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Thalía

Con Tiago las cosas iban bien, pero… Joder, estoy harta de que siempre haya un pero. Estoy hasta las narices de ser la que duda y hace daño por culpa de sus dudas. Pero nada, me faltaba algo, no sé qué era, pero me faltaba algo en él. Pero eso no quite que lo quiera con mi vida, porque si, me hace feliz y lo quiero. Lo tenía a mi lado, pero no me sentía plena, algo me faltaba.

–¿Estás bien?

–¿Por?

–Te quedaste mirando a un punto fijo.

–Todo bien –le sonreí.

–¿Segura?

–Sí, mi amor.

–Vale –besó mis labios.

–Amor…

–¿Si?

–Necesito alejarme un tiempo de ti –sus ojos se humedecieron.

–¿P-por qué?

–No lo sé, no sé qué me pasa.

–¿Fallé en algo?

–Noo, tu no –agarré sus mejillas–. Soy yo.

–¿Qué te pasa? –se preocupó.

–No lo sé, pero necesito estar un tiempo yo sola.

–Vale, Thalía –suspiró.

–Lo siento, Tiago.

–No te preocupes, en el fondo, me lo veía venir…

–Oye, mi amor por ti sigue intacto.

–Ya…

–Te quiero, ¿si?

–Esa es la diferencia, que vos me querés, yo te amo.

–No, yo te amo, Tiago.

–Sí –asintió triste.

–Esto no es por ti, es por mí.

–Lo sé.

Tiago se fue de mi casa y yo me quedé con mi hija.

–¿Lo has dejado? –últimamente, era más lista que el hambre.

–Sí –miré a mi hija.

–¿Por qué?

–Quiero estar sola.

–¿Y por qué?

–Abril, da igual.

–Vale…

¿Por qué siempre me pasaba esto a mi? ¿No podía tener una relación normal sin que me pase nada de por medio? Estoy harta de siempre lo mismo. Soy feliz pero entonces llega un punto y todo se va a la mierda. Trato de hacer las cosas bien, pero se me cruzan los cables, y entonces todo se va al garete, mira que yo lo intento… y no sé si es por mí, o porque tengo algo o alguien estancado que no se va. Y pensaba averiguar qué coño era lo que me causaba este tipo de problemas. ¿Cómo? Ni puta idea. Pero creo que lo consultaría el día siguiente, hoy ya estaba muy cansada…

Al día siguiente me desperté y no quise levantarme, ojalá pudiera quedarme todo el día en la cama. Mi hija apareció por la puerta y se tumbó sobre mi.

–Mami, tengo hambre.

–¿Qué te apetece desayunar?

–McDonald's.

–Joder, Abril.

–Bueno, pues una caña.

–Vístete y vamos.

Camisa de once balas IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora