Cerca.
En una fracción de segundo estaba a su lado. Autumn y el resto comenzaron a quitar sus manos lentamente del Libro. Ésta apoyó su rostro contra mi pecho. Tyson se hizo una bola en el suelo y empezó a lloriquear, y Hayley se agarraba a sí misma, temblando, mirándome para poder encontrar algo de consuelo. Así que coloqué a Autumn debajo de un brazo y la estreché con fuerza a medida que los sollozos se iban apropiando de ella, después extendí el otro brazo y le enarqué una ceja a Hayley. Por si acaso.
Me sorprendió verla lloriquear y arrastrarse por el suelo hasta llegar a mí, encogiéndose. Se veía tan pequeña y herida, por lo que me permitió colocar el brazo alrededor de su cuerpo. ¿Hayley? ¿Acurrucada? Dios, algo iba mal.
—¿Qué te duele? ¿Por qué lo has tocado? —pregunté, intentando sonar paciente y no exasperado como lo estaba. Hayley continuaba temblando bajo mi brazo.
—No lo sé —lloró Autumn—. No lo sé, no lo sé, no lo sé —sollozaba.
Me encontré con los ojos de Louis, viendo cómo se agarraba las rodillas hasta llevarlas a su pecho. Enarqué ambas cejas.
—No, gracias —murmuró, y puse los ojos en blanco.
—No era una invitación, imbécil —dije.
Louis me regaló una débil sonrisa. Él lo sabía.
—Yo tampoco lo sé —dijo Louis—. Sólo que... me duele todo. —Y entonces caí en la cuenta.
Sus auras.
Habían desaparecido.
Todo el mundo en la habitación se dio cuenta al mismo tiempo. Y todos sabíamos que algo terriblemente malo estaba ocurriendo. Al segundo escuchamos un golpe en la puerta. Yo ya sabía quién era antes de que Jo se acercara a abrir. Max le dio un empujón a Peyton para irse con ella. Y eso me fastidió. La pobre chica tan sólo tenía dieciséis años. Pero Louis la llamó con un gesto y la abrazó.
Max abrió la puerta, mientras las dos chicas se ponían en tensión ante su presencia. Liam sonrió, evaluando la habitación. Se topó con Zayn, y frunció el ceño.
—¿No me vas a dejar entrar?
—Ni de coña —gruñó Zayn. Tenía un aspecto espantoso. Imagino que ya estaba lo bastante agotado de haber sido el conejillo de indias de Liam, y ahora no tenía aura alguna. Alenté con la mía a Hayley y a Autumn, pero ambas eran cabezotas y no irían a aceptarlo. O quizá fuese porque no podían.
—Tu gente puede que necesite esto —dijo Liam, sacudiendo la cabeza y extendiendo la mano. La blancura del aura de Zayn se arremolinaba en su mano, después cambió a azul y a marrón y a verde y a rojo. Escuché a Hayley gimotear al ver su aura.
En seguida me di cuenta de que él tenía razón. Sí que necesitamos nuestras auras. Se estaban muriendo.
—¡Los estás matando! —grité.
Zayn me miró y le lancé una mirada, después rodó los ojos, tumbándose en el suelo y respirando con dificultad. Todos estaban pálidos, y sudorosos. Muriéndose. Se estaban muriendo y yo ya estaba perdiendo los estribos.
Liam entró al pequeño apartamento y yo sujeté a mis chicas con más fuerza. Su mirada pronto se encontró con la mía, sonriéndome. Tenía los ojos negros y tranquilos, mientras que los míos estaban abiertos de par en par.
—Hola, Harry —dijo.
—Recomponlos —escupí. Lo único que él hizo fue suspirar y extender los dedos. Al segundo un montón de colores volaron por toda la habitación, y lentamente todos comenzaron a tener mejor aspecto.
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Wicked |h.s| ESPAÑOL
Fanfiction❝Resulta increíblemente cálido al tacto, como si las yemas de sus dedos fueran a quemarme la piel❞ © 2014 All Rights Reserved - arctxhsx por la traducción / mary (WhoaLarry) por la autoría de la historia.