El Doncel Perfecto ~ NaruSasu ~

El Amor Candente

Habían pasado tres meses desde que llegaron a esa ciudad, tres meses de paz y felicidad con lo necesario para vivir.

Nagi y Kawaki trabajaban a medio tiempo sintiendo que nada podría estar mejor. Nagi mismo se sentía útil teniendo una familia propia y lo mejor, no tenía que ver a sus violadores y torturadores libres y vanagloriandose.

El doncel solo sabía reír todo el tiempo, quería al hijito de Kawaki como propio. Incluso se casaron en privado, era legal. Nagi tenía diescisiete años hacía dos meses ya.

Estando solos en casa preferían pasar el tiempo desnudos, además era verano. Les encantaban hacer el amor en todas partes de la casa disfrutando a pleno de aquel amor.

Pero su familia no la estaban pasando nada bien. Investigaron hasta descubrir que Sakura no estaba tras la desparición de Nagi estaba vez.

Boruto les contó a sus padres sobre Kawaki y su relación con Nagi. Desde ese momento empezaron a investigar a ese misterioso Kawaki sin resultado alguno.

Boruto intentaba comunicarse con su gemelo usando esa conexión que los unía, pero no lo pudo lograr debido a que el mismo Nagi colocó nuevamente una barrera entre ambos.

Aquello solo despertó la obseción de Boruto por encontrar a su gemelo una vez más y esta vez encerrarlo en serio.

Cuando Sasuke obtuvo al fin información sobre el posible paradero de Nagi hacía ya cuatro meses que el doncel había escapado.

Tanto Naruto como Boruto estaban desesperados por encontrar a Nagi, para encerrarlo en la mansión al completo pagándole los mejores y más confiables tutores. No le permitirían salir ni al jardín de la mansión sin vigilancia.

Sin embargo Sasuke era quien en verdad entendía a Nagi debido a que él sabía perfectamente lo que se siente ser violado y torturado por aquellos que disfrutan de total inmunidad.

Por tal razón el pelinegro recurrió a Juugo para que busque a Nagi, en cuanto lo encuentre debía comunicarse solo con su persona nada más.

Boruto no lograba entender por qué su gemelo actuaba así, y por más que su papá Sasuke intentase explicarselo el rubio no podía entenderlo ya que era muy puro e inocente para ello.

No había experimentado el horror que Sasuke y Nagi sintieron. Lo mismo sucedía con Naruto. Por eso Sasuke los amaba tanto a ambos. Y precisamente por eso Boruto era su favorito, era igualito a su amado esposo Naruto.

Boruto hablaba con Shinki por su celular sobre lo de Nagi y su frustración al haberlo perdido por segunda vez. Aunque en ésta ocasión sabía que era felíz. Sin embargo quería tenerlo a su lado.

- No lo entiendo Shinki ¿por qué Nagi prefirió escapar con ese maldito desconocido a seguir con nosotros su familia verdadera?

Boruto estaba en su habitación, más en concreto apoyado en la ventana contemplando la lluvia caer y mojar todo el jardín.

- El amor te vuelve ciego Boruto, te obliga a hacer incoherencias ya que es parte de ser humanos.

- Pero no debería ser así - contestó Boruto golpeando la pared frustrado.

- Calmate guapo, Nagi se enamoró por primera vez y solo quiso vivir su amor a su manera. Es solo eso.

- Shinki ¿soy yo o pareciera que estás de su parte?
- Quisiera tener el valor de Nagi es todo.
-¿Qué dices?

- La verdad, me gustaría tener su valor para huir de todo y de todos junto a tí a vivir nuestro amor con salvaje pasión.

Aquello el rubio no se lo esperaba, por tal razón enrojeció hasta la raíz de sus dorados cabellos.
-S-Shinki yo....tú....nosotros...

- Te sorprendí ¿verdad Boruto?
- Si bastante jajaja
- No debería, después de todo sabes que te amo hermoso chico dorado.

Así la conversación dió un magistral giro, dandole a Boruto algo mucho mejor porque pensar. De golpe empezó a sentir aquella molesta sensación bajo sus pantalones, necesitaba a Shinki de forma urgente.

- Shinki....me...
-¿Acaso te excité?
- Si, bastante maldita sea.

- Excelente - la risa sensual de Shinki resonó del otro lado del celular del rubio - Te amo Boruto.
- Y yo te deseo Shinki.