Capitulo 48 La mejor estrategia nunca antes vista

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Kara habría pensado que regresaría a la comarca cargada en hombros en una caravana llena de flores y guirnaldas, pero no... se equivocó totalmente.

La primer regañina se le había dado antíope que le hizo saber lo mal parada que se encontraba en todo momento en la pelea con su hermana, luego fue Alex que ya tenia nuevos ejercicios para ella y que estaba dispuesta a realizarlo en cuanto llegaran a los prados de las hadas amazonas, luego estaba diana que le reprochó toda la magia que no uso en el combate y por último.... Sam.... No es cierto Sam fue la única que la abrazó.

–jugaste con ella, utilizaste solo un poco de magia kara, no puede ser pensé que te morías, ¿sabes la angustia que sentía en mi pecho por tu culpa? – pregunto lena gritándole a su novia que venía muy maltrecha detrás de su caravana –me alegra mucho que hayas ganado porque no te salvarás de la paliza que te voy a dar llegando –

–lena, bebe..... puedes dejarlo.... Gane ¿esta bien? Pude derrotar a una de las hadas mas brutales de la historia, por favor, me duele la cabeza– rogo la pobre rubia apaleada que arrastraba los pies

–estuve a punto de tomar tu lugar kara danvers – uh, uh su nombre real, ya no mas cariño.... O amorcito.... O bebe..... no ya no mas – estuve a punto de enviar a todos por un maldito agujero, ¿sabes lo que estuviste a punto de provocar por jugar con tu adversaria? –

–mi amor puedes reclamarme mañana, estoy muy cansada–

–nada de mi amor, en cuanto llegues te pondrás a entrenar me oyes a entrenar– contesto la bruja gritando, ni Sam ni Alex se acercaban, estaba muy pero muy molesta

–¡pop! – kara de pronto desapareció o eso pensó lena que buscaba entre lo que eran sus ropas y armaduras

–¿Qué paso con ella? – pregunto Alex que miraba las prendas de kara

–de....de....sa...pareció– dijo lena tartamudeando no sabia a donde se había ido su novia

Sam busco entre las ropas que creyó haberlas visto moverse – oooooohhhhh mi bebe, mi bebe esta asustada– dijo abrazando al pequeño cachorro rubio que lloraba y gemía con dolor – ¿ella te pego? Nooooo no llores por favor, yo te voy a vengar..... mala lena... mala lena –

–Sam dame a mi novia, kara no necesita mimos– dijo aun enojada con ella

–¿qué pasa aquí? – pregunto diana mirando a las tres brujas que peleaban por la cachorra – no puede ser – dijo al ver a la joven cría de Golden – decidiste escapar, pequeña cobarde– dijo diana a su aprendiz tomándola del cuero peludo – aprendiste a salir de tus problemas con tu arma más letal–

–¿Qué tratas de decir? – pregunto Alex – ¿ella lo usa a su favor? –

–¿Qué no es obvio? Kara aprendió a escapar de sus regaños en su forma natural– dijo alejando un poco a la cachorra, pareciera que kara engatusaba o mejor dicho encachorraba a la gente a su alrededor– no lo soporto ¡que divina se ve!.... ven aquí pequeña –

–diana..... dame a mi novia– lena las seguía mientras la cachorra era cargada por la poderosa diana– diana, por favor aun no acabo con ella– diana ya no respondía estaba muy ocupado mimando a la perrita

cuando llegaron a anwyn diana salió de su trance entregando a regañadientes a la cachorra a su ama y señora – no puede ser que causes tanta trifulca kara danvers..... no, no me hagas esos ojitos sigo enojada contigo– dijo ella colocándola sobre una manta ya dentro de su tienda de campaña

la cachorra la siguió hasta donde lena guardaba un poco de pan y una pieza de ciervo que comieron en la mañana – debería de comérmela sola.... No es como que tu pequeña panza necesite de mucha carne– la pequeña la miro.... ¡Oh no! su arma más letal – ni se te ocurra cariño – lena se dio la vuelta y comenzó a comer, quería obligar a kara a volver a su forma de humano –

El don del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora