El ambiente estaba cargado de tensión, de ira y temor. Un sombrío resplandor se encendía entre aquel poderoso y magnético punto de fuerza, donde ambas almas opuestas, combinaban el aura que poseían, intensificando los poderes para prepararse ante la posible pelea, luchando con sus interiores; corazones enamorados, intentando acallar sus instintos, magia; apagarse en ese momento con tal de que el otro viviera, aunque el mismo muriera, todo con tal de proteger a su amante prohibido.
Pero uno de ellos, ya ni siquiera tenía el control de su mente ni cuerpo propio. Los ojos oscuros, que permanecían con un cierto brillo, era la prueba suficiente, que la maldición, el control de Grizella Lee, había sido mucho más fuerte que la inocente alma de aquel hombre atrapado por más de cien años.
El páramo había dejado de ser un hogar, pues todo estaba destruido, desolado, muerto. No era el lugar seguro que solía ser. Jisung odiaba aquel sitio, así tanto como lo amaba. Toda su vida se refugió detrás de sus muros, creyendo que a su madre le hubiera gustado que así fuese, pero detesta respirar el mismo ambiente que todos los que alguna vez le hicieron daño y le siguen produciendo dolor. Nadie merece ser pisoteado. El único consuelo que pudo encontrar fuera de todo esto, fue a Minho, ¿Pero ahora que le quedaba? Si ese mismo chico que le había prometido nunca lastimarlo, que le juraba que lo amaba y era lo único que quería en esta vida, está justo frente a él siendo devorado por la magia, la oscuridad y que, en ese momento, lo miraba con tanta ira impregnada en su mirada, que Jisung se preguntaba si era el mismo Minho con sus ojos tan bonitos y brillantes como sus estrellas favoritas. Si de verdad su constelación preferida, había sido tragada por la oscuridad de aquel agujero negro que destruye el interior de Minho, robándose finalmente, su humanidad entera.
El enorme lobo negro gruñía, dando pasos lentos hacia adelante, dirigiéndose con cautela a Jisung, quien se había puesto rígido en su sitio. Hyunjin seguía tirando de él, pero el hada no desistía.
— Jisung... por favor
— ¡Ya te dije que no, Hyunjin! — se zafó una vez más del agarre del rubio, esta vez empujándolo con fuerza lejos de él, haciéndolo dar traspiés hacia atrás y caer de sentón sobre un arbusto, justo en el momento en que Minho saltó y se abalanzó sobre ellos.
— ¡Jisung!
El hada había creado un escudo protector con sus manos, que tales extremidades, se encontraban tapando su rostro con las palmas hacia adelante. Jisung había cerrado los ojos con fuerza esperando el impacto, pero cuando no lo sintió se percató de aquella semi esfera dorada que se encontraba frente a él, dejándolo sorprendido. Poco a poco iba conociendo sus nuevos poderes.
Buscó a Minho con la mirada encontrándolo en el suelo, jadeante y con una leve herida que se hizo al rebotar y caer al suelo. Jisung sintió un nudo de preocupación oprimiéndole el pecho, estremeciéndolo. Deshizo el escudo, y miró con los ojos vidriosos a Minho poniéndose tambaleantemente de pie.
— ¿Minho? ¿Me escuchas? — dijo Jisung suavemente, intentando llegar al alma humana del chico. Pero recibió un gruñido como respuesta.
Grizella soltó una carcajada. Estaba sentada con las piernas cruzadas sobre la roca, jugando con su cabello, ensanchando una enorme sonrisa cínica y divertida, disfrutando del espectáculo.
— No puede oírte... — canturreó, elevando la mano en donde mostraba entre sus dedos el núcleo de magia, con el que controlaba a Minho — Ya no podrá hacer más lo que le plazca, haré que te mate y sentiré su sufrimiento el triple de doloroso que sientes tú en este momento. Será un éxtasis para mí ver como sostendrá tu cadáver y llorará el resto de su vida.
Minho volvió a atacar a Jisung desplazándose contra él, blandiendo sus garras y abriendo en grande el hocico tratando de devorarse al hada, quien empezó a correr asustado y nervioso, tratando de huir de Minho. Parecía un juego del gato persiguiendo al ratón, pues daban vueltas entre sí. Jisung esquivando al lobo y Minho cazando a su presa. Una obra de teatro de comedia para Grizella, pero una de terror para Hyunjin, que miraba horrorizado la escena.
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Beauty In Death 》 Minsung
FanfictionEn el reino de Luceat existen todo tipo de criaturas mágicas que viven bajo la protección de la monarquía y viceversa. Entre cada uno de esos seres, existe un hada muy poco común, cohibida por el menosprecio que los demás le dan y encerrada en su bu...