El Doncel Perfecto ~ NaruSasu ~

Irás Al Sacerdocio

Naruto y Sasuke escucharon aquella historia que Boruto les relató en absoluto silencio, sin perderse detalle alguno mientras Nagi permanecía sentado en una silla respirando entrecortado.

El alivio que sus padres sintieron al verlo fue notorio, por tal razón aceptaron escuchar aquella increíble historia. Shinki miraba para otro lado entre avergonzado y asustado, ya que era consciente de que el castigo que recibiría sería atroz.

Sin embargo no se arrepentía de nada, tal era el dolor que sentía al recordar esas malditas fotos donde Mitsuki besaba y abrazaba a Boruto, su amado rubio.

Cerraba las manos en forma de puños mientras oía el relato que Boruto narraba a sus padres minimizando su infidelidad. Por eso al acabar explotó furioso.

-Minimizas todo Boruto, esto es solo tú culpa maldito infiel. ¡Yo creí en tí! ¡Te amaba en serio maldita sea!

- ¡Oye! ¡Te dije mil veces que no se cómo pasó aquello! ¡No recuerdo haberme besado con Mitsuki! ¡Solo te amo a tí Shinki!

-¿En serio? Entonces ¿por qué el mismo Mitsuki me llamó presentandose como tu prometido exigiendome alejarte de mí?
- No lo se Shinki ¡No lo sé maldita sea!

Gaara entró en esos momentos logrando que ambos enmudezcan. El pelirojo miraba severamente a su hijo quien desvió la mirada al sobreponerse a la sorpresa.

-Basta Shinki - ordenó Gaara con dureza siendo más que suficiente para el pelinegro - Lo que hiciste no tiene justificativo alguno.

-¿Gaara? - Boruto estaba anonadado - Pero ¿cómo....? - luego miró a sus padres - Les pedí expresmente que no le digan nada a Gaara y aún así ustedes...

- Yo estaba con ellos cuando llamaste, por lo tanto no los culpes. Me habría enterado de todas formas Boruto.

- Tenemos que llevar a Nagi al doctor - dijo Naruto interrumpiendo aquello - No se ve nada bien.
-Lo atenderé no bien lleguemos a casa - dijo Sasuke - Vamonos.

Gaara le dió a su hijo una fuerte cachetada haciendolo sangrar por la nariz. Boruto no soportaría que lo golpe después de todo era su amado, por tal razón saltó en su defensa.

- ¡Oye! ¡Dejalo en paz!
- No te metas Boruto, enviare a Shinki al sacerdocio definitivamente.

Ante aquello tanto Shinki como los demás miraron a Gaara anonadados. Pero el pelinegro nada dijo, limitandose a cerrar los ojos con intenso pesar.

Sin embargo Boruto no permitiría que eso pase ya que pese a todo lo ocurrido, sus planes de casarse con esa belleza oscura seguían intactos.

- No - dijo el rubio con firmeza -No creas que permitiré que le arruines así la vida.
- Es mi hijo
-¡Es mi prometido Gaara!

- ¡Como si eso a tí te importara maldita sea! ¡Deja de decir eso! - explotó Shinki precionando un pañuelo en su nariz sangrante

- Shinki...
- Boruto, mi hijo secuestró a tu gemelo y no solo eso. Encima lo drogó...
- Fue un malentendido Gaara.

Naruto los interrumpió al volver al departamento ya que debían irse porque Nagi debía ser atendido cuanto antes.

- Es tarde ya Boruto
- Hijo, nos vamos. Ahora.
- Gaara escuchame bien, ni se te ocurra encerrar a Shinki en ningún lado o...

- ¿O qué Boruto?
- O lo lamentarás y creeme que será así
- ¿Es una amenaza Boruto?

- No Gaara, es una promesa
- Boruto por dios, cuida tus palabras hijo. Además nos vamos y tú si o si vienes con nosotros.

Sin decir más Boruto salió del departamento.
- Hablaremos mañana Gaara, gracias por todo.

Sin esperar respuesta alguna Naruto se fue dejando solos a padre e hijo.

- Shinki - la voz de Gaara era de hielo - ¿Eres consciente de lo que ocasionaste? Encima involucraste a Shikadai.

- Tío yo quise ayudarlo ya que...
- Silencio. Nos vamos ahora mismo. Te llevaré a casa sobrino. En cuanto a tí Shinki...estás castigado.

- Genial, mi prometido me es infiel y mi padre me castiga a mí. Estupenda suerte la mía.
- Shinki solo...solo no digas más - le dijo Gaara - Andando.

Así los tres dejaron el departamento al segundo siguiente. Las cosas no podían estar peores.