Rivales ||Enzo Fernández ✓

005

Los vestuarios eran una locura, los gritos de emoción, las canciones, el humo de habanos y las bebidas alcohólicas por todos lados. Estaban todos ahí festejando para nada tranquilos, el Dibu saltaba de acá para allá, igual que el Papu y bueno, casi todos.

Joaquín rápidamente se unió a los festejos y todos gritaron con emoción al verlo, tras su lesión y su orgullo, nadie se imaginaba que viajaría a Qtar para alentar a la selección.

Mis ojos se cruzaron con los de Leandro y rapidámente empujó al Cuti y corrió para envolverme en sus brazos. Me giraba para todos lados y besaba mi cabeza repetidas veces mientras lo escuchaba llorar de alegría. Aunque ciertamente no sabía si era alegría por verme o por haber ganado.

─¡Mí bostera hermosa! ─sonrió cuando me soltó y no le duró mucho porque enseguida volvió a abrazarme─. Te extrañé mucho y ni te imaginas el gordo lo que te extrañó, tiene una foto tuya en su buró.

Sonreí ante las locuras que decía Paredes y rapidámente lo busqué con la vista, lo encontré abanicando una botella de Federico y cuando me vió se la encajó a Paulo. Empezó a correr hacia mí y yo hacia él, de un salto me colgué en él, envolví mis piernas en sus caderas y me abrazó con fuerza mientras se dejaba caer al piso conmigo.

La vista de todos se enfocó en nosotros dos, Nicolás se tapaba la cara con las dos manos para que yo no vea que estaba llorando. De repente sacó sus manos y lo vi rojo, me volvió a abrazar con fuerza y se levantó conmigo a upa girándome para todos lados mientras que todos lo festejaban y le decían un par de tonterías.

─¡Otamendi tiene corazón! ─escuché que gritó Alexis.

─¡El viejo llora! ─lo burló Paredes entre risas.

─Te vas a quedar seco pa ─Nico me bajó al escuchar la voz de Joaquín y lo miró con cara de pocos amigos mientras que el tucumano se acercaba a darle un abrazo.

─Hacete el piola y la patada más baja que te voy a pegar va a ser en el pecho ─amenazó.

Dejé que los dos se siguieran peleando y empecé a saludar a los chicos. Leo me recibió con un abrazo de alegría que me llenó el corazón, aunque me hizo una escenita de celos porque lo saludé primero a Lean pero rápidamente se le pasó el enojo cuando lo abracé.

El Dibu me recibió con un abrazo también, lo había conocido hacían algunos meses atrás y era un pibe que estaba re loco pero era re bueno, había logrado tomarle un cariño inmenso.
Cuando llegué hasta Julián solo le hice puñito, conocía a Joaquín lo suficiente como para adelantarme a él así que simplemente lo halagué por su jugada y pasé al siguiente.

El 24.

─Hola linda ─se levantó para darme un abrazo y un beso en el cachete. A él también iba a saludarlo con puñito hasta que se me adelantó.

─Hola, ¿Fernández, no? Tremendo golazo hiciste ─sonreí incómoda─. Felicidades.

─Enzo ─se presentó sonriéndome por primera vez. Me quedé sorprendida, tenía una sonrisa radiante y combinaba perfectamente cuando sus ojos se achinaban─. A menos que me quieras decir mi amor, está todo bien pero tu hermano me va a matar.

Que flor de imbécil egocéntrico, ¿Quién mierda se creía que era este pelotudo?

─Mi hermano no gasta pólvora en chimangos ─sonreí falsa y escuché un "uhhh" de Lauta mientras que Julián lo golpeaba en las costillas a Enzo.

─Bajá un cambio linda ─rió meneando la cabeza─. Era una joda, no te bancas una vos eh.

─Es así con todos pa ─dijo Nico con una sonrisa de superioridad─. No te emociones.