Capitulo 31

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Te quedaste atónita ante la petición del pelirrojo pues si bien no la esperabas tampoco comprendias por qué te lo solicitaba a ti cuando claramente Bakugou estaba a tu lado.

—No creo que yo deba tomar esa decisión— fue tu respuesta.

—Debes hacerlo— Kirishima se inclinó una vez más —sin tu aprobación él no irá a ningún lado—

—¿Es eso cierto?— te dirigirse al rubio confundida.

—¿No fuiste tú quien me pidió que no me fuera?— Bakugou se colocó a tu lado —permanecere junto a ti a menos que sea una situación de vida o muerte, y esto claramente no lo es—

—Izuku necesita su ayuda— intento una vez más Kirishima —yo no soy lo suficientemente bueno como para ponerlo a prueba, en cambio Katsuki ha sido su rival por años—

—Pero si te vas ¿Quien se encargará de tus responsabilidades?— la verdad es que no te agradaba la idea de separarse, pero no era igual que tú preocupación anterior pues el rubio no iría a la guerra ni si quiera estaría muy lejos así que realmente no comprendias por qué tú opinión era tan importante.

—Mi madre y tu se encargarían— respondió Bakugou —después de todo ella comenzará a prepararte para tu nuevo puesto—

—Enserio que sigo sin comprender por qué es mi decisión— suspiraste — pero se que es lo mejor para el reino, si Midoriya debe desarrollar sus habilidades al máximo y tú eres el indicado para ayudarle no veo por qué complicarse tanto—

—No se cuantos días estaré fuera— el rubio se encontraba sorprendido ante la calma que mantenias cuando hace solo poco tiempo le habías rogado que no se apartará de tu lado —¿Estás segura?—

—No es como si no te volviera a ver, si Kirishima logro venir en un día significa que yo también podré ir a visitarte—

—Entonces tengo una condición— Bakugou hablo —quiero que tu padre venga conmigo—

—¿Mi padre? ¿Por qué?—

—Por que debo aprender tanto como me sea posible de tus costumbres y de la ceremonia de la Madre Tierra— el rubio te sonrió —crei haberte escuchado decir que tendríamos las dos ceremonias—

—¿Es enserio?— el rubio asintió e inmediatamente te lanzaste a sus brazos —¡Gracias!— aunque ya lo habían hablando antes siempre habías creído que solo se llevaría acabo la ceremonia de esas tierras.

—¿Eso significa que si lo puedo llevar conmigo?— Kirishima se introdujo de nuevo a la conversación.

—Es lo mejor— le sonreiste al pelirrojo causando una punzada de celos en el rubio.

—Entonces, si te parece bien, nos marcharemos al amanecer— dicho esto Kirishima se marchó dejándolos solos.

—No me agrada la idea de que le sonrías así a otro hombre— Bakugou se había acercado a ti y ahora te envolvía con sus brazos.

—¿Que no una reina debe estar siempre sonriente?—

—No me gusta— el rubio hizo un puchero —¿pero estás segura de que me vaya? Aún puedo negarme—

—Estaré bien después de todo, según tu madre, los días próximos estaré muy ocupada aprendiendo todo lo posible de este lugar y mis nuevas responsabilidades— suspiraste —supongo que de todos modos no nos veríamos mucho así que lo mejor será que estés donde te necesiten—

—Deku me las pagará por esto— murmuró el rubio y lejos en la distancia un peliverde estornudo.

Cuando estabas dispuesta para ir a la cama te pareció extraño que el rubio no te siguiera dada su manía de compartir habitación, pero él solo te dijo que si estaba demasiado cerca de ti le dolería más su partida.

Esa noche en cuanto cayeron dormidos la extraña piedra que ahora había sido llevada a su habitación comenzó a brillar pero fue tan breve que nadie lo noto.

A la mañana siguiente despertaste en los brazos del rubio lo que al inicio no te sorprendió hasta que recordaste que la noche anterior se habían acostado cada uno en su respectiva cama.

Te giraste quedando frente a frente, lo observaste con cuidado quien diría que hace poco te habías asustado de compartir habitación con él, no sabías en que momento había pasado a ser parte de ti pues ahora sin duda extrañarias su presencia. La antigua Reina te había mencionado que la Madre Luna solo aceleraba el proceso de atracción y unión de los futuros reyes pero no creaba sentimientos donde no los había.

Te sonrojaste al pensar en que era lo que sentías por el rubio, tenías una idea pero no te sentías lista para aceptarla pues en ocasiones no podías evitar pensar que todo había pasado demasiado rápido y a pesar de tener una razón tu mente se negaba a aceptarlo.

Tu mirada recorrió aquel rostro, no habías tenido oportunidad de observarlo con esa calma. Con cuidado de no despertarlo colocaste tu mano sobre su mejilla mientras pensabas en lo que te depararía el futuro a su lado. Justo cuando estabas por retirar tu mano está fue sujetada y una sonrisa se formó en el rostro del rubio, inmediatamente te viste acorralada por esa intensa mirada color rubí.

—Despertar así todos los días en definitiva no me desagradaría— te dijo.

—Crei que dormirias en tu habitación— mencionaste avergonzada por haber sido atrapada observándolo.

—Cambie de opinión— te acercó más a él —no importa si sufro más, quiero pasar cada segundo posible a tu lado— para este punto tu rostro ya era completamente rojo —¿Que te parecería el desayuno en la cama?— asentiste.

Bakugou se puso de pie y mando pedir la comida, después volvió a la cama. Esa mañana la pasaron conversando sobre cosas sin sentido sabiendo que la partida del rubio se acercaba, no era como que no se volvieran a ver pero para este punto la unión de los dos se había hecho tan fuerte que la separación era difícil.

Finalmente todo estuvo listo para que se marchara, en ese momento Bakugou te tenía entre sus brazos rehusandose a soltarte mientras Kirishima le decía que debían irse.

—Estaré bien— le dijiste a pesar de la opresión que sentías en el pecho.

—No quiero dejarte— ocultó su rostro en tu cuello —que Deku se vaya al demonio— te alejaste de él y te aseguraste de verlo directo a los ojos.

—Ire a visitarte pronto— en cuanto terminaste de hablar sus labios se posaron sobre los tuyo con fuerza, a diferencia de a ti a él poco le importaba que los observaran, se separaron debido a la falta de aire y colocó su frente sobre la tuya.

—Esta bien, me ire— suspiro pero hay algo que no te he dicho.

—¿Eh?—

—Ese desgraciado será tu guardaespaldas mientras yo no este— señalo frente a él y Dabi sonrió.

Un capítulo más cerca de la boda.

Según la consulta anterior lo más probable es que la historia que continúe está sea la de Shigaraki "Déjame tocarte"
Claro que también continuaré escribiendo las otra opciones y tarde o temprano las publicaré.

Gracias por leerme ❤️
Nos vemos el próximo viernes ✌️

Ante los ojos del Bárbaro [Bakugou y tu] "Saga De La Madre Luna"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora