Itadori Yuuji

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Era tarde.

El sol se estaba poniendo y ella volvía al salón luego de su entrenamiento de voleibol.

-¡Vamos, Itadori!-(escuchó la voz de uno de sus compañeros)-¡Dinos! ¿Qué chica te gusta?

-Mmmm.....-(murmuró el muchacho pensativo)-Alguien que me guste......creo que no tengo a nadie.

-¿Si tuvieras que elegir a una chica de nuestra clase?-(insistió su amigo)

-Pues, supongo que ____.-(declaró Yuuji con simpleza)

-¿____? Está buena, lo admito. Pero es una bruja. No pensé que tú tipo fuera la reina del hielo.-

-¿Una bruja? A mí me parece una persona muy cálida y amable. Tiene algo tranquilizador en su forma de hablar.-(replicó el chico de cabello rosado)-Y más que estar buena.....yo diría que es hermosa. Ya sabes, cuando camina se ve muy elegante.

____ ingresó al salón de clases manteniendo su cabeza en alto. Miró feo al amigo del chico atlético y se detuvo a observar a Itadori. Él no parecía particularmente interesado en ella. Solo inclino su cabeza en señal de saludo y continuó leyendo su revista como si nada hubiera pasado.

Esa escena se quedaría marcada en su memoria tiempo después. Era bastante lista y ambiciosa, por lo que decidió ir a una preparatoria en Tokyo. Pronto se topo con el muchacho más atlético que había conocido.

-¿Itadori? ¿Qué haces aquí? ¿Qué clase de uniforme es ese?-(interrogó con curiosidad al ver su traje morado con capucha)

-¿____?-(le habló con un jadeo que mostraba frustración)-Oh joder, este es un muy mal momento.

Ella se sintió un poco ofendida. No era que se llevarán bien ni nada, pero él había dicho que era hermosa y.......No tuvo tiempo para seguir divagando cuando el muchacho la afirmó de la cintura y dió un gran salto.

El piso a sus pies se desplomó y soltó un grito agudo mientras se aferraba a los hombros del muchacho. Seguia en sus brazos cuando comenzó a correr como si no hubiera un mañana. De pronto un pelinegro cayó del cielo detrás de ellos y Yuuji se detuvo abruptamente.

En medio del aterrizaje ____ se aferró a los hombros de su antiguo compañero y por la inercia del movimiento terminó besándolo por accidente. Ambos abrieron los ojos sorprendidos, pero ____ aún más cuando vio una extraña criatura con forma de rana siendo atacada por unos lobos.

-¡Itadori!-(gritó aterrorizada tomando la mano del chico para que no fuera a meterse a la extraña pelea)-¡Ni se te ocurra ir hacia allá!

El pelirrosa le sonrió con confianza antes de golpear al monstruo con su puño azul y hacerlo desaparecer.

-Puta vida.-(concluyó ____ antes de desmayarse)

Cuando se despertó, lo primero que vio fue el cabello rosa del muchacho. Se sentó con rapidez y tocó los hombros del chico deportista con preocupación.

-¿Estás bien? ¿No estás herido? ¿Tienes todas las partes de tu cuerpo?-(preguntó ansiosa)-¿Qué rayos era eso? ¿Cómo pudiste golpearlo?

-Estoy bien ____, tu fuiste la que se desmayo. Aunque no entiendo cómo pudiste ver la maldición.-(contestó Itadori sosteniendo sus manos con afecto) 

El pelinegro, que al parecer se llamaba Fushiguro, hizo una forma con sus manos y apareció un lobo muy lindo pero amenazante.

La chica saltó de su cama y se ganó entre el lobo y Yuuji, con toda la intención de protegerlo.

-Sip, definitivamente ve maldiciones.-(concluyó un albino con una extraña venda en los ojos)-Y al parecer quiere proteger a nuestro querido chico nuevo.

-Itadori, yo los distraigo tu corre.-(ordenó con seriedad)-Tienes más posibilidades de sobrevivir que yo.

-____, estamos a salvo. Son idiotas pero no son el enemigo. Al parecer, estar en contacto conmigo te hizo capaz de ver maldiciones, lo siento mucho.-

Entonces Yuuji tuvo que darle una extensa y detalla explicación de su situación actual.

-Oh, ya veo.-(murmuró ella pensativa)-Entonces, ¿Ahora vere de por vida esas maldiciones? ¿Por todos lados?

-Efectivamente.-(comentó Gojou)-¿Quieres venir a nuestra escuela? Las maldiciones dan mucho miedo, pero aquí estarás bien.

La chica miró al pelirrosa titubeante.

-¿Qué opinas Itadori?-(interrogó con un suspiro cansado)-¿Qué debería hacer?

-Deberias entrar, así podemos pasar más tiempo juntos.-(declaró el chico con decisión)-Las maldiciones y los hechiceros son cosas aterradoras, pero me encargaré de protegerte. Así que no te preocupes y quédate a mi lado.

Desvío la mirada avergonzada.

-Si lo pones así.....-(murmuró ella con timidez)-Supongo que puedo transferirme.

Al ser compañeros de clases, se dió cuenta de que eran cuatro alumnos en su año y pudieron hacerse más cercanos. Ella podía ver maldiciones, pero no sé metía en las peleas. Ayudaba un poco con la estrategia y se quedaba al lado de Gojou-sensei cuando los otros iban a matar maldiciones.

-Entonces, ¿Besaste a ____, por eso ve maldiciones y ahora eres su guardian?-(preguntó Nobara con curiosidad)-¿Siempre fuiste esa clase de chico? Pensé que eras un simplón.

-No se a que te refieres.-(replicó Itadori con un suspiro)-Además fue un accidente. Sukuna confesó que fue él quien envió energía maldita cuando nuestros labios se tocaron.

-¿Por qué Sukuna haría eso?-(interrogó ____ confundida)-Soy una persona normal y corriente.

El pelirrosa desvío la mirada con cautela, pero una boca salió en su mejilla y se decidió a hablar por él.

-El mocoso se muere por ti.-(declaró con una sonrisa)-Solo le hice un favor, además, cuando me apodere de su cuerpo podré disfrutar de matar a la chica que le gusta.

-¡Cállate Sukuna! Eres demasiado hablador cuando quieres.-(gruñó el muchacho avergonzado)

-Entonces de verdad te gusta.-(replicó Nobara con un bufido)-¿No es tu culpa que ella este maldita?

-¡Eso ya lo sé! Lo siento mucho ____, no te lo había dicho porque no queria que me odiaras.-(se disculpó Itadori con rapidez)-¿____?

-Entonces.....-(comenzó ella con valentía)-¿Deberíamos salir?

Nobara y Yuuji abrieron sus bocas sorprendidos mientras la muchacha esperaba pacientemente una respuesta.

-¡¿Ehh?!-(exclamó el chico asombrado)-¿Estás segura? Soy la persona que básicamente arruinó tu vida.

Ella soltó una risita negando con suavidad.

-De hecho, siempre he sido una persona aburrida. Así que convertirme en amiga de Fushiguro, Nobara y tuya me ha hecho muy feliz.-(confesó con una sonrisa)-Si no contamos tu muerte inminente, creo que ustedes son lo mejor que me ha pasado en años.

Ambos estaban al borde de las lágrimas por algún motivo y ____ no puedo evitar soltar una carcajada.

-Salgamos, por favor.-(pidió Yuuji con alegría)

La joven asintió mientras Kugisaki suspiraba.

-No puedo creer que Itadori consiguiera pareja antes que yo.-(concluyó frustrada)

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