Capitulo 99 Captur - hadas

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–¿Qué tenemos aquí?– maxwell lord levantó la mandíbula de la ninfa reconociéndola al instante, sam venia atada sobre un pterolycus (lobo alado) gris, las ninfas seguidoras de su media hermana habían muerto menos una, verónica había sugerido capturarla con vida después de que torturaran a vxy solo para informarles que sam, lena, alex y kara habían vuelto del inframundo – la reina de napea ¿eh? pero que suerte la mia, morgana va a estar muy contenta –

–yo no soy la reina de napea, soy la esposa de Alexandra reina de ébano y te exijo que nos dejes libres si no mi ejercito vendrá y acabara con ustedes antes de que el sol caiga – apenas había amanecido en el bello pero siniestro valle de ghur, el primer rayo de sol se reflejaba sobre las torres del castillo donde algún día Lena y Alex estudiaron magia, el hechicero oscuro no tenia intenciones de soltarla y mucho menos sabiendo que había una recompensa y todo el reino de napea si se atrapaba a sam – es tu ultima oportunidad maxwell–

–no me digas que hacer mestiza – de un golpe maxwell casi la deja inconsciente, la pobre de sam lamió sus labios solo para escupirle en la cara

–déjala idiota – linda se sentía como todo un león al momento de defender a sus amigas, lamentablemente estaba sola esta vez, su única preocupación en ese momento era que los orcos y ninfas no hubieran podido oler el rastro de Mirna que alcanzo a llevar a oisin y la llave de alura a un lugar seguro cuando linda fue capturada –te arrepentirás de habernos puesto la mano encima –

–no lo creo querida – maxwell iba a dormirla cuando verónica lo detuvo a tiempo

–creo que no debes hacer eso con la ninfa podría ser mas peligrosa dormida, además morgan quiere que le ayudes con el hada en las mazmorras, tal vez los amigos de la ninfa puedan ir contigo mientras le pregunto donde esta lo que buscamos– verónica miro despectivamente a sam, la odiaba por el simple hecho de ser mestiza, Lena sospechaba que la odiaba con mucha mas razón ya que sam era demasiado poderosa y peligrosa y que verónica jamás tendría oportunidad en un combate cuerpo a cuerpo y mucho menos igualar su poder – ve maxwell yo cuido de la ninfa – verónica vio que las escoltas de linda y sam eran contenidas en pequeños frascos mientras sam, linda y winn eran llevados a los calabozos

–me debes varias veronica, el asalto al campamento fue mi idea y no pretendo que te quedes con el crédito una vez mas –

–si, si, si, vete prometo que el crédito que será tuyo – un cuervo que reposaba sobre una rama se acerco a la hechicera dragón –las ninfas se abstuvieron de matarla por el precio que le has puesto a su captura, aunque la mayoría pensaba que el reino de napea era mucho mas valioso que todo el oro que les prometiste – Gayle la única seguidora de maggie viva tenia a unas cuantas ninfas cazarrecompensas aun con ella, pudieron capturar a sam antes de que las demás la mataran – la mantendrás con vida hasta que llegue Morgana supongo–

–efectivamente, morgana va a estar muy satisfecha con la ninfa, ahora discúlpame un momento tendré una charla con ella y tal vez yo sea quien le saque el paradero de la espada de fénix –

–si logras hacerlo, te hare un altar a tu nombre jajajaja –

en los calabozos

de uno de los grilletes que colgaban de la pared yacía diana completamente inmóvil, morgan se había ensañado con ella un dia mas, la pobre apenas y respiraba pero aun así no diría el paradero de la llave del secreto mucho menos el paradero de la sala de los dones, el maldito de Morgan pretendía hacer que las hadas trabajaran para ellos como esclavas haciendo dones y polvo de hada el cual podrían usar como moneda de cambio con los demonios y así obtener favores –suéltame pedazo de popó, te ordeno que me sueltes – linda cayo al piso con un golpe seco en lo que los orcos que la escoltaban colocaban los grilletes en la pared –malditos, suéltenme les digo – linda apenas registro la mazmorra y se dio cuenta de que una de las hadas amazonas mas temibles colgaba ahí ya sin vida –diana, ¿diana? que le han hecho idiotas les exijo que la suelten, malditos –

El don del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora