Lifelong Love [MikoMina]

Onceavo Acto

Dos semanas pasan rápido, dos semanas donde se mantiene estable en su relación con Ariel y por fin puede respirar aliviado a pesar de que sus sentimientos han atentado más de una vez contra él.

Mikoto es feliz y eso es lo importante, se mantiene con su pareja sintiéndose por fin una persona madura y que puede formalizar un poco más.

Vive con el pelirrojo, pero el departamento es algo pequeño, lo justo para que dos universitarios vivan, pero ya no son universitarios, tienen que expandirse y fijarse un nuevo lugar donde vivir para darle paso a otros jóvenes que llegan a estudiar.

— No puede estar muy lejos, aun quiero ver a mi familia. - Le recuerda Ariel, mientras hablan del tema.

- Nada es muy lejos para mí cuando mis padres están en Japón.

Ariel le sonríe y regresa su mirada al libro que sostiene en sus manos.

Y es que para Mikoto estar en América es muy diferente de estar en casa, no es algún choque cultural o algo parecido, es solo que no es igual, ni se podrá sentir tan cómodo como lo desea.

Extraña a su familia y regaña a su mente por extrañar a Minato de ves en cuando.

Suspira porque no tiene idea de cuánto se alejara, sabe que dejara atrás la posibilidad de volver a verlo. Tiene que hacerlo si quiere seguir con su vida, la vida que eligió tener.

Observa su mano y ya no encuentra el anillo que su no novio le obsequio, su mano se siente vacía así que decide que comprara otro.

Observa a Ariel por unos segundos, ni siquiera se da cuenta cuando su pareja atendió su celular y se inmiscuyo en una platica que no logra entender.

A pesar de que el rostro de Ariel casi siempre es neutral Mikoto puede reconocer algunos gestos que le indican que no todo va bien, pero decide ignorarlo teniendo en mente que nada ocurre por qué Minato no esta.

Al dia siguiente apenas puede verlo, porque Ariel decide que tiene cosas que hacer.