CHRIS EVANS - ONE SHOTS

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- Pásame la ensalada.

- Pietro estás ensuciando tu suéter.

- Sí, mamá.

- Les dije que contratáramos un mesero.

- Los odio tanto.

- Voy por otra cerveza .-digo mientras me pongo de pie para poder huir a la cocina.

Sonrío al encontrarme a Steve mirando por la ventana de esta. A lo lejos se pueden ver algunos fuegos artificiales.

Se sobresalta cuando me escucha abrir el refrigerador.

- ¿Todo bien?

- Estoy a nada de olvidar que es nochebuena y ponerles veneno en la comida .-ruedo los ojos.

Steve ríe acercándose a mi.

- Pero no lo harás .-besa mi cabello para dejar la palma de su mano en mi espalda baja.

- Estoy así .-le muestro mi dedo índice que está por tocar mi pulgar, nuevamente ríe.

Le doy otro trago a mi cerveza y recargo mi rostro en su pecho. Sus brazos me rodean de inmediato en un bonito abrazo.
La tela de su suéter raspa un poco mi rostro, pero no le digo nada, simplemente lo abrazo de regreso.

- ¿Van a seguir derramando miel por toda la torre o ya vendrán a convivir a la sala? -la voz de Natasha los hace sobresaltarse y separarse.

- ¿Acaso Bruce no te está prestando atención? -su rostro cambia de inmediato, me gano un golpe en el hombro que me hace jadear.

- ¡Natasha! -le reclamo.

- No te metas conmigo, niña .-ruedo los ojos cuando me señala con amenaza.

Dejo a Steve con Natasha en la cocina para dirigirme a la sala en donde está el resto del equipo con sus regalos de Santa secreto, menos Pietro, quien come su ensalada de manzana desesperado.

- ¡Por fin! -Tony celebra, después de tomar mi regalo, me dejo caer en uno de los sillones.

Natasha y Steve llegan unos segundos después.

- ¿Puedo iniciar yo? -Wanda se pone de pie con mucha emoción.

- Ya que insistes .-Pietro le dice con ironía a su hermana.

- Qué bueno que no me tocaste tú .-su gemelo la mira ofendido haciéndonos reír.

Cuando ya estamos sentados todos juntos (Steve a mi lado por supuesto), Wanda inicia.

- A mi me tocó una persona muy inteligente .-las miradas de todos se dirigen a Tony y a Bruce.- Con 7 doctorados.

Tony rueda los ojos irritado haciéndonos reír.

Bruce se pone de pie para recibir el regalo de Wanda, se abrazan unos segundos y lo miramos expectantes.

- Odio esta presión .-murmura haciéndonos reír.

Me carcajeo cuando lo veo sacar una caja de Lego gigante de Hulk.

Wanda ríe también, cubriendo su boca.

- Gracias Wanda .-aprieta los labios, suelto una risita.- A mi me tocó alguien que ya lo tiene todo, así que esto fue muy difícil, por favor no me mates.

Tony se pone de pie haciéndonos reír. Ambos se abrazan unos segundos.

- ¡Consíganse una habitación! -todos reímos cuando Pietro habla.

- Te amo Bruce .-Tony besa la mejilla del doctor molestándolo, mientras presuma su tarjeta de cupones de iHop.

Pasa el tiempo y la única persona que falta de recibir su regalo soy yo, Steve se pone de pie y sonrío al verlo nervioso.

- A mi me tocó la mujer más hermosa de este planeta, ella es amable, graciosa, cariñosa.

- ¡Gracias! -Tony se lanza a sus brazos haciéndonos reír.

Natasha lo arrastra a su lugar.

- Meg .-me entrega una bolsa con bonitas decoraciones.

Deja un rápido beso en mis labios separándose para ver mi reacción.

Abro la bolsa y rio al encontrarme con otra bolsa más pequeña, abro la otra bolsa sintiendo como mis ojos se abren de la sorpresa.

Saco la pequeña cajita y cuando la abro ahogo un grito.

Levanto la mirada para buscar una explicación, sin embargo no encuentro los ojos azules que buscaba. Tengo que desviar mis ojos un poco hacia abajo para encontrarlo, sobre una rodilla.

- Steve...

- ¿Te casarías conmigo? -se me escapa una risita, mis ojos se llenan de lagrimas cuando saca un bonito ramo de rosas de su espalda.

No lo pienso ni un segundo y me tiro a sus brazos.

- ¡Claro que sí! -escucho como los demás celebran mientras el rubio me regresa el abrazo.

Sus labios se juntan con los míos, mis lagrimas se interponen haciéndonos reír.

- ¡El anillo Rogers! -Tony le grita. Ambos reímos nerviosos.

Me quita la cajita, para tomar el precioso anillo.

Nuestras manos tiemblan un poco cuando se juntan, desliza el anillo sobre mi dedo anular.

Todos gritan de nuevo.

El rubio me toma en brazos haciéndonos girar.

Unos segundos después me deja en el piso nuevamente.

Con sus pulgares limpia mis mejillas.

Rodeo como puedo sus hombros.

- Feliz navidad amor.

- Feliz navidad Steve.

Sonríe para unir nuestros labios.