, sentimientos y un alma.

Natasha adoraba ver eso en él. Ella adoraba ver que a pesar de que siempre va a ser juzgado nunca se dejaba corromper, le gustaba ver que no se iba a rendir por un mal comentario porqué su moral y corazón se lo impedían.

Ella buscaba demostrar que su pasado no juzgaba su futuro y él estaba dispuesto a acompañarla en ese recorrido porqué Clark daba todo lo que tenía sin pedir nada a cambio.

El mundo podría estar cayéndose a pedazos pero las dos parejas de amantes sabían que a partir de este momento eso sería lo de menos mientras se tuvieran uno al otro.