Ishigami Senku

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-¿La Luna?-(cuestionó ___ con una sonrisa)-Seguro eres único, no me esperaba esa respuesta de nadie más.

-¿Qué tiene de especial querer viajar a la Luna? Cualquiera puede desearlo.-(replicó con un bufido Senku)

___ le apuntó con un dedo acusador.

-Pero solo tú lo dices con esa mirada que dice "Iré, y te aseguro que será pronto". Tú tienes la certeza de que lo lograrás.-(repuso ella antes de soltar una risita)-Es lo que me gusta de ti.

Él rodó los ojos con desinterés.

-Te impresionas por muy poco.-(replicó Ishigami con sencillez)-Por eso crees estar enamorada de mi. Aunque yo lo dudo mucho.

La joven alzó una ceja curiosa.

-¿Entonces por qué sales conmigo? Es extraño ser novio de alguien a quien crees que no le gustas.-(repuso levantando levemente la comisura de sus labios)

Él la observó con intensidad un par de segundos, que hicieron latir con fuerza su corazón.

-Te quiero. Así que prefiero creer que tú también lo haces.-(concluyó antes de acercarse a besarla)- Básicamente, me estoy aprovechando de tu confusión.

Se quedaron abrazados en aquel salón de ciencias. Era su lugar secreto. Siempre se quedaban hasta tarde solos en ese lugar.

De pronto una luz verde se propagó por el planeta y todo se puso negro. Sus conciencias se debilitaron y ___ quedó en el vacío.

Miles de años transcurrieron antes que pudiera volver a un estado de normalidad.

La joven de diecisiete años, se despertó como si estuviera saliendo del agua y una familiar mirada rojiza la recibió con alegría contenida.

-Por fin despertaste, tontita.-(dijo Senku con una suave sonrisa)-Te estuve esperando.

Ella miró alrededor confundida y aliviada de ver un rostro conocido al revivir.

-¿Senku?¿Qué pasó?-

-Primero que todo, vamos a ponerte algo de ropa. La vista es de lo más desconcertante.-(repuso el muchacho con cabello de cebollín)-Aunque no me quejo.

___ se sonrojó hasta las orejas. Estaba completamente desnuda ante el muchacho que amaba y que además, era su novio.

Una vez vestidos el joven le explicó la situación. Miles de años, la civilización desapareció, en alguna parte entraban unos leones y finalmente llegaron a qué un lunático reformista quería asesinar al científico.

La joven se golpeó la frente antes de soltar un suspiro cansado que sorprendió a Taiju y Yuzuriha.

-Me voy unos miles de años y ya te estás metiendo en problemas.-(comentó con una media sonrisa)-¿Dónde está? Traiganlo, le daré una paliza.

Todos la miraron alarmados.

-Sé que eres una excelente luchadora, pero ese sujeto se comió un león, luego de haberlo matado con sus propias manos.-(informó Senku cauteloso)

Ella se encogió de hombros despreocupadamente.

Su fuerte en verdad no era la fuerza bruta.

Le gustaba más la agilidad, la destreza. El saber golpear en el lugar adecuado con la precisión necesaria. Los combates eran recreativos. Algo que ella amaba.

No dejaría que un matón se aprovechara de la situación para manipular al resto a partir de la fuerza.

-Necesitamos el ácido nítrico de esa cueva ¿No?-(indicó ___ antes de sentarse en el piso a esperar)-Esperaremos aquí tranquilamente, y lo haremos entrar en razón.

Senku le hizo una seña a Taiju y juntos atraparon a ___ para escapar antes de que Tsukasa regresara.

-¡Déjenme ir! ¡Se arrepentirán de esto!-(gruño molesta)

-Al menos estarás viva para quejarte.-(replicó Senku agotado)-Así que se una niña buena y no pelees. Lo más lógico es huir.

Ella soltó un bufido irritada.

-¿No es más sencillo pelear de una vez? Igual vendrá a hacernos daño.-(reflexionó aún siendo cargada por Taiju)

-Cuando eso ocurra, tendremos un arma científica que nos dará ventaja.-(informó Ishigami alegre)-Y tú estarás más calmada para pensar racionalmente. Normalmente enloqueces cuando se meten conmigo.

___ solo rodó los ojos.

-Y tú te vuelves sobreprotector cuando se trata de mi. Deberías dejarme pelear y listo.-

Taiju y Yuzuriha observaban sonrojados la pelea. Se notaba que ellos eran pareja.

-No quiero que te hagan daño. En este mundo una mínima herida puede desencadenar una infección y ser fatal. ¿Una pelea a muerte entre dos bestias? Probablemente los dos mueran en una pelea puño a puño.-(advirtió con una voz un poco más suave)-No quiero perderte, no me arriesgaré.

Y la muchacha no pudo objetar nada. Cuando Senku le hablaba en ese tono suave y confidente ella se perdía completamente. El muchacho hace tiempo la había conquistado, sin embargo, desde que comenzaron a ser novios y él se abrió a ella, ___ supo que le sería imposible dejarlo ir.

-Senku....haré lo que sea que me pidas.-(murmuró con rendición)-Confió en ti. Así que busca una manera en la que todos salgamos ilesos de esto.

Tiempo después se encontraban al lado deal cadáver del muchacho. Tsukasa le había roto el cuello mientras ellos no estaban.

Las lágrimas se acumularon en el rostro de la joven con frustración. No podía acabar así. Era imposible que todo se terminara en ese instante. Senku era todo lo que el mundo necesitaba, no podía morir ahí.

Taiju y ella estaban seguros de que ese no era el final de la historia. Juntaron cabezas y rezaron para que la despetrificación curara su cuello herido.

Cuando abrió los ojos todos se lanzaron a abrazarlo.

-Si me vuelves a asustar así yo misma construiré tu tumba.-(amenazó entre fuerte sollozos mientras se aferraba al muchacho)

Él la rodeó con sus brazos y le dió unas suaves palmaditas en la cabeza.

-Sabes que no te dejaría sola. Eres demasiado torpe, sino estoy para cuidarte no sobrevivirías en este mundo de piedra.-(le dijo con voz suave antes de susurrarle al oído)-Te amo.

___ sollozó con más fuerza tratando de articular un "yo también".

Y en ese momento lo decidió.

Tsukasa podía irse cuidando. Nadie mataba a Senku Ishigami y no recibía un castigo por ello.

-Nosotros nos iremos a buscar la señal de humo.-(informó el científico tomando la mano de su novia)-Si la dejo en el reino de Tsukasa seguro que trata de asesinarlo y la ciencia no necesita eso. Así que viene conmigo para poder vigilarla.

Ella hizo un puchero molesta. ¿Cómo la conocía tan bien? Debería ser ilegal leer los pensamientos.

-No leo mentes, lo tienes escrito en la cara.-(se burló Senku con una media sonrisa)-Vamos, tenemos una civilización que reconstruir.

___ sonrió para dentro dejándose guiar por la reconfortante mano del joven.

Y supo que todo estaría bien, siempre y cuando él estuviera a su lado.

Nota de autora

Espero que les haya gustado el capítulo.

Cuídense mucho y descansen bien.

¡Nos leemos pronto!

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