Anime x Tú

Sanji Vinsmoke

¿Por qué cuando estás enamorado.....no puedes ver a nadie más?

___ siempre había sido un persona tímida.

La manera en que la trataba su familia, su inseguridad y su incapacidad de cambiar fomentaban está condición.

Era un asco conociendo gente nueva y apenas podía articular una frase sin tartamudear.

Por eso cuando se topó con él, nunca volvió a ser la misma.

-¿Está perdida, bella dama?¿Puedo ayudarle en algo?-(cuestionó un rubio con corazones en vez de ojos)

La joven miró alrededor alarmada antes de sonrojarse y asentir.

El chico estaba maravillado, nunca había tenido una reacción tan buena de una mujer. Normalmente conocía a muchachas fuertes que sabían valerse por sí mismas y por tanto lo rechazaban sin vacilar.

Ella parecía un pollito que necesitaba aprender a volar.

-¿Podría....decirme.... dónde puedo encontrar un barco?-(murmuró con timidez)

-No hay necesidad de ser tan formal. Soy Sanji.-(se presentó haciendo una elegante reverencia)-La guiare con mucho gusto, si me concede el honor de decirme su nombre.

-Soy ___, ___. Un gusto Sanji-san. Muchas gracias por tu ayuda.-

Había algo en ella que lograba que el cocinero quisiera protegerla y mirmarla. Él le ofreció su brazo y ella se sostuvo con una leve sonrisa.

-Si no es muy indiscreto preguntar, ¿Para que necesitas un barco?-(interrogó con amabilidad)

-Digamos....que de alguna manera me cansé de todo.-(explicó ___ titubeante)-Necesito un respiro. Necesito irme de aquí.

El cocinero la miró con una sonrisa triste antes de llevarla a un barco con cabeza de girasol. O de gato. No estaba completamente segura.

Subieron al barco y se encontró con un peliverde con katanas, una mujer morena y una chica de pelo anaranjado.

-¡Luffy!-(gritó Sanji con energía)-Traje a alguien que quiere unirse a la tripulación.

Un chico de cabello negro con un sombrero de paja salió de lo que parecía ser la cocina mientras masticaba una alita de pollo.

-¿Quién es ella?-(dijo con rudeza antes de analizarla con curiosidad)-Parece muy normal.

-Se llama ___. Está buscando una barco que la aleje de aquí y pensé que teníamos espacio para alguien más en el Sunny.-(habló el cocinero relajado mientras fumaba un cigarrillo)-Aunque claro, ella es bastante normal para tus ojos.

Mugiwara la analizó con el ceño fruncido.

-¿Por qué quieres alejarte de esta isla?-(terminó por preguntar)

Ella se armó de valor para responder. Parecía que esa pregunta era una prueba para ver si podía subir a bordo con ellos.

-Quiero ser libre.-(afirmó con certeza)-Deseo conocer el mundo. Quiero una aventura.

-Esta bien, puedes ser nuestra nakama.-(accedió Luffy con una sonrisa)-Tendrás muchas aventuras en el barco del futuro rey de los piratas.

___ palideció ante la palabra.

¿Piratas? Creyó que eran comerciantes o algo por el estilo. El rubio era demasiado elegante para ser un pirata.

-¿Sabes hacer algo en especial?-(preguntó Nami amablemente)

Ella asintió abrumada. Ahora era una pirata. No sabía si era algo bueno o malo, pero prefería confiar en el destino.

-Dibujo.....-(pronunció con inseguridad)-Lo que dibujo se convierte en realidad.

-¡Genial! ¡Muéstranos!-(gritó emocionado el mugiwara)

Ella sacó un pergamino y un lápiz de su mochila para ponerse a dibujar un bonito y realista pájaro. En cuanto unió la última línea, el pajarito salió volando del papel.

Todos aplaudieron alegres y ella sonrió complacida. Hasta que vió un esqueleto andante y soltó un grito de espanto.

Se aferró al brazo del cocinero con nerviosismo.

-Es... esqueleto...-(pronunció con miedo)

El rubio le dió unas palmaditas en la cabeza para tranquilizarla.

-Solo es Brook, no te preocupes.-(dijo él con despreocupación)-Es un tripulante. Aún falta que conozcas al reno que habla, al robot y al narizón.

Extrañamente, ___ se adaptó rápidamente a los mugiwara. Ellos eran la familia alocada y cariñosa que nunca tuvo.

Sin restricciones, sin cadenas.

Ella era libre.

-___.-(llamó Nami mientras se cruzaba de brazos)-¿Qué le hiciste a Sanji?

La joven le devolvió un mirada extrañada. No entendía a que se refería. Y eso que llevaban meses juntos.

-Pensé que era una etapa o algo.-(aclaró la navegante)-Por eso no dije nada, pero al parecer va para largo.

-Mmmm....no sé de que hablas.-(y ante la mirada de reproche de su contraría añadió)-Lo siento.

-Él ya no hace lo que le pido. Su fase de estúpido romántico ya pasó.-(replicó la pelinaranja con un bufido)-Sanji ahora está demasiado pendiente de ti. Tanto que hasta se convirtió en alguien normal, es anormalmente normal.

___ se encogió en su lugar con nerviosismo. Estar en la tripulación le había ayudado a forjar su carácter, pero Nami aún le daba miedo. La mujer era muy carismática y amable, pero nadie quiere verla enojada. Y en ese instante ella parecía molesta.

-Si te gusta dile y en caso contrario, rechazalo de una vez.-(le ordenó la pelinaranja)-Esto parece serio.

-¡Nami!-(gritó Luffy con seriedad)-No te metas en sus asuntos. Ellos lo resolverán solos, no te atrevas a interferir.

La joven agachó la cabeza resignada. ___ se sintió aliviada por la intervención del capitán.

-¡___!-(llamó a continuación mugiwara antes de sonreírle amable)-Haz lo que te haga feliz. Asegúrate de no arrepentirte.

Ella asintió muy confundida. Aún no comprendía de que iba todo ese asunto.

Cuando se fue a dormir esa noche sintió un golpe en la puerta de su camarote. ___ se levantó con curiosidad y abrió para encontrarse al cocinero de su barco.

-¿___-chan? ¿Puedo hablar contigo un momento?-

Le permitió entrar a su habitación con un gesto de su cabeza. Observó como él entraba con nerviosismo.

-Te quería decir que me estoy redimiendo.-(declaró mientras tomaba sus manos entre las suyas)-Ya no estaré con otras mujeres, solo me preocuparé por ti y solo tú serás mi amada.

-¿Sanji....-san?-

El rubio se inclinó en una reverencia.

-¡Por favor, se mi novia!-(pidió con una sonrisa tímida)-Te adorare por siempre.

____ parpadeó con compresión. Por eso todos actuaban tan extraño. Ella le gustaba a Sanji.

Esperen.

¡Ella le gustaba a Sanji!

Se sonrojó con fuerza antes de asentir con modestia.

-Será un placer.-(accedió ____ feliz)

El rubio se acercó y la besó con suavidad.

Y ____ pensó que después de todo convertirse en pirata había valido la pena.