𝗚𝗥𝗘𝗘𝗡 𝗟𝗢𝗩𝗘 ━━━━ Steve Rogers

[17] Acuerdos de sokovia

—Wanda dime que ves— pidió el Capitán América por el comunicador.

Sam, Natasha, Wanda y él se encontraban en una misión para atrapar al terrorista Rumlow que estaba por atacar un instituto que manejaba algunas de las infecciones más dañinas para el ser humano.
Atacaron y vencieron a algunos de sus secuases junto con ellos un arma biológica pero sólo faltaba el principal autor del plan.

Rumlow peleaba contra Steve a muerte, hasta que el rubio logró derribarlo con una patada dejándolo aturdido lo suficiente como para tomarlo del cuello e interrogarlo.

—¡¿Quien es tu comprador?!

—Él te recordó— respondió con un semblante bastante calmado comparado con la situación en la que estaba —Tu amigo, tu hermano, tu Bucky.

—¿Que dijiste?— cuestionó sacudiendolo un poco para que continuara hablando.

—Supo bien quien eras, yo estuve ahí— aseguró con una falsa sonrisa —Se puso muy sentimental, después reprogramaron su mente pero él quería que supieras algo y me dijo: puedes decirle a Rogers que cuando hay que irse, hay que irse...— Steve se distrajo con esas simples palabras bajando la guardia —Y ahora tu vendrás conmigo— sentenció Rumlow para después activar una bomba que tenia en su mano.

Si él iba a morir también quería matar a Steve pero su planes se arruinaron cuando Wanda logró contener la explosión salvándole la vida, trató de elevarlo al cielo pero no lo logró, explotó cerca del edificio en los pisos de arriba asustando a la gente que estaba abajo y saliera despavorida.

—No es verdad— susurró Steve sintiéndose culpable al pensar en las personas que se encontraban allí —Sam— llamó a Falcon por el comunicador —Consigue un escuadrón de rescate, el lado sur del edificio.

Corrió a las puertas del edificio y entró para ayudar a los heridos.

Pasado un mes de eso, ahora Wanda estaba en su habitación del complejo vengadores viendo las noticias del accidente.

"Una victoria a expensas de los inocentes, no es una victoria en realidad" declaró el rey T'Chaka de Wakanda por medio del noticiero hasta que el televisor fue apagado repentinamente por Steve, que se encontraba recargado en el marco de la puerta.

—Es mi culpa— exclamó con pesadez en su voz.

—Eso no es cierto.

—Enciende el televisor, ahí fueron muy específicos— las personas decían lo que querían por la tv, claro que así era porqué no vivieron la experiencia y era fácil hablar sobre ello.

—Debí notar esa bomba mucho antes de que tú lidiaras con ella— contestó entrando a la habitación y caminando hacía ella para sentarse a su lado —Rumlow dijo Bucky y regresé a ser el chico de diesciesis años de Brooklyn— soltó un suspiro —Murió mucha gente, fue mi culpa.

—Es culpa de los dos— admitió Wanda.

—Nuestro deber es salvar al mayor número de gente— comenzó a explicar Steve —aveces no salvas a todo el mundo pero si no aprendemos a vivir con eso a la siguiente tal vez nadie se salve.

Así era la vida con la que debían lidiar, debían aprender a hacer también ciertos sacrificios aunque en su mayoría sean debastadores.

—¿La extrañas?— preguntó la sokoviana repentinamente al ver que Steve se quedó unos segundos viendo a la nada refiriéndose a Charlotte.

Claro que lo hacía, sin embargo no contestó nada.

La joven pelinegra no había vuelto después de algunas semanas como se lo había dicho, al principio creyó que exageraba y sólo estaría fuera unos días pero esos días se convirtieron en semanas y esas semanas se volvieron tres meses.