D I E C I O C H O

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De la calentura que tenia claramente no estaba pensando bien. Era de noche, me subí sola a un Uber, llevando una caja pesada, y yendo a la casa de una persona que vi dos veces en mi vida.

Pero necesitaba demostrar y dejarle en claro que no me va a comprar con estas cosas, no me interesa no soy así.

Con ayuda del conductor baje la caja y toque timbre, espero no equivocarme de casa.

-Sandra: ¿Emilia? -dijo con pijama- ¿Qué haces a esta hora acá sola? Pasa.

Me ayudo con la caja, la pobre Sandra no entendía nada. Ellos habían terminado de cenar, Guille estaba tomando un café con ella.

-Guille: chiquita -me saludo- que raro a esta hora vos sola acá... -vio la caja- ¿Qué es eso?

-Emi: perdón la hora, no quería interrumpirlos, vengo a devolver esto.

Ellos dos se quedaron viendo la caja, no entendían nada.

-Guille: ¿Mauro te regalo eso?

-Sandra: no me digas que esa fue su manera de disculparse -se golpeo la frente con la mano-

-Emi: si, yo no puedo aceptar esto, de verdad no me interesan los regalos caros ni la plata... perdón que los meta en esto no tienen nada que ver, simplemente díganle que le devuelvo esto. Ya me voy.

-Cande: ¡Emi! ¿Qué haces ac... -vio la caja- mierda.

-Emi: ¿sabias de esto?

-Cande: si... le pedí que lo cancele pero ya era tarde, sabia que lo ibas a tomar mal, Mauro es un pelotudo.

Se ve que tantas voces hicieron que Duki baje, el estaba en el que había sido su cuarto.

-Duki: Emilia -quedo en shock-

-Emi: perdón que haga esto, no necesito ni quiero nada, menos comprado. Ya me voy igualmente así que tranquilo.

Toda su familia lo miro fijo. Todos estaban enojados y claramente me defendían a mi, sabían que yo tenia razón.

-Duki: ¿podemos ir a mi cuarto? Así no nos interrumpen.

En verdad estaba enojada, no quería ni verlo, pero no quería hacer un escandalo en su casa y obviamente accedí.

Fue todo tenso, apenas entramos a su cuarto claramente había olor a marihuana, lo que me hizo toser un poco y el abrió las ventanas.

-Duki: cierro para que no se metan -dijo por la puerta- te aseguro que Candela va a estar parada cerca para escuchar.

-Emi: no te preocupes, esto va a ser rápido. Solo acepte para no armar bardo abajo, frente a tu familia. Nada mas.

-Duki: no por favor espera. -me tomo la mano- se que estuve mal con ese regalo, no quería hacerte sentir mal ni nada.

-Emi: es que me mandaste algo muy costoso, ¿Cómo queres que lo tome? Sentí que me querías comprar, te quiero dejar bien en claro que no me interesa tu plata, ni tu fama, ni quien seas. Para mi sos una persona mas.

-Duki: y lo se, por eso... -respiro- por eso le pedí ayuda a Candela para pedirte disculpas, aunque no escuche sus consejos, pero lo hice de buena intención, no quería comprarte, solo tener un buen gesto con vos.

-Emi: ¿de verdad? -empece a calmarme-

-Duki: te lo juro. Nunca hago esto, no me gusta, por eso no se hacerlo. Intente hacer mi mejor esfuerzo. -se sentó en su cama-

Sentía que el estaba siendo muy sincero. Leía en su mirada que no había maldad, estaba intentando abrirse aunque le costara, puedo notar que esto lo avergüenza.

-Emi: esta bien... no hace falta que te disculpes. No fue con maldad, y valoro mucho tu esfuerzo. -me sonrió- ahora discúlpame vos a mi que vine hasta acá, a este horario, moleste a tu familia, incluso ni siquiera me cambie. -señale mi uniforme-

-Duki: no importa, igualmente estas hermosa.

ESPEREN. ¿QUE? ¿QUE DIJO? Bueno, eso fue muy incomodo. Ambos quedamos en silencio y ninguno sabia que decir. Note como mi cara empezó a arder, seguro estaba colorada a mas no poder.

-Emi: bueno ya tengo que irme. -me pare-

-Duki: sisi, ya es tarde.

Ambos salimos de ese cuarto y nos sentíamos raros. Al llegar a la cocina estaban todos expectantes a ver que pasaba.

-Emi: ya me voy a casa yo... perdón por eso, no quiero que piensen que soy una desubicada. Pero soy así... voy demasiado al frente.

-Sandra: nos encantas. Nada que disculpar, cuando quieras podes venir en una situación mas linda.

-Guille: ¿te vas sola?

-Emi: si, mi Uber esta por llegar.

-Guille: no podes irte sola, son casi la 1 am. Cancélalo, Mauro te lleva.

El miro a su papa, quedo en shock.

-Duki: te llevo, Guillermo tiene razón.

-Cande: nos vemos Emi -me abrazo- después te hablo por Instagram.

-Sandra: chau hermosa, besitos a tu mama.

-Guille: avisen cuando llegan. -le guiño el ojo a Duki-

Nos subimos al Audi blanco de Duki, el puso música y en su gps mi dirección, marcaba 15 minutos.

-Emi: perdón por eso, tuviste que aceptar traerme.

-Duki: nono, mi papa tiene razón, no podías irte sola, te podía pasar algo.

No se, pero fue lindo sentir que al menos se preocupaba por mi y que llegue bien a casa, tranquilamente podía haber no aceptado traerme.

El viaje fue algo tenso, la música ayudo mucho, estuvimos bastante en silencio.

Hasta que finalmente llegamos a la puerta de mi casa.

-Emi: es ahí, en la reja blanca. Gracias.

-Duki: no es nada, nos vemos pronto.

Me saque el cinturón, agarre mi celular y no sabia como despedirme, el me miro fijo esperando un saludo.

No se porque, pero me salió de adentro la necesidad de abrazarlo, y lo hice. Fue como si el tiempo se parara. Nos abrazamos durante varios segundos y fue como si ninguno quisiera separarse... ¿Qué estamos sintiendo ambos? 

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Uy uy, estos dos se están acercando demasiado... 

Gracias por leer <3<3

Condenado a vivir |Duki & Emilia Mernes|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora